Dos jóvenes paraguayos fueron los ganadores del programa “Soluciones para el Futuro”, tras crear un desalinizador portátil a base de paneles solares que potabiliza agua llamado MBARETICS.
El proyecto resolvería la falta de agua potable que se da por la contaminación de agua salada que ingresa al Acuífero Guaraní, y ampliaría el acceso de agua potable de manera segura y a bajo costo.
Los oriundos de Paraguay, Jazmín y Diego, fueron seleccionados entre más de 2.300 chicos que inscribieron entre julio y octubre más de 600 proyectos destinados a otorgar una solución innovadora a problemas comunes.
El programa Soluciones para el Futuro 2020 forma parte de la estructura de Samsung, que año a año busca impulsar la innovación de las generaciones jóvenes que construirán el futuro.
De los cinco equipos finalistas tres fueron de la Argentina, uno de Uruguay y el ganador, de Paraguay.
Los finalistas
Llevada a cabo por tres estudiantes chaqueños, Test T.A.C.C consiste en el desarrollo de un test que identificaría alimentos contaminados con gluten, enfocado hacia las personas que padecen la celiaquía o quiénes que mantienen una dieta libre de gluten. El test generaría un cambio de color a detectar cualquier proteína de gluten, para advertir fácilmente si un alimento posee o no gluten.
Cuatro estudiantes de Córdoba presentaron ECOFLOC, tiene como objetivo crear un kit que pueda, de manera económica y simple, purificar el agua. Utiliza la hoja de tuna deshidratada en polvo (opuntia ficus-megapotámica) como floculante, aprovechando que es una planta autóctona de América.
Con ECOGEEKS, cinco estudiantes tucumanos proponen crear videojuegos que no solo tengan un contenido interesante, sino que también estén pensados para estimular la consciencia ecológica de los jóvenes argentinos por medio de un entorno de aprendizaje experimental.
Por último, la uruguaya PROTOHAND de cinco jóvenes de Colonia, propone crear una prótesis 3D articulable de una mano. Dicha prótesis sería controlada por movimientos de la muñeca y en segunda instancia se le agregarían motores y sensores que permitan la articulación mecánica mediante impulsos nerviosos en el antebrazo. 

Fuente: InfoCampo

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