Por Sarah MarshLA HABANA, 15 sep (Reuters) – El gobierno de Haití se vio
sumido el miércoles en una nueva confusión, luego de que un
funcionario de alto rango dimitió argumentando que no podía
servir a un primer ministro que está bajo sospecha por el
asesinato del presidente Jovenel Moïse y que además se niega a
cooperar con la investigación.La dimisión de Renald Luberice, que ocupó durante más de
cuatro años el cargo de secretario general del Consejo de
Ministros de Haití, se produjo tras la aparición de nuevas
pruebas que vinculan al primer ministro Ariel Henry con el
exfuncionario del Ministerio de Justicia, sospechoso de ser el
autor intelectual del asesinato de Moïse.Los fiscales dicen que los registros telefónicos muestran
que ambos hablaron dos veces alrededor de las cuatro de la
mañana del 7 de julio, horas después de que Moïse, de 53 años,
fuera acribillado por hombres fuertemente armados que
irrumpieron en su residencia privada.Henry ha negado cualquier implicación en el asesinato, pero
no se ha referido directamente a las llamadas telefónicas y el
martes sustituyó al fiscal jefe de Haití, que había intentado
acusarlo como sospechoso y prohibirle salir del país.La semana pasada, el primer ministro rechazó los intentos de
entrevistarle en relación con el asesinato de Moïse como una
maniobra política destinada a distraerle de su trabajo en el
país más pobre de América, donde las luchas de poder han
obstaculizado el desarrollo durante décadas.En una carta compartida en las redes sociales el miércoles,
Luberice dijo que no puede servir a alguien que “no pretende
cooperar con la justicia, buscando, por el contrario, por todos
los medios, obstruirla”.Más de 40 personas, entre ellas 18 colombianos, han sido
detenidas hasta ahora en el marco de la investigación sobre el
asesinato de Moïse, que no ha resuelto el misterio y ha estado
plagada de irregularidades.Moïse nombró a Henry, neurocirujano y político moderado,
para el cargo de primer ministro pocos días antes de ser
asesinado, en un intento de aplacar la tensión política que
complicó su mandato y provocó una importante crisis
constitucional.
(Reporte de Sarah Marsh
Editado en español por Javier López de Lérida)

Fuente: La Nación

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