CÓRDOBA.— La muerte por Covid-19 de Santiago Gerónimo, un médico de 44 años que había recibido las dos dosis de la vacuna, provocó conmoción hoy en Alta Gracia, la localidad cordobesa en donde trabajaba. Su caso se suma a los de otro de otro médico en Luque que tenía enfermedades preexistentes, y de una maestra en Vicuña Mackenna, ambos también vacunados.Gerónimo falleció hoy a la madrugada. Salteño de nacimiento, llevaba 20 años radicado en Córdoba. Era jefe de guardia del hospital provincial Arturo Illia, de Alta Gracia. Estaba internado hace dos semanas en una clínica privada de la ciudad de Córdoba. No tenía enfermedades previas.“Todo el personal del hospital Illia lamenta profundamente el fallecimiento de nuestro compañero, el Dr. Santiago Gerónimo y acompañamos a su familia y amigos en este momento. QEPD, Doc”, fue la despedida de sus compañeros de trabajo. Como integrante de los equipos de salud ya tenía las dos dosis de la vacuna Sputnik V.Cuáles son las comorbilidades que agravan el pronóstico si tenés coronavirusEl intendente de Alta Gracia, Marcos Torres, recordó que fue director de Salud de la ciudad: “Estaba expuesto permanentemente y le tocó pagarlo con su vida. Era una persona muy cercana”.Gerónimo comenzó a transitar la enfermedad en su domicilio y hace una semana debió ser trasladado a la ciudad de Córdoba. El sábado había tenido una leve mejoría pero ayer se complicó su situación y debió ser intubado. Falleció a las 5 de la madrugada de hoy.Marcelo Gerónimo también es médico y trabaja como coordinador de la terapia intensiva del Sanatorio Parque de la ciudad de Salta. Viajó a Córdoba para sumarse a la asistencia de su hermano. Al ser consultado por el sitio salteño Cuarto, Marcelo, afirmó: “Los médicos no deben acostumbrarse a la muerte, deben pelear con cada paciente”. A Santiago lo recordó como “un buen padre, un luchador de la vida y un profesional con vocación de ayudar”.Al igual que su hermano, Santiago estudió y se recibió en la Universidad Nacional de Córdoba. Era padre de dos hijos: un varón de 18 años y una chica de 16 años. Hace unas semanas había cambiado su turno en la guardia del hospital para estar presente en el cumpleaños de su hija menor.Estados Unidos aprobó una controvertida droga contra el AlzheimerMaestra jardineraHace una semana una situación similar a la de Alta Gracia se vivió en Vicuña Mackenna, en el sur provincial, cuando murió una maestra jardinera de 51 años por Covid-19. Érica Marisa Chivalero había sido trasladada de urgencia a una clínica de Río Cuarto. La mujer había recibido las dos dosis de Sinopharm, la segunda unos 19 días antes de su fallecimiento.En Luque, el caso fue el de un médico de 68 años, que sí tenía patologías de base. Había recibido la segunda dosis de la Sputnik V 35 días antes de su muerte. Era hipertenso y tenía stents colocados por problemas cardíacos.“Nos dijeron que tenía anticuerpos, pero no la cantidad que por lo general desarrollan la mayoría de las personas vacunadas”, dijo su hijo Ignacio a La Voz del Interior. Y agregó: “Pese a lo que vivimos en mi familia, el mensaje que queremos dar es que las vacunas salvan vidas”.

Fuente: La Nación

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