En un contundente mensaje político al Gobierno, los movimientos sociales no alineados con el oficialismo, junto a los partidos que integran el Frente de Izquierda, se movilizaron este martes a Plaza de Mayo. Según indicaron sus referentes en un comunicado, la marcha fue impulsada “para exigir que ningún trabajador ni trabajadora este por debajo del nivel de indigencia” y en rechazo al “ajuste estructural” y a “las alternativas de derecha como respuesta a la crisis”.“Hace meses sostenemos que la salida de la crisis no debe ser el ajuste. Por el contrario, pedimos que se equipare el salario mínimo a la canasta básica familiar, es decir, a 70 mil pesos”, señaló Silvia Saravia, coordinadora nacional de Barrio de Pie-Libres del Sur, una de las organizaciones sociales que convocaron a la movilización, que comenzó pasado el mediodía sobre la avenida 9 de Julio a la altura de Independencia. Desde ahí, se movilizaron hasta las puertas de la Casa Rosada.La marcha pasó por la puerta del Ministerio de Desarrollo Social. (prensa obrera/)La fecha elegida para manifestarse no fue nada casual. Este martes volvió a reunirse el Consejo del Salario. Es que, después de acordar una suba del 35% en abril, el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, impulsará un aumento del salario mínimo vital y móvil del 46% para quedar por encima de la inflación. Según pudo saber LA NACION, el número será propuesto en la paritaria que integran el Gobierno, sindicalistas y empresarios que se abrirá en cuatro días, aunque se da por descontado que habrá un acuerdo.Aumento del salario mínimo por encima de la inflación, la primera medida de una semana cargada de anuncios económicosCon el aumento que se prepara para anunciar el Gobierno, un trabajador pasaría a cobrar de mínimo 32.367 pesos. Es un monto insuficiente para los referentes sociales, que señalan que “hace años el salario se hunde y cada crisis representa menos poder adquisitivo” y denuncian que “los gobiernos de distinto color político, junto con el empresariado y las burocracias sindicales, han pautado de forma sistemática salarios mínimos por debajo del nivel de indigencia, con el objetivo de seguir maximizando sus ganancias a costa de mayores niveles de explotación y hambre”.Las organizaciones concentraron en 9 de Julio e Independencia. (Prensa Obrera/)En ese sentido, para Mónica Sulle, referente del MST Teresa Vive, el problema es que lo que se decide en el Consejo del Salario tiene impacto directo sobre las jubilaciones y los planes sociales: “El aumento es una miseria, en el marco de una pérdida de más del 25% de poder adquisitivo. Esto en el contexto político de un cambio de gabinete que refleja lo más de derecha, con un pasado reaccionario”.La marcha de este martes, que reunió a miles de personas, fue la tercera gran protesta de los movimientos sociales opositores desde la asunción de Juan Zabaleta al frente del Ministerio de Desarrollo Social y la segunda en menos de dos semanas. El jueves pasado, en medio de la crisis interna del Gobierno, también habían concentrado sobre la 9 de Julio. En esa ocasión, para pedir una mejor provisión de alimentos para los comedores de los barrios.

Fuente: La Nación

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