Los arroceros argentinos están en plena tarea de cosecha. Debido a que el cultivo fue sembrado fuera de su fecha óptima, los rendimientos no son los esperados. 
Por eso, será fundamental prestar mucha atención a las pérdidas de cosecha, las cuales, bajo ninguna situación deben superar las 140 kilos por hectárea e independiente del rendimiento del cultivo. 
Hernán Ferrari, experto de INTA Concepción del Uruguay del departamento de Mecanización y Tecnologías Agropecuarias, recomendó una serie de técnicas sencillas para evaluar las pérdidas de cosecha, considerando que las condiciones de trilla de los lotes arroceros son dificultosas, con agua o barro, impidiendo medir las pérdidas naturales del cultivo o dadas por el cabezal. 
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Sin embargo, el 80% de las pérdidas se dan por cola de la máquina. Para comenzar a cuantificar las pérdidas, Ferrari dice que se necesitará una bandeja de 56 centímetros cuadrado (un cuarto de metro cuadrado), una botella plástica vacía y una jeringa de 15-20 centímetros cúbicos. 
“Cuando la máquina esté circulando en línea recta, nos posicionaremos a su lado, entre el eje delante y trasero, lanzando la bandeja a la panza de la máquina, para que el mayor contenido de la máquina caiga dentro de la bandeja”, dice. 
Luego de esto, el siguiente paso es el más importante. Se debe separar el grano, también los granos de las panojas no trilladas, mantener la granza dentro de la bandeja y retirar solo el material voluminoso (paja). 
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De esta forma, explica Ferrari, hay que tomar una botella plástica, cortar la base y dejar el pico más una fracción del cuerpo de la botella. Al pico se le debe pegar la jeringa, a modo de extensión, y borrar las marcas de volumen que traía la jeringa. Paralelamente, se deben pesar, en una balanza de precisión, 10 gramos de granos de arroz.
Con este vaso armado (botella más jeringa), luego se agrega agua -sin rebalsar- y los 10 gramos de granos. Esos granos precipitan al fondo de la jeringa y se hace una marca en ella (esa marca es equivalente a 100 kilos por hectárea de pérdida). La mitad de ese volumen de grano, para abajo en la jeringa, serán 50 kilos de pérdida y la mitad de esto serán 25 kilos, y de la mismo forma hacia arriba.  
En el campo, cómo se debe llevar a cabo la medición. 
Todo el material recolectado en la bandeja se deposita en ese vaso medidor. De esta forma, los granos precipitan, de la misma forma que sucedió cuando se armó, y el material liviano, la granza y granos vanos, flota en el líquido. 
Mirá el video completo aquí.
 
 
 
 
 
 
 

Fuente: InfoCampo

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