Analicemos la coyuntura de precios actuales de los granos y algunos caminos que podría tomar el Gobierno, con el consecuente efecto en las cotizaciones.
A lo largo de los últimos meses, los granos han manifestado importantes aumentos en el mercado internacional de referencia (CBOT), cotizando actualmente la soja por encima de 510 U$S/tn, el maíz 216 U$S/tn y el trigo 237 U$S/tn.
Automáticamente, los distintos agentes del rubro tienden a imaginarse una suba en las retenciones a las exportaciones de productos agropecuarios, como la principal herramienta a la que podría acudir el Gobierno a fin de intentar “desvincular” los precios locales respecto a los internacionales. Este mecanismo de aumento en el porcentaje del impuesto impacta negativamente en la capacidad de pago del sector exportador, generando un menor precio interno de las mercaderías exportables.
Las alícuotas vigentes se ubican en 33% para la soja, 31% subproductos (harina y aceite) y 12% para trigo y maíz. La Ley de Solidaridad Social sancionada en diciembre-2019 prohíbe que la alícuota supere el 33% del valor FOB para la soja.
Respecto del maíz y el trigo, la norma contempla que la alícuota no puede exceder el 15%, es decir, tendrían un margen para aumentarlas. Tales facultades contarían con vigencia hasta diciembre-2021. Por lo tanto, se entiende que cualquier otra alícuota fuera de tales parámetros debería ser aplicada vía la sanción de una nueva ley aprobada por el Congreso.
En caso de concretarse aumentos, los precios deberían acusar una caída en torno a 10 U$S/tn para la soja que compra la industria local (luego convierte en harina y aceite) y un descenso cercano a 7-8 U$S/tn para el trigo y el maíz, dependiendo el período de embarque (cálculos realizado en base a valores del viernes 05/02). Si bien el deterioro en las cotizaciones es palpable, afortunadamente transitamos en un contexto de firmeza a nivel internacional que podría morigerar el impacto.
Así, los valores podrían recuperarse fácilmente en un puñado de ruedas alcistas. Por ejemplo, en la jornada del lunes, en Chicago, se dieron subas de 8 U$S/tn para la soja y 6 U$S/tn para maíz y trigo, traccionando localmente.
Otra opción que puede elegir el Estado consiste en limitar cantidades vía cupos o cuotas de exportación. En este caso, el efecto negativo en los precios estará determinado por la magnitud de la medida, si es que tiende a determinar un gran exceso de oferta para el consumo local. Se recuerda que durante los últimos días de 2020 se decidió cerrar las exportaciones de maíz durante enero-febrero a los fines de asegurar abastecimiento interno hasta el empalme de campañas agrícolas (marzo-21). Esta medida fue levantada con el correr de los días, ya que no había un problema de escasez real teniendo en cuenta las existencias al momento y el consumo normal de las industrias locales. Hay que destacar que este tipo de medidas en caso de ser profundizadas generan caída de producción y escasez a mediano plazo, tal como lo hemos comprobado históricamente.
Por último, el Gobierno podría considerar la posibilidad de proponer a los actores involucrados (exportadores, acopiadores, productores, industrias locales) la constitución de un fideicomiso para el maíz y/o el trigo (en líneas similares al reciente acuerdo en el sector aceitero). A grandes rasgos, se generaría un esquema de transferencias para subsidiar consumo.
En síntesis, el abanico de posibilidades contiene medidas ya conocidas por los productores y el sector agropecuario en general. Solo resta conocer por cuál mecanismo se optará finalmente, lo que obliga a los participantes -más que nunca- a afinar el proceso de toma de decisiones y coberturas ante los riesgos.The post Mercado de granos: un análisis de la situación actual y efecto de potenciales medidas first appeared on Infocampo.

Fuente: InfoCampo

Comparte este artículo en: