A principios de primavera, podés notar que el ficus (Ficus benjamina), tan común en jardines hogareños o en veredas, y desde hace un tiempo también en interiores, se deshoja rápidamente. Si es así, se puede tratar de un ataque de trips, una plaga agresiva que aparece cuando comienza la temporada. Aquí, control y opciones de tratamiento.Grillo topo, el enemigo subterráneo del céspedDetectar el síntomaHojas plegadas a la mitad, con manchas rojizas oscuras y amarillentas.Luego de plegarse, aparecen agallas marrones.Deshojamiento intempestivo, prematuro y abundante, debilitando la planta.Se ve el ataque en las hojas jóvenes, no en las hojas viejas.El lado B de la ortiga, la planta que pica al contacto con la piel, pero es comestible y nutritivaCómo identificar la plagaLos trips que atacan específicamente al género Ficus miden unos 2,5 a 3,5 mm , en estado adulto.Los trips que atacan específicamente al género Ficus, en estado adulto miden unos 2,5 a 3,5 mm; son de tamaño relativamente grande. Se trata de una plaga de difícil control una vez que ha conseguido doblar las hojas jóvenes y protegerse en su interior. Los huevos son de cilíndricos a elípticos, lisos y traslúcidos (tras la puesta, blancos antes de eclosionar). Los encontramos en la superficie de las hojas.Seis fertilizantes orgánicos para nutrir sin químicos a tus plantas de interiorLos trips, al principio, son amarillos, pero rápidamente se tornan de un marrón oscuro casi negro. Los ojos son rojos. Se alimentan en la superficie de las hojas jóvenes en expansión, causando una especie de “abarquillamiento”. Los adultos depositan los huevos sobre las hojas dobladas. Tras esta protección se desarrollarán los ejemplares inmaduros. En zonas cálidas, este insecto está plenamente activo durante todo el año. En lugares más fríos su proliferación se detiene con la llegada del invierno, y se retoma a principios de primavera.Lustrosas, enteras y sin pliegues: si la planta está sana, sus hojas deben verse así.TratamientoEl control de esta plaga debería realizarse antes de que las hojas se cierren sobre sí mismas ya que los trips, escondidos dentro de ellas, son muy difíciles de eliminar. Por eso conviene llevar un control y observación contantes sobre el material vegetal para poder actuar a tiempo.Buenas prácticas:Poda y destrucción de partes infectadas de la planta.Mantener el material vegetal en un lugar más bien fresco y tirando a húmedo, ya que esta plaga se desarrolla en clima seco y caluroso.Eliminar las malas hierbas que sirven de refugio a la plaga.Colocar trampas cromáticas de color azul cuando el ataque es leve o moderado.Lucha biológica: Los enemigos naturales de esta plaga, principalmente depredadores: hemípteros, coccinélidos, arañas, ácaros, trips depredadores. Tanto Orius sp. como la chinche marrón han proporcionado buenos resultados en el control del trips en infecciones leves o moderadas.Una jardinera apasionada por la jardinería orgánica comparte recetas de preparados naturalesTratamientos químicos: La lucha química no es fácil puesto que los trips se encuentran muy protegidos en el interior de las hojas dobladas y los insecticidas no los alcanzan bien. Hay que mojar las plantas a conciencia, con productos preferentemente sistémicos y repetir el tratamiento al cabo de 7 o 10 días. Materias activas: formetanato, aceite emulsionable, fenitrotión, malatión, dimetoato, piretrinas, dinotefuran, entre otros. El producto más eficaz es el aceite emulsionable, el segundo es el formetanato. Se recomienda el uso de productos respetuosos con la fauna auxiliar. Y también es recomendable alternar materias activas para evitar resistencias cuando el ataque es severo.
Fuente: La Nación