La excelente situación de precios del girasol que tuvo lugar durante marzo-abril de este año comienza a deteriorarse por la perspectiva de producción y de stocks en alza en el mundo, que sería acompañada por una tendencia similar en la Argentina.La publicación Oil World proyectó la cosecha mundial en 58 millones de toneladas, una cifra récord, con una recuperación importante respecto de los 50 millones del ciclo anterior, muy afectado por sequías en Europa y en los países de la zona del mar Negro.El área sembrada alcanzaría los 30 millones de hectáreas, una cifra que también constituiría un récord. La producción mundial de aceite de girasol treparía a 21,8 millones de toneladas y superaría en 2,9 millones a la del ciclo previo. Así, la campaña 2021/2022 cerraría con un stock de aceite del orden de los 2,85 millones de toneladas, frente a los 2,43 millones del ejercicio anterior. En la industria de biocombustibles ya alertan por cierres tras la media sanción a un proyectoPor otro lado, “en la Argentina se espera un aumento de área sembrada de 200.000 hectáreas, que permitiría llegar a una producción del orden de los 3,5 millones de toneladas, versus los 2,8 millones del ciclo 2020/2021”, asegura Carlos Pouiller, analista de mercados agrícolas de la consultora AZ.-Group.En 2021 el técnico prevé un aumento sustancial de la oferta mundial, aunque con una demanda sostenida, lo que se está traduciendo en un efecto diminutivo de los precios internacionales, sobre todo del aceite de girasol, que hoy se cotiza a US$1220 por tonelada en puertos del mar Negro, versus los 1600-1650 dólares a los que llegó en el pico de precios de marzo-abril de este año.En el mercado local los precios del disponible han bajado de los picos cercanos a los US$500 por tonelada del primer cuatrimestre a los 390-400 dólares en la actualidad. Para la campaña nueva, en los puertos del sur hay cotizaciones del orden de los US$320 por tonelada más bonificaciones para entregas en marzo.En síntesis: “Vamos hacia una campaña de menores precios que la de 2020/2021, pero que siguen siendo altos en términos históricos”, recuerda Pouiller. Las cotizaciones permiten alcanzar rentabilidades del 20 al 40% en las regiones de cultivo en las que “el girasol compite bien con la secuencia trigo/soja y genera perspectivas de resultados satisfactorios en la nueva campaña, aún con precios ubicados un par de escalones por debajo de la previa”, concluye el analista
Fuente: La Nación