La soja es un cultivo que puede ser afectado por distintos grupos de plagas. Hay algunas de mayor frecuencia de aparición como las orugas defoliadoras y desgranadoras, chinches, trips y arañuelas, como lo demuestran el grafico 1 y 2 (AAPPCE, 2020). Sin duda, las orugas y chinches constituyen los grupos más importantes debido a las pérdidas económicas que causan (Clarín Rural, 2019).
Las orugas defoliadoras pueden causar disminuciones del rinde indirectamente, reduciendo el área foliar, generando así caídas en la tasa crecimiento durante el período crítico o disminuyendo la disponibilidad de foto asimilados en el llenado de granos. Los ataques de chinches y orugas desgranadoras, en estados fenológicos avanzados, causan daños directamente sobre el rinde, afectando el número y/o peso de los granos (Clarín Rural, 2019).
Gráfico 1. % área intervenida por adversidad.
Gráfico 2. N° de aplicaciones por tipo de plaga.
ORUGAS REBELDES
Descripción biológica de estado larval y daño causado al cultivo
Dentro de las principales orugas de más fácil manejo, encontramos a la Oruga medidora (Rachiplusia nu), Oruga bolillera (Helicoverpa gelotopoeon), Oruga del yuyo colorado (Achyra bifidalis -Loxostege u) y la Oruga de las leguminosas (Anticarsia gemmatalis). Sin embargo, hay una serie de isocas (de importancia en ascenso) que son más dificultosas en su manejo. A continuación, se encuentran las características biológicas de las mismas en estado larval y el tipo daño que causan:

Spodoptera frugiperda “Gusano Cogollero – Oruga militar tardía”

Descripción biológica: al nacer las orugas tienen la cabeza negra y el cuerpo de color verde claro. Desde el cuarto estadio la coloración se va tornando más oscura, en el último instar puede llegar a ser verde oscuro hasta negra. En la zona dorsal de cada segmento se observan cuatro puntos, dos superiores juntos y dos inferiores separados (forma de trapecio). La característica distintiva es la sutura epicraneal con forma de “Y” invertida de color blanco. El tamaño máximo va desde 27 a 44mm. Tiende a enroscarse sobre si misma cuando se las molesta. Forman varios “frentes de ataque” al ser inquietas y muy caminadoras, de ahí su nombre (Igarzabal, et al 2014).
Imagen 1. Spodoptera frugiperda.
Daño: tienen preferencia por las gramíneas a pesar de encontrarse en otros cultivos. Migran a la soja en caso de no encontrar más gramíneas. En estado avanzado de crecimiento causan grandes pérdidas por ser muy voraces. Consumen hojas, brotes y a veces partes del tallo, además de poder cortar plántulas recién emergidas, lotes sembrados de forma tardía (Igarzabal, et al. 2014).

Spodoptera cosmioides “Oruga del Yuyo Colorado – Oruga militar”

Descripción biológica: tiene 6 o 7 estadios larvales. Hasta el tercer estadio tienen un abultamiento notorio que abarca dos segmentos torácicos y el primero abdominal. Las larvas presentan en el dorso tres líneas longitudinales de color naranja (una línea central discontinua y dos laterales), con manchas blancas sobre las exteriores en cada segmento abdominal. Sobre estos puntos blancos se observan triángulos negros apuntando hacia el dorso del insecto. Presentan una franja oscura entre el tercer par de patas torácicas y el primer par de patas falsas abdominales y otras dos franjas en las extremidades finales del abdomen. En su último estadio la longitud varía entre 40- 45 mm. Son robustas, con la cabeza más pequeña que el cuerpo. El período larval varía entre 13 y 28 días con temperaturas entre 22 y 30 °C (Igarzabal y Galvez, 2014). Generalmente se las encuentra en el estrato medio de la planta, sus movimientos son lentos y de escaso desplazamiento, al ser perturbadas se dejan caer y enroscándose luego. Climas lluviosos y altas temperaturas favorecen sus brotes poblacionales (Sinavimo, 2020).
Imagen 2. Spodoptera cosmioides.
Daño: causa daños sobre todo el ciclo del cultivo, pero su importancia es mayor en períodos reproductivos cuando ataca vainas. Come las hojas desde el borde hacia el interior, o realiza huecos respetando las nervaduras más gruesas. Las vainas son preferidas por sobre las hojas en las larvas más desarrolladas (Igarzabal y Galvez, 2014).
El desarrollo más lento de las larvas lleva a un mayor consumo, permaneciendo más tiempo en el mismo lugar de alimentación. Diversos autores compararon el potencial de consumo foliar de diferentes lepidópteros plagas en soja, verificando que S. cosmioides es capaz de consumir el doble de área foliar que Anticarsia gemmatalis, Chrysodexis (ex Pseudoplusia) includens y Spodoptera frugiperda (Igarzabal y Galvez, 2014). Los datos obtenidos por Kahl y Kleisinger (2016) evidencian el mayor consumo foliar de la “oruga del yuyo colorado” (Tabla 1).
Tabla 1. Consumo de superficie foliar (cm2) de diferentes lepidópteros en soja en toda su vida larval.

Spodoptera eridania “Oruga militar del sur – Oruga negra”

Descripción biológica: las larvas transcurren por 6 estadios larvales, con una duración del período de 15 a 19 días. En los primeros estadios son de color verde ahumado, avanzado su desarrollo adoptan una coloración castaña a ceniza, con tres líneas longitudinales en el dorso, en general de color naranja a amarillento. Además, a nivel dorsal presentan varios triángulos negros con puntuaciones amarillas en su interior. Se caracteriza por tener una banda ancha, frecuentemente crema a amarillenta con trazos naranjas a través de los segmentos abdominales. En el dorso, presentan numerosos triángulos negros con puntos amarillentos dentro. La cabeza es de color anaranjado a castaño rojizo. Las orugas en el instar final pueden medir hasta 40mm. de longitud. Las larvas se ubican en el tercio medio inferior. Las altas temperaturas y alta humedad son condiciones predisponentes para esta especie (Igarzabal, et al 2014).
Imagen 3. Spodoptera eridania.
Daño: el principal daño de esta especie es como defoliadora, pero pueden ocasionar daños en flores y frutos, e incluso en emergencia. Prefieren consumir vainas antes que hojas (Igarzabal, et al 2014).
Umbrales de daño
Las especies del género Spodoptera tienen una importancia creciente en el cultivo de soja, y la aparición de este complejo debe ser monitoreada con atención, especialmente debido a la tolerancia a las proteínas insecticidas Bt. Una de las especies de este género, S. cosmioides, es considerada una plaga potencialmente importante en nuestro país (Igarzabal, et al 2014).
En Argentina no se han estimado umbrales de acción para Spodoptera cosmioides en soja. Lo que se sugiere, antes de tomar una decisión, es conocer muy bien la proporción en la que se encuentran las “orugas del yuyo colorado” con relación a las otras especies de lepidópteros defoliadores. Es decir, cuantificar el número de orugas por metro lineal y registrar dicha información para tener constancia de la evolución en los sistemas productivos, principalmente entre campañas agrícolas (Kahl y Kleisinger, 2016).
En tanto que para el control Spodoptera frugiperda, podemos tomar como umbral de referencia el realizado en EEA INTA Olivares por Perotti y Gamundi (2009) (Tabla 2).
Tabla 2. Umbral de control de larvas defoliadoras, según estado fenológico y grupo de madurez del cultivo.
De Spodoptera eridania se conoce que es una especie tolerante a la proteína Bt. Al alimentar las larvas con hojas de soja Bt, estas completan su ciclo biológico de manera exitosa (Lutz, et al. 2019). No hay información científica sobre su umbral de control en el cultivo de soja. Igarzabal et al. (2014) señala que los umbrales de daño económico son útiles, pero no pueden tomarse como medida de decisión de situaciones de campo debido a que los mismos varían de acuerdo con el costo del insecticida, rinde esperado y el valor de la cosecha obtenida.
La eficiencia de los tratamientos disminuye al aumentar el número de orugas por superficie. Cuanto mayor sea la población, más difícil será obtener buena eficiencia en los tratamientos. La persistencia de algunos productos como las diamidas, permite anticipar tratamientos respecto a las cifras propuestas por los umbrales, basándose en pronósticos de trampas de luz, sin ser considerados tratamientos preventivos (Igarzabal, et al. 2014).
En este sentido Summit Agro, cuenta con AMICOR (Rynaxypyr 20%) para el control químico de estas plagas. Es un producto banda verde, que pertenece a la familia química de las diamidas antranílicas, y posee control en todos los estadios larvales, respetando fauna benéfica. Otorga la máxima persistencia de control y tiene acción translaminar. Actúa por contacto e ingestión de las partes tratadas de la planta. El uso de este tipo de productos permite que la plagas al entrar en contacto con el mismo, dejen de alimentarse inmediatamente, por su modo de acción; se provoca una contracción muscular, y las plagas dejan de producir daño al cultivo.
CHINCHES
Las chinches, presentan mayor o menor nivel poblacional según los años, pero siempre constituyen un grupo de plagas claves de la soja, causando alto impacto en la producción del cultivo. Afectan a la producción causando pérdidas económicas a muy bajas densidades. Las mismas se alimentan de diferentes partes de las plantas (Clarín Rural, 2019).
En nuestro país las especies que se destacan por los daños causados en el cultivo de soja son Nezara viridula “Chinche verde”, Piezodorus guildini “Chinche de la alfalfa”, Edessa meditabunda “Alquiche chico” y Dichelops furcatus “Chinche de los cuernos” (Igarzabal, et al. 2014), entre otras.
Descripción morfológica de individuos adultos

Piezodorus guildini “Chinche de la alfalfa”

Mide 1cm, color verde claro con una línea rojiza/marrón amarillento en donde se insertan las alas. Las alas son verdes y la parte membranosa es incolora y traslucida (Rem AAPRESID, 2020).
Imagen 4. Piezodorus guildini.

Nezara viridula “Chinche verde”

Mide unos 15mm de longitud y de forma oval. Esta especie es polimórfica y presenta 3 variedades, la más común es la smaragdula. Esta es de color totalmente verde. Presenta longevidad variable según el clima (Rem AAPRESID, 2020).
Imagen 5. Nezara viridula.

Edessa meditabunda “Alquiche chico”

Mide alrededor de 12mm, cuerpo oval y cabeza triangular, dorso color verde y el abdomen y alas de color castaño. Sumamente hedionda (Rem AAPRESID, 2020).
Imagen 6. Edessa meditabunda.

Dichelops furcatus “Chinche de los cuernitos”

Mide aproximadamente 10mm, color marrón en el dorso y abdomen verde. La cabeza termina en dos proyecciones hacia delante y al costado de su cuerpo también salen dos proyecciones laterales. Las membranas de las alas son castañas oscuras (Rem AAPRESID, 2020).
Imagen 7. Dichelops furcatus.
Tipos de daño y umbrales
Igarzabal et al. (2014) menciona que los tipos de daño varían de acuerdo con el estado fenológico en que se encuentra el cultivo. A continuación (Tabla 3) mencionaremos los daños causados según los mismos:
Tabla 3. Daños de chinches por etapa fenológica del cultivo de soja.
A lo largo de los años, de acuerdo con la evolución de los sistemas de siembra y cultivares, los Umbrales de Daño Económico han variado. En la Tabla 4 se han sintetizado estos umbrales para diferentes especies (según el nivel de daño que causan), estado fenológico del cultivo y espaciamiento de surcos. Estos NDE también varían, por influencia de factores como el precio de la tonelada de soja y el costo del tratamiento para el control, como también mencionamos anteriormente para el UDE de Lepidópteros (Igarzabal, et al 2014).
Tabla 4. Umbrales de daño económico. (a) En caso de mezclas de chinches, prorratear valores. (b) En soja para semilla, los umbrales en R6-7 son los mismos que en R5. (c) Valores estimados.
Para el control de chinches en soja existen varios métodos o alternativas, aunque el control químico es el dominante (Clarín Rural, 2019).
Summit Agro cuenta con varias herramientas químicas de diferentes características, dentro de las cuales Starkle (Dinotefuran 70%), un insecticida de última generación para el control del complejo de chinches y trips, permite una mayor protección de los rendimientos potenciales desde el inicio de formación de vainas. Es un neonicotinoide de tercera generación, que posee en la planta acción sistémica y translaminar. Combina un gran poder de volteo tanto en adultos como ninfas, con una elevada persistencia en el cultivo, cuando se lo aplica a bajas densidades de plaga, por lo que mantiene altos niveles de control hasta tres semanas después de su aplicación (siempre y cuando se sigan las recomendaciones de uso). En la plaga actúa por contacto (durante la aplicación) e ingestión. Esta característica lo hace único para aplicaciones tempranas cuando las poblaciones de chinches aún son bajas, y es central para evitar daños durante la formación del grano. Starkle es un producto banda verde con tecnología Be Green, respetando el medio ambiente, al consumidor, la fauna benéfica y sin generar acaro inducción.
RETAKER (Acetamiprid 10% y Esfenvalerato 10%) por su parte está registrado para el control de chinches y otras plagas como orugas defoliadoras, tucuras, trips, picudos, y pulgones, entre otras. Es un insecticida con poder de volteo y persistencia de control, por estar compuesto por un piretroide y un neonicotinoide. Actúa por contacto e ingestión en la plaga.
A su vez MATSURI permite controlar chinches, además del complejo de defoliadoras y arañuelas, debido a su excelente poder de volteo aún en niveles poblacionales elevados, gracias a la mezcla de piretroides (Esfenvalerato 12,5%, Bifentrin 10% y Abamectina 2,4%), actuando por contacto e ingestión en las plagas, y otorgado translaminaridad en el caso de arañuelas por el efecto de la abamectina.
CROP SHIELD es la combinación de la tecnología STARKLE (Dinotefuran) y AMICOR (Rynaxypyr), que brinda control superior sobre chinches, orugas y trips en soja. El uso combinado de ambos productos permite plantear una estrategia basada en anticipar aplicaciones en etapas más tempranas con poblaciones iniciales bajas.
De esta forma se logra tener menor daño acumulado sobre el cultivo, mayor eficacia de control y protección del cultivo en el estado más susceptible a las plagas, además de lograr una aplicación más efectiva, ya que, al aplicar sobre un cultivo menos desarrollado, lograría llegar a lugares donde es imposible hacerlo, en estados más avanzados del cultivo.
CROP SHIELD es un programa que protege a tu cultivo por su poder de volteo y máxima persistencia de control, maximizando el rendimiento cuidando el medio ambiente gracias a su perfil eco toxicológico banda verde.
A SEGUIR DE CERCA
Investigadores del INTA Rafaela confirmaron la presencia de “la mosca del tallo de la soja”. Se trata del primer registro de Melanagromyza sojae en un cultivo de soja en la Argentina. Esta plaga es un insecto originario de Asia (Infocampo, 2020).
La “mosca del tallo de la soja” es un díptero que pertenece a la Familia Agromyzidae. Se trata de un insecto que pone huevos en las hojas nuevas y luego de 2-4 días nacen las larvas que migran hacia el interior del tallo barrenando y formando galerías. El período larval puede variar de 7 a 12 días (Infocampo, 2020).
Este insecto puede reducir tanto el tamaño de las plantas como el número de vainas, lo que repercutiría en el rendimiento del cultivo (Infocampo, 2020).
Para ver más, click en este enlace.

Fuente: InfoCampo

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