Por David Alire GarciaCiudad de méxico, 24 jun (reuters) – inspectores mexicanos
rechazaron desde abril el ingreso de tres cargamentos de piel de
cerdo procedentes de estados unidos, de la planta de smithfield
foods, así como de otra empresa, dijo a reuters la autoridad
sanitaria del país latinoamericano.En México la piel de cerdo se utiliza principalmente para
hacer chicharrones, un popular manjar frito que acompaña una
gran variedad de platos típicos. El producto no es tan apreciado
por consumidores estadounidenses, lo que subraya la naturaleza
complementaria del comercio binacional de la carne de cerdo.México fue el mayor mercado de exportación de carne de cerdo
estadounidense por volumen antes de ser superado por China en
2020.Después de notificar a las autoridades estadounidenses sobre
pieles contaminadas, el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad
y Calidad Agroalimentaria (Senasica) solicitó el 16 de junio que
se revocara la licencia de exportación de la instalación en Tar
Heel, Carolina del Norte, de Smithfield .El Departamento de Agricultura de Estados Unidos anunció la
suspensión el lunes.Smithfield, propiedad de WH Group y que cotiza en
Hong Kong, dijo en un comunicado que el problema no estaba
relacionado con ellos o la instalación, sino que se debe a una
empresa externa y que las autoridades estaban trabajando para
resolver el asunto.Por su parte, Senasica aseguró que el distribuidor externo
era Rava Forwarding Inc, que también dejó de ser elegible para
exportar desde su instalación de almacenamiento en frío situada
en Laredo, Texas, el 18 de junio.La reanudación de envíos desde cualquiera de las
instalaciones probablemente llevará al menos unos meses, explicó
la oficina de prensa de Senasica.La planta en Tar Heel de Smithfield, la más grande del
mundo, puede sacrificar más de 34,000 cerdos por día,
aproximadamente el 7% de la capacidad con que cuenta Estados
Unidos, de acuerdo a estimaciones industriales.La decisión de Senasica para evitar más exportaciones desde
las instalaciones de Smithfield y Rava se basó en la acumulación
de cargamentos contaminados de pieles de cerdo en refrigeración.Uno de estos rechazos de mercancía ocurrió el 15 de abril de
la planta de Tar Heel, y se produjo después de que los
inspectores observaron un producto en descomposición que estaba
cubierto de “manchas amarillentas”.Dos rechazos posteriores ocurrieron en junio, que pudo haber
incluido una mezcla de productos de ambas instalaciones, los
cuales revelaron más manchas y brotes de hongos.Rava no pudo ser contactado de inmediato para hacer
comentarios.
(Reporte adicional de Tom Polansek en Chicago y Adriana Barrera
en Ciudad de México; Traducido por Lizbeth Díaz; Editado por
Diego Oré)

Fuente: La Nación

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