Hay que espiar el futuro. Pasó el primer capítulo del primer gran desafío de Sebastián Battaglia como entrenador de Boca. Fue con éxito al ganarle a Atlético, en Tucumán, por 2-1, logrando tranquilidad en el Torneo 2021 por mantener la diferencia con el puntero Talleres. La disposición de una formación mixta compuesta por más suplentes que titulares dio resultado. Aunque ahora vendrá la parte más seria de estos días en los que su equipo se juega paradas importantes: ante Patronato, por los cuartos de final de la Copa Argentina, competencia a ganar para clasificar a la Copa Libertadores 2022. Y el técnico, más allá de los análisis futbolísticos de los primeros encuentros de su ciclo, pone por delante una cuestión que excede los límites del campo de juego.El juego, que hasta aquí arrastra un análisis positivo, es un aspecto en el que seguirá trabajando sin urgencias: es lógico que, en su primer mes al mando, no todo sea color de rosa. Su mayor preocupación parecería estar, justamente, en esa administración del grupo: no pasa por la elección de los mejores, sino que esté claro su mensaje como líder en sus futbolistas, sean protagonistas o tengan papeles secundarios. Y esa, cree él, es una de las fórmulas para pelear hasta el final cada competencia.Battaglia, en el partido contra Atlético Tucumán (Fotobaires /)Y es que Boca necesita estar más unido que nunca. Año tras año –desde hace 14– el anhelo de volver a conquistar la Copa Libertadores se hace más grande en un club que, en la primera década del siglo, se había acostumbrado a tener que hacer huecos constantemente en su vitrina para colocar cada nueva Libertadores que levantaba. Y vaya si lo vivió Battaglia, que fue parte de los cuatro planteles que la ganaron en ese período (2000, 2001, 2003 y 2007). Grupos que, incluso, albergaron guerras de ego, pero que se protegían en la cancha.No obstante, la primera deuda parcial es clasificar a la edición del año que viene. Para eso, debe terminar el 2021 haciendo un excelente tarea en los dos campeonatos nacionales que disputa. Entonces, el ex volante central pide competencia sana, esfuerzo y aliento desde afuera. Por ahora, no se desespera: “En el torneo vamos partido a partido. Tenemos que hacer nuestro trabajo y después ver lo que hacen los demás. Después, le damos mucha importancia al partido con Patronato (del miércoles), buscaremos la siguiente rueda de la mejor manera”, se refirió a la importancia de no descuidar ninguno de los frentes.Atletico Tucuman vs Boca. 18/09/21 (LANACION/Fernando Font/)“Somos un grupo y, después, entran once. Se toman decisiones: yo cuando era jugador también quería jugar, pero en algún momento me tocó estar en el banco. A veces, el que está afuera termina siendo más importante que el titular. Si los muchachos entienden eso, sacaremos cosas buenas”, deseó en la conferencia de prensa, repitiendo las palabras de su presentación. Y finalizó el concepto: “Siempre es bueno que uno tenga dudas en la decisión. Eso hace que, cuando uno necesita soluciones, sepa que las tiene en el banco. Esperamos que todos entiendan que tenemos un mismo objetivo”.Todos para uno y uno para todos, parece ser el lema del santafesino. Un ejemplo lo dieron Lisandro López y Carlos Izquierdoz: hicieron dupla central ante el Decano por el recambio empleado, pero la realidad es que el primero es suplente y el segundo es el capitán del grupo.Battaglia y una indicación. “Tenemos que hacer nuestro trabajo y después ver lo que hacen los demás”, destacó (Mauro Alfieri/)El autor del primer gol del triunfo se sinceró ante el micrófono: “Estoy para cuando me necesiten. No voy a mentirles a los bosteros: me mata no jugar y sentarme en el banco sólo para ver a mis compañeros, pero es lo que me toca hoy. Yo sigo trabajando con mucho respeto”, lanzó López. Su representante, Gustavo Goñi, alguna vez dijo que “si no juega, va a tener que irse”. Izquierdoz felicitó a su amigo: “Me pone muy contento el gol y la actuación de Licha”.Eso busca Sebastián Battaglia, pero también el Consejo de Fútbol de Juan Román Riquelme: que el disgusto por no ser considerado no se imponga a la posibilidad de tirar todos de la misma soga para que Boca consiga el boleto a la Copa Libertadores.
Fuente: La Nación