Es la primera entrega de aportes del ciclo 2019. Fue en un acto encabezado por el gobernador Juan Schiaretti.
Fuente: Clarín Rural
Es la primera entrega de aportes del ciclo 2019. Fue en un acto encabezado por el gobernador Juan Schiaretti.
Fuente: Clarín Rural
El Director Ejecutivo del Grupo Bioceres estará acompañado por Sebastián Bagó (h), Director General de Laboratorios Bagó, como Vicepresidente 1º.
Fuente: Clarín Rural
Los resultados de un informe del Foro Ambiental despertaron una fuerte polémica en Entre Ríos. El estudio reveló que la presencia de materia fecal en el río Gualeguaychú supera hasta en el 1000% los valores permitidos, y la municipalidad salió a culpar al sector agropecuario. El tema no quedó ahí: los productores respondieron y afirmaron que el gobierno provincial “intenta desviar la atención”.
La preocupación en la provincia crece minuto a minuto. El agua del río Gualeguaychú se destina al consumo de la población y al uso recreativo en las playas. Por eso, apenas se supo que la contaminación en ese caudal es extrema, el municipio se escudó en el plan de acción sistemático que presentó años atrás mediante el cual controla y fiscaliza en distintos puntos estratégicos, y aseguró que el cuidado del principal curso de agua es “un objetivo central” para la comunidad.
En concreto, el informe señala que los niveles de Escherichia Coli y de coliformes fecales están muy por encima de los estándares aceptados por la Resolución 87/07 de la Secretaría de Ambiente de Entre Ríos. Y la municipalidad remarca que dentro de las “eventualidades” que afectan las tomas de muestras que deben realizar profesionales de Ambiente, se encuentran los temporales, las sudestadas, las crecientes, los volcados clandestinos de efluentes y los emprendimientos productivos agrícolas.
“La cría de pollos, porcinos, vacunos (feedlots), etc, rompen con la linealidad de cualquier análisis que
pretenda hacer pie en la unicausalidad”, expresó de manera oficial. “El escenario del río Gualeguaychú reviste de por sí de gran complejidad, en principio por sus características propias, al ser tramo final de una cuenca, lo cual implica ser receptor de cursos de agua superficiales cuyo estado real se desconoce”, argumentó.
Y siguió: “Adicionando los posibles impactos de las fuentes de aportes generados por la actividad humana de nuestro ejido, como la planta de tratamientos de efluentes del Parque Industrial, la deriva de los inmuebles rurales que utilizan agrotóxicos [SIC], la planta de tratamientos de efluentes cloacales de Pueblo Belgrano, la planta de tratamientos de cloacales de la Ciudad y las actividades irregulares apostadas en zona ribereña”.
Los números del informe
La palabra de los productores
“Culpar al otro”. Así titularon los dirigentes de la Sociedad Rural de Gualeguaychú al comunicado oficial que difundieron tras las palabras del gobierno provincial.
Para los productores, la respuesta por parte de la Municipalidad a los estudios “ha sido otra vez no asumir su enorme responsabilidad e intentar desviar la atención“.
“Esta reacción por parte del intendente y su gestión no es admisible. En vez de poner el foco en las principales causales que puede llegar a tener el problema, como por ejemplo el mal funcionamiento de la planta de tratamientos de efluentes cloacales, intenta culpar y salpicar a otros”, aseveraron.
En ese sentido, recordaron que el Ejecutivo actual “lleva cuatro años al frente de la comuna” y que mientras “todas las cloacas de la ciudad volcaban al río de manera directa, la municipalidad se empeña en culpar al sector agropecuario“.
“Otra vez, el enemigo dialéctico del intendente aparece en escena. Sí, porque en su insólita defensa deja traslucir que los emprendimientos productivos agrícolas, la cría de pollos, porcinos y vacunos son responsables de que nuestro río esté repleto de materia fecal”, lamentaron los productores.
Si bien reconocieron que “todas las excreciones animales pueden llegar a tener una incidencia”, también afirmaron que es “en un nivel infradecimal, mínimo e irrisorio”.
“Desviar la atención del problema hacia el sector agropecuario es una felonía. Un manotazo de ahogado de quien no puede mostrar resultados o soluciones y quiere diluir las culpas. Se trata, una vez más, de un ataque al sector agropecuario que tampoco vamos a dejar pasar. En un momento de nuestro país que se habla de consensos, a la actual gestión municipal no les interesan. Todo lo contrario, sigue haciendo del enfrentamiento y la diatriba una forma de hacer política“, consideró la Sociedad Rural local.
Fuente: InfoCampo
Así lo plantearon desde Bayer, que finalizó con éxito el primer año de su integración organizacional tras adquirir a Monsanto. Fuertes inversiones.
Fuente: Clarín Rural
Fuente: La Nación
“Como parte de un constante propósito de innovación y progreso Vicentin continúa invirtiendo, analizando cada oportunidad que signifique avanzar y capacitando a su personal para alcanzar la excelencia y el éxito”. Así finaliza la reseña histórica publica en el sitio web del grupo agroindustrial Vicentín.
Por el momento, no se estaría cumpliendo esta meta.
En un comunicado oficialmente difundido por la empresa se comunica a trabajadores. proveedores y de las entidades financieras que, “ha iniciado un proceso de reestructuración de pagos a partir de una situación de estrés financiero que afecta actualmente a la empresa”.
Asimismo, dice la misiva que, “el aumento significativo de las toneladas de molienda y exportación pero se han visto negativamente afectadas por un contexto de crisis recurrentes, aumento de tasas de financiamiento, cierre de mercados y el incremento permanente del costo argentino”.
En este sentido, también transmiten tranquilidad: “Estamos evaluando distintas alternativas y trabajando para poder cumplir los compromisos adquiridos, somos una empresa familiar que ha crecido y generado oportunidades. Confiamos en continuar contando con ese apoyo para resolver de manera exitosa la circunstancia que nos toca transitar.”
CRONOLOGÍA
Vicentin lleva invertidos más de 900 millones de dólares en la actividad productiva en el país en los últimos 10 años, esas inversiones efectuadas en sus plantas de molienda, biodiesel, etanol y en los puertos buscan promover la logística operativa.
A comienzos del nuevo milenio, Vicentin a través de su sociedad controlada Algodonera Avellaneda se involucra en el rubro textil con la adquisición de una nueva planta especialmente dedicada a la hilandería y tejeduría, rubro en el que se iniciaron en la década del 20.
Hacia 2005 inicia sus actividades Vicentin Paraguay S.A como agente de comercialización de soja destinada a los complejos industriales.
A mediados de 2007 la compañía comienza a involucrarse en el sector de biocombustibles, siendo la primer empresa del país que exporta biodiesel, desde su planta en Avellaneda. Luego, a partir de un joint venture entre Oleaginosa Moreno Hnos., Vicentin y Molinos Río de la Plata surge Renova.
Con el objetivo trazado de transformar proteína vegetal en carnes, en 2007 comienza su operación Los Corrales de Nicanor. Tres años después, desarrolla, junto con Molinos, un nuevo puerto y planta de “crushing” con generación de energía en Timbués, Santa Fe.
En el 2012, se pone en marcha la planta de bioetanol sobre la base de maíz o sorgo, en Avellaneda, Santa Fe.
Fuente: InfoCampo
Fuente: La Nación
El principal candidato a ser Ministro de Agricultura es muy cercano a Cristina Fernández pero tiene diálogo fluido con el sector.
Fuente: Clarín Rural
Una de las marcas líderes del mercado local resalta el crecimiento logrado a base de inversiones e innovación.
Fuente: Clarín Rural
Productores de banana, plátano y guineo, más especialistas en prevención fitosanitaria, se reunieron en la sede central del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), en Costa Rica, para conocer las iniciativas que se aplican en el país para combatir el Fusarium Raza 4 Tropical.
La actividad, organizada por el IICA en conjunto con Bayer, tuvo a distintos expositores que hicieron referencia a los avances del plan de contingencia de Costa Rica contra el Fusarium R4T; los esfuerzos para conocer; prevenir y enfrentar la enfermedad; las experiencias prácticas en el manejo integrado de la plaga y ejemplos concretos de opciones tecnológicas para convivir con ella, de manera eficiente, desde el punto de vista productivo.
Araya, del SFE, destacó que se trata del momento oportuno para actuar ante el Fusarium, mientras que el consultor Danilo Román fue enfático en la necesidad de contar con suelos sanos y de implementar muestreos y un sistema de monitoreo e identificación de la plaga, ya que la erradicación temprana es indispensable y la reacción en algunos países fue tardía.
También conocida como la enfermedad de Panamá, la plaga es una de las más destructivas del banano a nivel mundial. En Colombia se detectó recientemente y generó una declaratoria en emergencia nacional, en donde amenaza la subsistencia de los pequeños productores.
Datos sobre Fusarium R4T
Se propaga, principalmente, por el movimiento de material de siembra en las partículas de suelo que se adhieren al calzado de las personas, las herramientas y los vehículos, y mediante el agua de escorrentía o riego que arrastra el hongo de un sitio a otro.
Una vez que el hongo se introduce en el sistema vascular de las plantas se desencadena un colapso en su mecanismo de transporte de agua y nutrientes, lo que afecta su fotosíntesis y les provoca la muerte. A la fecha no existe un control químico, biológico o genético para contrarrestar la acción patogénica.
No existe un tratamiento totalmente efectivo viable de suelo o plantas para controlar o curar el marchitamiento por Fusarium en el terreno. El hongo, en esporas, en el suelo permanece activo durante décadas. La única medida preventiva disponible en la actualidad es la cuarentena, previniendo la transferencia de tierra afectada o material vegetal de zonas infectadas a zonas libres de Foc R4T.
Fuente: InfoCampo