Reconocido por dar batalla en cada partido, Diego Schwartzman debió exprimir al máximo esa virtud en el encuentro que le ganó este lunes por los octavos de final de Roland Garros a Jan Lennard Struff. Y es que el comienzo del argentino no fue el mejor, y el alemán rápidamente se adelantó 5-1 y 40-15.Pero el número 10 del mundo consiguió salir de ese momento más que complejo, y levantó cuatro set-points en ese game para quedar 2-5. Escapó de otro punto de set en el octavo game, uno más en el noveno, y finalmente, zafó una vez más en el tie-break, cuando quedó 6-7, pero consiguió salir adelante para llevarse el desempate por 11-9. Incluso en el último punto del set tuvo algo de fortuna Schwartzman, porque su tiro cruzado dio en la faja, picó cerca de la red y Struff llegó muy forzado a esa pelota, y dejó su respuesta en la net.Tras la victoria, Schwartzman admitió: “En el comienzo del partido estaba con poco impacto. En ningún momento me sentí cómodo, lo que intenté fue soltar un poco el brazo y pararme un par de metros más atrás para darme margen, pegarle fuerte y sentir que la bola entraba. Quizás intentaba como en los otros partidos estar cerca de la línea, pero jugar por ahí me costó, así que intenté dar un paso atrás, pegarle más fuerte y con más altura. Eso fue lo que intenté, por momentos salió bien, pero así y todo cometí errores y él tuvo muchas chances”.Diego Schwartzman necesitó tres horas para ganarle al alemán Jan-Lennard Struff en Roland Garros (Julian Finney/)Sobre los altibajos que tuvo el desarrollo, más allá de que consiguió imponerse en tres parciales, el argentino comentó: “El arranque mío fue malo. El de Struff fue bueno, pero considero que yo arranqué peor de lo que él arrancó bien, quizás por eso pude volver en el primer set. En el segundo también, iba dos veces quiebres abajo, no estaba cómodo con el partido, de a ratos podía jugar un poquito mejor, pero cuando sentía que pasaba eso, cometía algún error o él tenía algún acierto, y no me podía escapar en el score. Después de ganar el segundo set, sentí que él bajó un poco, yo subí bastante respecto de los dos primeros, y cuando parecía que me ponía 5-0 y el partido se terminaba, perdí un game con mala suerte, él acertó un par de líneas en el 0-4, y aunque él estaba con menos energía, se levantó con el apoyo de la gente, tuvo buenos games. Costó un poco el final, un poco mérito de él, algo de culpa mía. Me costó soltarme y por eso fue parejo en todo momento”.Diego Schwartzman celebra en su partido de cuarta ronda contra Jan-Lennard Struff (Julian Finney/)De este modo, Schwartzman se convirtió en el cuarto argentino que llega al menos tres veces a los cuartos de final en París, tras los pasos de Guillermo Vilas (9 ocasiones), y a la par de Guillermo Cañas y Juan Martín del Potro, que también escalaron en tres ocasiones hasta la etapa de los ocho mejores del torneo.En total, el tenista porteño acumula ahora cinco llegadas a los cuartos de final en torneos de Grand Slam. El récord argentino en ese rango lo ostenta el histórico Vilas (19), seguido por Del Potro (13) y David Nalbandian (10).Costó, pero sigue en carrera: Schwartzman va por más en París (Julian Finney/)Sobre estos logros, Schwartzman explicó: ”Son estadísticas que están buenísimas, y hay que tenerlas presentes todo el tiempo, Ustedes, yo, a veces nos olvidamos en el día a día, y son cosas que si me lo decían hace 10 años ni me lo imaginaba, y hoy de a poco las voy logrando y sosteniendo en el tiempo?.Y amplió: ”Es más fácil disfrutar eso cuando las cosas salen bien. A mí me golpean mucho las derrotas, me dura varias horas o quizás un día, sobre todo por cómo había sido esta gira. Por el esfuerzo que hago todos los días, que capaz se ve poco, y con el equipo y los profesionales intentamos hacer lo mejor, y cuando eso no se puede trasladar a la cancha, uno lo sufre un poco más. Pero cuando las cosas salen, se disfruta mucho más. Cuando entrás a la cancha con confianza en lo que uno está haciendo, y lo que podés llegar a hacer en un Grand Slam, te da una seguridad para poder ganar”.En la próxima etapa, Schwartzman jugará contra Rafael Nadal, 13 veces campeón. “Creo que en el comienzo de cada partido contra Rafa hay que caminar pensando en que se puede ganar, tener oportunidades, buscarlas, y pensar en cualquier cosa menos en Rafa, porque si vos pensás que vas a tener que jugar cuatro o cinco horas, y en todo lo que significa Nadal en Roland Garros, se hace muy complicado. Hay que pensar en la táctica, en cómo jugar tu mejor tenis. Cuando los partidos empiezan con un score cerrado, es más fácil el comienzo, y entonces ya se puede pensar en otra cosa. Eso es lo importante para mí. Pero es Rafa, nunca se sabe qué puede pasar, y todos sabemos que jugar contra él es muy difícil”, expresó al respecto en conferencia de prensa.“Por otra parte, jugar contra Rafa en esta clase de torneos es un buen paso, una gran manera de saber cómo estás jugando, es un excelente desafío. Es bueno estar ahí una vez más. Le gané una sola vez, y nunca es lo mismo. Aquí -en París- jugamos dos veces, muy buenos partidos. Vamos a ver qué pasa”, amplió.

Fuente: La Nación

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