Un festejo atragantado sobre la hora que no alcanza para romper la inercia. Un empate con dos miradas opuestas. Fue tal la voracidad albiceleste en el arranque contra Colombia que a los 8 minutos de juego ya había marcado el 2-0 más rápido en toda la historia de las eliminatorias en condición de visitante. Cristian Romero y Leandro Paredes, los encargados. La otra cara de la moneda fue la falta de contundencia en el segundo tiempo para un conjunto que desde hace varios años suele sufrir por la falta de gol.La Argentina exhibió un arranque explosivo, desbordante, en el que acorraló a Colombia en su propia área. Fueron minutos en los que resultó capaz de configurar un escenario muy distinto al que imaginaba, seguramente más dificultoso. Por méritos propios, los dirigidos por Lionel Scaloni pusieron más ambición y manejaron la pelota. Hubo vocación ofensiva, despliegue, búsqueda por los costados, circulación rápida. Y goles, como consecuencia directa.Lionel Messi, de la selección de Argentina, se lamenta durante el partido ante Colombia, en Barranquilla. (Fernando Vergara/)Las estadísticas recogidas recientemente por @VarskySports dibujan a la perfección el déficit que arrastraba el equipo nacional para convertir. Desde 2014, en el camino a Rusia 2018, hasta la actualidad, la selección disputó 24 encuentros por las eliminatorias y marcó 28 goles (12 de local y 16 de visitante). Las conquistas se reparten de este modo: seis en el ciclo de Gerardo Martino, nueve en el de Edgardo Bauza, cuatro en el de Jorge Sampaoli y nueve en el de Scaloni.Prácticamente, la Argentina no ha conseguido goleadas en este recorrido. Se recuerda el 3-0 sobre Colombia en noviembre de 2016. La noche en San Juan (con Bauza al mando) que resultó liberadora de la mano de Lionel Messi, Lucas Pratto y Ángel Di María. Más adelante, en octubre de 2017, se destaca el 3-1 sobre Ecuador. Con tres goles de un Messi extraordinario, la selección ganó en Quito y se clasificó al Mundial.Dentro de este contexto, Brasil es el conjunto que más veces anotó en las eliminatorias desde el 2014: 55. Lo peculiar es que entre los diez países del continente, la Argentina se ubica en el séptimo lugar. Atrás apenas aparecen Paraguay, Bolivia y Venezuela.Queda claro que la abundancia de nombres del plantel en el ataque no garantiza una importante cuota goleadora. Indudablemente, es una rareza que en un país que en todos estos años ha tenido a Messi, Gonzalo Higuaín, Sergio Agüero, Paulo Dybala, Lautaro Martínez y Lucas Alario, por mencionar algunos, muestre una escasa efectividad en el arco rival. Se insiste, se habla de un período que abarca desde el 2014 hasta la actualidad.Lautaro Martínez es el goleador del ciclo Scaloni, pero no anotó en los últimos dos partidos. (Tato Pagano/AFA/)“No estamos sufriendo en la marca, creo que estamos sufriendo más a la hora de concretar en el arco rival. Tenemos que generar más situaciones y hacer goles, es lo que queremos todos”, había reconocido el DT Scaloni en las últimas horas. Y añadió. “Contra Chile, por ejemplo, terminamos el partido con tres o cuatro delanteros y eso no nos garantiza hacer goles. Tenemos que ocupar bien los espacios y las situaciones después vendrán”. Por lo hecho en los primeros 45 minutos, sin dudas que el entrenador podrá encontrar puntos altos para destacar. Que en la selección hay variantes ofensivas está demostrado.Es cierto, también, que en lo que va del trayecto hacia Qatar 2022 el equipo albiceleste ha recibido pocos tantos (5 en 6 partidos). Lo que por momentos chocaba con una impericia para darles el toque final a las situaciones de gol que genera. A las intenciones, anoche, Argentina le agregó una cuota de contundencia en el primer tiempo. Ese aspecto que el propio Scaloni le había pedido a sus jugadores que tenían que corregir. Falló el técnico con los cambios en la segunda parte, es verdad, y tras el descuento colombiano el equipo empezó a dilapidar situaciones de riesgo. Por eso, en el saldo final, el sabor resultó amargo.

Fuente: La Nación

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