(Agrega elección de presidenta)SANTIAGO, 4 jul (Reuters) – Una mujer de la etnia mapuche
fue elegida el domingo por sus compañeros para dirigirlos en la
redacción de la nueva Constitución de Chile, un cambio dramático
para un grupo que no estaba reconocido en el texto vigente.Elisa Loncón, de 58 años, profesora universitaria y
activista por los derechos educativos y lingüísticos mapuche,
fue electa por 96 de los 155 hombres y mujeres, entre ellos 17
indígenas, que integran el órgano para definir el nuevo texto
que sustituirá al heredado de la dictadura de Augusto Pinochet.Loncón aceptó el puesto con el puño cerrado por encima de la
cabeza, diciéndole a sus compañeros: “Un saludo grande al pueblo
de Chile desde el norte hasta la Patagonia, desde el mar hasta
la cordillera, en las islas”.”Aquí estamos. Agradecerle el apoyo a las diferentes
coaliciones que entregaron su confianza y depositaron sus sueños
en el llamado que hiciera la nación mapuche, para votar por una
persona mapuche, mujer, para cambiar la historia de este país”,
dijo al asumir el cargo.Su elección representa un punto culminante en un agitado día
que incluyó el retraso en la juramentación de los delegados
luego de protestas fuera y dentro del lugar, y enfrentamientos
con la policía.Los problemas surgieron luego de que marchas organizadas por
independientes, de izquierda e indígenas, así como otros grupos,
se enfrentaran con las fuerzas de seguridad que vigilaban el
anillo de seguridad frente al antiguo edificio del Congreso en
Santiago, sede de la ceremonia.Los delegados en el evento protestaron ante los
organizadores por las tácticas de la policía, golpeando tambores
y gritando sobre una orquesta clásica juvenil que tocaba el
himno nacional.En medio de las demandas de los delegados de que se
retiraran las fuerzas antimotines “represivas”, la representante
del tribunal electoral que presidía la ceremonia acordó
suspender el evento hasta el mediodía.El altercado subraya los intensos desafíos para la redacción
de una nueva carta magna en un contexto de profundas divisiones
que aún hierven después de que Chile fue desgarrado por
protestas masivas, que iniciaron en octubre de 2019 por la
desigualdad y el elitismo y fueron alimentadas por una feroz
respuesta policial.El organismo constitucional fue elegido por votación popular
en mayo y está dominado por candidatos independientes e
izquierdistas, algunos con raíces en el movimiento de protesta,
con una proporción menor de candidatos más conservadores
respaldados por el actual gobierno de centro derecha.Los delegados abordarán temas como el agua y los derechos de
propiedad, la independencia del banco central y las prácticas
laborales, lo que provocó nerviosismo entre los inversionistas
por cambios potencialmente significativos en el sistema de libre
mercado del mayor productor de cobre del mundo.Antes de que comenzara la ceremonia, los delegados aymara y
mapuche realizaron ceremonias espirituales con cantos y bailes
en las calles del centro de la ciudad que rodean la nueva sede
del organismo y en una ladera cercana.No reconocidos en la constitución actual, esperan que un
nuevo texto otorgue a sus pueblos nuevos derechos culturales,
políticos y sociales.La comisión tiene hasta un año para acordar un reglamento
común, establecer comités y redactar la propuesta, que también
deberá ser aprobada en referendo.Leandro Lima, analista del Cono Sur de Control Risks, dijo
que los independientes aportaron “legitimidad” al proceso dada
la profunda desconfianza de los chilenos en la política, pero la
escasez de experiencia y las profundas divisiones ideológicas
podrían causar retrasos críticos en la redacción.
(Reporte de Aislinn Laing)

Fuente: La Nación

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