Por Ron BoussoLONDRES, 12 ago (Reuters) – Los precios del petróleo
operaban estables el jueves luego de que la Agencia
Internacional de Energía (AIE) dijo que la rápida propagación de
la variante Delta del coronavirus desacelerará la recuperación
de la demanda global de crudo.* A Las 1140 GMT, los futuros del crudo Brent
perdían 12 centavos, o 0,17%, a 71,32 dólares el barril, luego
de haber subido previamente a máximos de sesión de 71,90 dólares
el barril.* Los futuros del petróleo WTI de Estados Unidos
retrocedían 21 centavos, o 0,3%, a 69,05 dólares el barril.* El aumento de la demanda de petróleo revirtió bruscamente
su curso en julio y va a avanzar más lentamente durante el resto
del año debido a la propagación de la variante Delta de
COVID-19, dijo el jueves la Agencia Internacional de Energía
(AIE).* “El crecimiento para el segundo semestre de 2021 se ha
rebajado de forma más acusada, ya que las nuevas restricciones
por COVID-19 impuestas en varios de los principales países
consumidores de petróleo, sobre todo en Asia, parece que van a
reducir la movilidad y el uso del petróleo”, dijo la AIE, con
sede en París.* La AIE dijo que el mes pasado la demanda global cayó en
120.000 barriles por día (bpd) y espera que el crecimiento del
consumo sea unos 500.000 bpd inferior en el segundo semestre del
año, en comparación con su previsión de julio, explicando que
los cambios se debían a una revisión de los datos.* Pero en una mirada más optimista del mercado, la OPEP
mantuvo el jueves su pronóstico de una fuerte recuperación de la
demanda petrolera mundial en 2021 y un mayor crecimiento el
próximo año, a pesar de las preocupaciones sobre la variante
Delta, que han afectado los precios.* El informe de la OPEP fue revelado un día después de que
Estados Unidos instó al bloque y a sus aliados -conocidos como
OPEP+- a elevar la producción para abordar los crecientes costos
de las gasolinas, que considera una amenaza para la recuperación
de la economía mundial.
(Reporte adicional de Jessica Jaganathan. Editado en español
por Marion Giraldo)
Fuente: La Nación