Después de haber trabajado de manera intensa, entre sus 40 y 50 años, en proyectos vinculados a la educación musical, ahora la reina Máxima anunció que quiere dedicar todos sus esfuerzos durante la próxima década a campañas y acciones relacionadas con la salud mental.Máxima: todos los amores de la reina de Holanda antes de conocer a GuillermoOranje Fonds, la fundación de la que Máxima y el rey Guillermo son patrocinadores, comunicó que pondrá en marcha un programa especial en honor al cincuentenario de la reina. Se trata de un plan para apoyar 80 iniciativas de distintos voluntariados durante al menos tres años junto a la organización MIND para asistir a personas psicológicamente vulnerables en su recuperación y su reincorporación a la sociedad. View this post on Instagram A post shared by Koninklijk Huis (@koninklijkhuis)“Cumplir 50 años significa algo. Es un buen momento para pensar: ¿qué quiero hacer durante la próxima década? Quiero poner toda la energía en esto durante los próximos diez años”, dijo la argentina durante la presentación del programa en el Palacio Noordeinde.Para Máxima, la salud mental es un tema importante a nivel personal. Su hermana menor, Inés, luchó contra la depresión y terminó con su vida en 2019. Durante la última entrevista televisiva que la reina consorte brindó hace unas semanas, se preguntó si podría haber hecho algo más por ella: “Hicimos todo lo posible para guiarla, pero lo cierto es que no somos profesionales”.El fondo de pantalla del celular de la reina Máxima sorprendió a la prensa“Pienso que el tema debería estar más abierto a la discusión. Muchos todavía sienten el estigma y les resulta muy difícil hablar de ello. Por eso, mucha gente vive sufriendo durante tantos años: por miedo a arruinar una imagen perfecta. Como resultado, se vuelven cada vez más vulnerables, porque muestran una sonrisa por fuera y sufren por dentro. Así, recuperarse se vuelve cada vez más cuesta arriba. Creo que la salud mental y sus enfermedades deberían ser tan importantes y evidentes como tener una pierna rota”.
Fuente: La Nación