El celular de Osvaldo Jaldo se transformó, durante el fin de semana, en cuestión de Estado para el gobierno de Alberto Fernández. El propio Presidente, el titular de la Cámara baja, Sergio Massa, y la propia vicepresidenta Cristina Kirchner, entre otros, llamaron al hasta hace minutos vicegobernador de Tucumán para que acepte una tregua política con Juan Manzur, que luego de reunirse con él pidió licencia en ese cargo y voló para asumir por la tarde como jefe de gabinete del gobierno nacional. Quién es Osvaldo Jaldo, el reemplazante de Juan Manzur como gobernador de TucumánFue Manzur quien llamó por teléfono al Presidente para tranquilizarlo, según contaron a LA NACION altas fuentes oficiales. “Está solucionado”, le dijo el aún gobernador a Fernández, que cerca de la medianoche llegó a Olivos desde La Rioja, donde pasó un fin de semana de negociaciones y reuniones para darle forma al nuevo elenco ministerial. Mientras amagaba con no asumir el cargo nacional si no se solucionaba su entuerto con Jaldo, Manzur concertó con él una reunión matinal de la que surgió el acuerdo: Jaldo asume como gobernador, pero cede el control de la Legislatura tucumana y se compromete a no realizar cambios de fondo en la gestión de gobierno provincial.“Si en una familia que son cuatro o cinco muchas veces hay diferencias, cómo no va a haber diferencias en un Movimiento Nacional Justicialista o en el PJ en Tucumán que somos un montón. Por eso hay diferencias y parte de esas diferencias las hemos limado en las internas”, dijo Jaldo al salir de la reunión en relación a las públicas diferencias con Manzur, con quien se enfrentó a través de candidatos diferentes en las internas del domingo 12 pasado. “Hablé en tres o cuatro oportunidades ayer con el Presidente, hablé con el senador (Oscar) Parrilli, con Sergio Massa, con el gobernador ayer y hoy”, reconoció Jaldo, conforme por haber logrado el acuerdo que lo dejará en el sillón de la gobernación, al menos durante el lapso que Manzur sea jefe de gabinete nacional.Con tono relajado, Jaldo negó haber recibido ofertas de empleo alternativas para reducir sus pretensiones. “El Presidente jamás me ofreció ningún cargo, ni que me vaya a Buenos Aires”, dijo Jaldo, aunque trascendieron la presidencia del Banco Nación y una “secretaría importante” como la de Relaciones con las Provincias como prendas de negociación. Juan Manzur fue ministro de Salud de Cristina KirchnerPero lo cierto es que durante las últimas horas “nada fue más importante” para el Gobierno que destrabar el conflicto, ya que un “no” de Manzur hubiera significado el fracaso de las negociaciones entre albertistas y cristinistas que decantó en los nuevos integrantes del gabinete.¿Todo solucionado? En el Gobierno respiran aliviados, pero dejan abierta una puerta para la sospecha. “Jaldo es Cristina, que nunca lo quiso a Manzur. Y se queda con la gobernación”, se quejó por lo bajo un allegado al Presidente. “Habrá paz”, tranquilizaron desde ambos lados de la negociación tucumana.Manzur, en tanto, viajó a Buenos Aires sin confirmar aún quienes lo acompañarán en la tarea que inicia, en reemplazo de Santiago Cafiero, que será el nuevo canciller. Anoche recibió una elogiosa carta de felicitación de David Lau, el gran rabino de Israel, quien lo consideró “el hombre indicado en el lugar indicado” para asumir la jefatura de gabinete. Con esa particular bendición, Manzur asumirá hoy a las 16 el puesto para el que Cristina Kirchner lo había propuesto en su carta al Presidente, el jueves pasado.

Fuente: La Nación

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