La entrega de viviendas sociales con fondos públicos vuelve a ser centro de una disputa entre oficialismo y oposición. El Presidente Alberto Fernández, en un acto destinado a la entrega de viviendas y créditos para la construcción en Merlo, declaró que la administración nacional anterior no entregó 11.000 viviendas “casi terminadas” porque “no querían que la gente recuerde que esas casas las hizo Cristina”. Junto a Santiago Cafiero, el gobernador Axel Kicillof, el ministro Jorge Ferraresi, el intendente Gustavo Menéndez y los precandidatos que encabezan la lista de diputados del Frente de Todos en la provincia de Buenos Aires, Victoria Tolosa Paz y Daniel Gollán, el mandatario hizo uso de un acto público de entrega de viviendas con fondos estatales para lanzar munición gruesa de campaña.En esa línea, Fernández se declaró impresionado por “cómo ocurrieron las cosas, porque además fueron votados dos veces”. Además, se preguntó “cómo pasó eso. Porque en este barrio quedaron 11.000 viviendas sin entregar. Casi hechas, casi terminadas, pero decidieron no entregarlas. Siempre me pregunto por qué alguien querría privar a 11.000 familias de tener una casa. ¿Por qué motivo? Porque además las casas estaban hechas. Siempre pienso que deben haber creído que los que habiten esas casas iban a recordar que esas casas las hizo Cristina, y antes que alguien tenga ese recuerdo, prefirieron que nadie tenga esa casa”, espetó, en un discurso cargado de fortísimas acusaciones contra la administración de Mauricio Macri.Quien recogió el guante fue Iván Kerr, ex Secretario Nacional de Vivienda, quien hace unos tres meses ya había provisto una respuesta con números, fechas y documentos ante una acusación similar, aunque aquella vez el Presidente había dicho que la causa de los supuestos retrasos era “el odio”. En diálogo con LA NACION, Kerr fue lapidario: “El Presidente miente descaradamente”. Según el ex funcionario, que también compartió su descargo a través de Twitter, “las 11.000 viviendas a las que se refiere el Presidente efectivamente comenzaron a construirse durante el gobierno de Cristina, en el 2015?. Es decir, unos pocos meses antes de las elecciones presidenciales y del cambio de mandato. Obviamente, las viviendas distaban de estar terminadas. Kerr hizo público un informe de gestión en el que consta que, de los $42.923 millones que se invirtieron en las obras aludidas, unos $30.368 millones, o el 71% del presupuesto total, se alocaron entre 2015 y 2019.Son infundados sus temores Sr. @alferdez, no quedaron 11 mil viviendas sin entregar, sino que las mismas seguían en obra. Y se entregaron sí 11.500 durante la gestión de @mauriciomacri, que habían sido iniciadas durante el 2015.— Iván Kerr (@ivankerr) July 26, 2021Además, el ex Secretario añadió que la inscripción para las casas de Merlo que entregó ayer el Presidente se abrió en julio del 2017, por recomendación del Banco Hipotecario, cuando las viviendas estaban prácticamente terminadas. La entrega se demoró porque AySA solicitó en mayo del 2018 una planta de tratamiento de agua debido a la contaminación de las napas debajo del complejo, una obra que no estaba prevista originalmente. “Tuvimos que llamar a licitación, contratar a la empresa, construir la planta de saneamiento y efluentes, esperar la aprobación de AySA y ponerla en funcionamiento. Todo eso cuesta tiempo y dinero, y se debió a una falta de previsión en el plan de obra original”. Los datos constan, nuevamente, en el informe de gestión de la Secretaría y en el informe que la misma le envió al Banco Hipotecario. Según Kerr, la mala planificación original era un recurrente en las obras públicas que heredaron de la gestión anterior. “El vicio de origen en obras de Procrear era muy recurrente. Hacían todo a los ponchazos, ‘lo hacemos como se nos canta y no pedimos un solo permiso a nadie’”, lanzó. Para ilustrar el punto, enumeró ante LA NACION ejemplos concretos de obras mal concebidas en Mendoza, Córdoba y Ciudad de Buenos Aires, todas las cuales constan en registros públicos. Las trabas en las obras en Merlo existieron, sostuvo el ex funcionario, pero en plazos y condiciones muy distintos a los que declaró el Presidente. “Lejos está de que el tema fuera una cuestión política, por el mero hecho de que la obra la haya licitado el gobierno de Cristina”.De las más de 20.000 viviendas totales que consignaba el proyecto, en el 2015 se habían entregado poco más de 300. “Durante la administración de Macri se entregaron 11.500 y se dejaron 9.100 prácticamente terminadas. Esas son las que están entregando ahora”, enumeró.Por último, Kerr sostuvo que más allá de la incongruencia de los números del Presidente y de la “nula posibilidad de que esté lista el 80% de una obra sin que se haya hecho nada en 4 años”, le preocupa también la apropiación partidaria de la obra pública, el “las hice yo y vos no”. “Es un discurso de barricada”, sentenció. “El lunes después del cierre de listas lleva esto adelante con los candidatos Gollán y Tolosa Paz sentados al lado. Convierte lo que es un acto de entrega de viviendas para familias en un acto partidario. Como siempre, confunden Estado con Gobierno”, remarcó el ex Secretario.“La construcción de viviendas es una responsabilidad -con continuidad- del Estado. No es de uno ni de otro, y todos les deberíamos pedir perdón a los vecinos que se inscribieron en un programa y en vez de mudarse en tres años lo hacen en cinco”. 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Fuente: La Nación

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