Por Jose TorresMAPASTEPEC, 31 ago (Reuters) – Cientos de migrantes
centroamericanos y de naciones del Caribe continuaba el martes
su camino hacia la capital de México, pero enfrentando a su
paso a fuerzas de seguridad y agentes de migración tratando en
algunos casos con violencia de impedir su avance.Familias enteras llegaron el martes a las pequeñas
comunidades Mapastepec y Escuintla, en el sureño estado Chiapas,
fronterizo con Guatemala, después de caminar muchas horas bajo
el intenso sol desde la vecina Tapachula, a unos 100 kilómetros.Pero lejos de encontrar un refugio para descansar en el
largo camino, los migrantes fueron recibidos con un nuevo
operativo de la autoridad migratoria y la Guardia Nacional para
tratar de disolver a la caravana que partió de Tapachula el fin
de semana.Fuerzas de seguridad detuvieron violentamente a varios
migrantes, incluyendo niños, según testigos.”Se los llevaron”, dijo a Reuters Bertha, una mujer
guatemalteca que narró llorando cómo “personas con camisa
blanca” se llevaron a tres de sus hijos de cinco, cuatro y tres
años cuando ella los dejó bajo el cuidado de otras personas para
ir a comprar alimentos.En la víspera, otra de sus hijas le fue arrebatada de los
brazos cuando la estaba amamantando, aseguró.Los migrantes, cansados de esperar en Chiapas meses o
incluso hasta un año respuesta a sus solicitudes de refugio en
México, emprendieron el fin de semana el trayecto a Ciudad de
México, con la esperanza de que su marcha ayude a visibilizar su
demanda.Pero tan pronto emprendieron el viaje, fueron atajados por
agentes del Instituto Nacional de Migración (INM) y de la
Guardia Nacional, que han intensificado sus operativos para
frenar la multitudinaria marcha, incluso debido al “excesivo de
fuerza” dos de ellos fueron cesados.”No venimos con violencia, pedimos que nos dejen pasar por
las buenas (porque) no nos vamos a detener”, dijo a periodistas
desde un campamento improvisado en Escuintla un joven que se
identificó como migrante haitiano y que logró avanzar después de
una confrontación con agentes el fin de semana.Naciones Unidas pidió el martes al gobierno de México
respetar los derechos de personas migrantes y solicitantes de
asilo, ante el incremento de agentes de migración y de la
Guardia Nacional en la frontera sur. También externaron su
preocupación por las imágenes donde se observaba a algunos
agentes golpeando a migrantes.”Estamos frente a una política migratoria pobre”, dijo a
Reuters, Javier Urbano, experto en temas migratorios por la
Universidad Iberoamericana.
(Reporte de José Torres en Mapastepec, Chiapas y Lizbeth Díaz
en Ciudad de México, editado por Adriana Barrera)

Fuente: La Nación

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