Esta obra mereció el International Property Awards 2020/2021 a la Mejor Arquitectura de Residencia Unifamiliar de América. (Javier Picerno/)El antiguo concepto romano de genius loci alude al “espíritu del lugar”, y se refiere tanto a la singularidad de un espacio como a la divinidad que lo habita y protege. Una idea que suena inasible en términos abstractos, pero de una evidencia rotunda cuando es capturada por la arquitectura.Carla Bechelli, retratada en el acceso a su casa, ese punto de contacto entre arquitectura y naturaleza. Postigos de varillas generan matices intermedios que tamizan la luz y hacen de segunda piel de la casa. La ventana corresponde al escritorio que se ve a continuación. (Javier Picerno/)“Hay que ‘escuchar’ lo que el lugar transmite… Ahí, en el silencio, hay muchas respuestas”, describe esa búsqueda la arquitecta Carla Bechelli, alma máter del estudio que fundó en 2003. Desde entonces, desarrolla proyectos de diferentes escalas y programas con reconocimientos en nuestro país y el exterior, como la invitación a la Bienal Internacional de Arquitectura de Venecia 2016.En el espacio de trabajo, mesa, estantería (ambos de Las Marinas), silla (Landmark), alfombra (Rugit) y maceta con palmera rafis (Ciudad Naturaleza). (Javier Picerno/)El proyecto que recorremos hoy tiene un significado especial: no solo se trata de su propio hogar, sino que acaba de ser premiado en un contexto mundial en que los espacios residenciales han cobrado más relevancia que nunca. Se trata de una casa que preservó la estructura original, pero que se renovó integralmente para adecuarse de un modo fresco al paisaje del Boating Club de San Isidro y a las necesidades de una familia de cinco con adolescentes: una planta baja con ambientes amplios y flexibles, áreas más privadas arriba e importantes expansiones en todos los niveles.Seguir el paso de las estacionesGrandes superficies en madera de incienso contrastan con la caja blanca pintada en látex satinado en espacios que remiten a su contexto náutico. Poltronas ‘Amalfi’ de caño y tejido kraft (Mausy Design). (Javier Picerno/)Casa de arquitectos. Líneas modernas, materiales puros y un patio tropical que conecta los ambientesEn el comedor, sillas con funda de lino (Melazza). (Javier Picerno/)Una gran alfombra (Rugit) enfatiza las líneas del living con lámparas de techo ‘Trípode’ (San Isidro Luz) y de pie modelo ‘Tortuga’ (Negro). (Javier Picerno/)Mesa de apoyo (Negro) y, sobre el sofá, manta de gasa (Lote Propio). (Javier Picerno/)La ubicación marcó el rumbo. “Nos inspiró la idea de un diseño que transmitiera paz y cobijo al tiempo que incentivara el encuentro y el disfrute cotidiano”, nos cuenta Carla Bechelli.Un playroom “para grandes”Lámpara de pie (San Isidro Luz), mesas ratona y auxiliar en madera y hierro y mueble bar (todos diseños de Carla Bechelli Arquitectos). (Javier Picerno/)Integrado a la galería y al living, “el playroom de grandes”, como lo llaman los dueños, tiene sistema de sonido envolvente, una pantalla oculta y una gran biblioteca que guarda los tesoros de la familia.Carla Bechelli, retratada en el sofá en “L” (Negro). (Javier Picerno/)Persianas americanas (Hunter Douglas), banquetas con tiento (Yrigoyen), velas (Bohemia Velas) y mesa inglesa hexagonal con cajones, heredada. (Javier Picerno/)Integrar el verdeEl leñero está protegido por una puerta que repite el estilo del cielo raso, y la bacha para el asador también disfruta de un fondo verde, con un paño fijo de iguales dimensiones que la parrilla. (Javier Picerno/)Para que la galería, profunda y espaciosa, no oscureciera el living, se proyectó una cubierta transparente sobre tirantes de lapacho que tamizan el sol.Grandes aberturas de PCV foliado símil madera con DVH (Perfiles y Servicios) integran este espacio con piso de Travertino rústico. Velas (Bohemia Velas). (Javier Picerno/)Acorde con una casa en el Boating, el deck de madera se convierte en muelle. Las reposeras se mandaron a hacer a medida en la casa de muebles para exterior Del Árbol. (Javier Picerno/)Como de vacaciones. Una casa en contacto con la laguna que evoca playas exóticasCocina transparenteEn sintonía con la calidez de las aberturas de madera, el comedor diario con clásicas sillas Thonet. (Javier Picerno/)Las vistas y las dos luminarias colgantes (San Isidro Luz), diseñadas por Carla Bechelli Arquitectos, son los grandes destacados en la cocina.Planta alta: feliz encuentro con el afueraComo no podía ser de otro modo, la caja de la escalera también tiene aberturas que enmarcan el paisaje. En el cuarto del hijo varón, mueble con escritorio diseñado por Carla Bechelli Arquitectos. (Javier Picerno/)Cama (Rosen) con mantas grises (Masai Deco), cortinas roller (Hunter Douglas), lámpara de pie (San Isidro Luz) y sillón ‘Gervasoni’ (Lebon House). Los cuartos de la planta alta tienen pisos de lapacho. (Javier Picerno/)Estantería de paraíso (Tienda Vainilla), respaldo de cama forrado (Masai Deco), lámpara (San Isidro Luz), escritorio y cajonera (Las Marinas). (Javier Picerno/)Una suite llena de luzSomier (Rosen) con almohadas, almohadones, mantas, pie de cama y cover de Lote Propio. Mesas de luz (Talleres Sustentables). Alfombra (Rugit). (Javier Picerno/)Los vidrios se mantuvieron sin marcos ni carpintería para un efecto de continuidad. Macetas y plantas (Ciudad Naturaleza). El enorme espejo es parte del vestidor que sigue a continuación. (Javier Picerno/)La terraza privada vuelve con un deck bien náutico y un ritmo particular en la construcción que favorece distintos puntos de vista y situaciones para disfrutarla según el recorrido del sol.El vestidor fue diseñado por Carla Bechelli Arquitectos con herrajes de Häfele. Banco (Net Muebles). Cajonera (Talleres Sustentables). La organización de los placares estuvo a cargo de SOS En Orden. (Javier Picerno/)Hidromasaje (Buck & Buck), grifería (FV) y sanitarios ‘Marina’ (Ferrum). (Javier Picerno/)El baño de la suite tiene mesada de mármol de Carrara con bachas con desborde oculto incorporadas, piso de porcelanato Portobello, alfombra de yute (Hometh) y banco tallado a mano (Estudio Ayke) con toallas (Luna Deco), jabones artesanales y cepillos (ambos de Saponarium).Subiendo desde la planta baja, la escalera desemboca en este estar íntimo que actúa como articulador entre los dormitorios con vistas a ambos lados del río. (Javier Picerno/)La estructura original, enriquecida con buen diseñoEl último piso es un espacio de estudio y taller con terrazas y vistas 360°. Las barandas de vidrio templado priorizan que esa perspectiva no encuentre obstáculos. (Javier Picerno/)Detalles del cuidado trabajo de paisajismo, que llevó a cabo Lucía Holmberg. (Javier Picerno/)Tanto el comedor al aire libre como el interior comparten el lujo de convivir con un arce. Paisajismo brillante que envuelve con delicadeza. (Javier Picerno/)El cuidado diseño de iluminación destaca algunos de los rasgos más atractivos del proyecto. (Javier Picerno/)

Fuente: La Nación

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