El primer semestre ya finalizó y en la segunda mitad del año se suman nuevas tensiones. De cara a las elecciones, el Gobierno intenta que la suba de precios se desacelere y, aunque los economistas confían en que así será, también proyectan que para fin de año la inflación se acercará al número temido: un 50%.De acuerdo con el informe Latin Focus de julio, que promedia las proyecciones de más de 40 consultoras y entidades financieras, tanto locales como extranjeras, el año cerrará con una inflación del 48,4%, cifra que no sufrió variaciones con respecto a la encuesta previa. Además, prevén que se desacelere a 40,7% para 2022.Más cepo: cómo funciona la operación de moda para girar dólares al exterior“En abril, las mayores subidas de precios se registraron en transporte, salud y restaurantes y hoteles. La inflación aumentó a 48,8% en mayo desde el 46,3% de abril, registrando la cifra más alta desde febrero de 2020. Mientras tanto, la inflación promedio anual aumentó a 40,7% en mayo (abril: 40,3%)”, señaló el informe.Las previsiones más benévolas provinieron de Gabriel Rubinstein y Asoc (44%), MAPFRE Economics (44,5%), Oxford Economics (44,7%). En sentido contrario, UBS pronostica una inflación del 54,9%, Credit Suisse un 54,1% y OJF & Asociados un 51,8%.Los controles de precios que lleva adelante el Gobierno buscan controlar la inflaciónUn dólar ancladoEn cuanto al tipo de cambio, Latinfocus proyecta que la depreciación del peso continuará: en un contexto de inflación de dos dígitos y “una economía frágil”, la moneda local seguirá perdiendo terreno.De todas formas, el panel de expertos sigue ajustando a la baja. El mes pasado proyectaban un dólar oficial mayorista a $114,47 a fin de año, mientras que en julio reajustaron más de dos pesos hacia abajo, posicionando la moneda en los $112,23. Esto se debe a que el Banco Central “se apega a un tipo de cambio flotante administrado para el peso”: en el último mes la moneda se depreció un 1%, cuando en enero el ritmo era del 4%.“Desde diciembre las proyecciones vienen con una baja sostenida, ahora está en $112, arriba de lo que Guzmán quería (en el Presupuesto lo previó en $102,5) pero es como que le van creyendo un poco. Esto sucede porque el Gobierno está moviendo el tipo de cambio cada vez más lento, por estos días está cerca del 1,1% mensual”, resaltó Camilo Tiscornia, director de C&T Asesores Económicos.Para el economista, esta tendencia no es sostenible en el tiempo. Con una inflación por encima del 3%, “no podés mover al dólar a este ritmo”. Si bien hay quienes suponen que anclar el tipo de cambio podría hacer que los precios se desaceleren, Tiscornia consideró que “nadie prevé que la inflación pueda converger al 1% en estos meses”. Como consecuencia, eventualmente el Gobierno tendrá que corregirlo, probablemente “haciendo que se mueva un poco más rápido”.La “trampa” del crecimiento económicoA pesar de la llegada de la segunda ola de coronavirus, que pegó fuerte en la Argentina, este año la economía seguirá recuperándose. En parte por un “rebote estadístico”, es decir, que tras el desplome de 2020 solo resta crecer. Otro tanto, porque este año la pandemia no provocó grandes cierres económicos. En ese contexto, los economistas estiman que el PBI crecerá un 6,3%, un aumento de 0,2 puntos porcentuales frente a la encuesta previa.“Creo que el Gobierno mismo entendió que no podía repetir lo del año pasado. Primero, porque la gente no lo soportaba. Segundo, porque no tenía tanto sentido, se entendió qué eran las cosas más riesgosas y eso facilitó que no cerrara tanto la economía”, agregó Tiscornia.En ese sentido, en abril, mayo y junio se notará el cierre económico que hubo -según el Indec, en abril la industria y la construcción cayeron 5% y 3%, respectivamente- . Sin embargo, en el segundo semestre la economía comenzará a remontar, aunque dependerá de la evolución de la variante Delta y el avance de la vacunación en la Argentina. “En el año no va a haber una gran ganancia, más allá de que estadísticamente va a dar altísimo”, completó el economista.“El PIB debería recuperar algunas de las pérdidas del año pasado en 2021, gracias a la eliminación gradual de las restricciones en el país y en el extranjero. Sin embargo, la inflación galopante, los controles de capital y la elevada incertidumbre política limitarán el ritmo de la recuperación. Además, la incertidumbre sobre las renegociaciones de deuda en curso con el FMI y la evolución de la pandemia empañan las perspectivas”, sostuvo el informe.Nuevas restricciones: cuáles son los vuelos aprobados y cancelados hasta el momentoOtras estimaciones de Latin Focus para 2021 señalan que el desempleo será del 11,2%, la producción industrial se ubicará en un 10,1%, las exportaciones crecerán un 9% y las importaciones un 15,6%. “Como nota positiva, a fines de junio el país llegó a un acuerdo con el Club de París para posponer los pagos programados, esquivando el default. Mientras tanto, el Gobierno extendió recientemente las restricciones existentes de Covid-19 hasta el 6 de agosto y anunció que las exportaciones de carne de res se limitarán hasta fines de 2021 en un intento por frenar la inflación, lo que aumenta las tensiones con el sector agrícola”, resumió.
Fuente: La Nación