Un subcomisario de la Policía Federal Argentina (PFA) quedó detenido acusado de doble homicidio después de haber matado a dos presuntos motochorros de 17 y 18 años que intentaron robarle. El uniformado disparó, al menos, 12 veces y la Justicia investiga si lo hizo por la espalda, cuando los delincuentes escapaban. No de los ladrones tenía un tiro en la frente.Así lo informaron a LA NACION fuentes judiciales. El hecho ocurrió ayer a la tarde en Wilde, en Avellaneda. En las próximas horas, la fiscal Natalia Miliore, a cargo de la investigación, indagará al subcomisario Néstor Garrido, de 49 años y que cumple funciones en la División Auxiliares de Seguridad y Defensa de la PFA. Todo ocurrió ayer pocos minutos después de las 18.30 en Boulevard de los Italianos y Lafuente, cuando el subcomisario Garrido volvía caminando a su casa. Había estado en la vivienda de un familiar, propiedad que está desocupada y él había ido a controlar que no la usurparan. La escena del intento de robo y los disparos del jefe policial quedó registrada por una cámara de seguridad.Violencia institucional: un policía, a juicio por matar de un tiro a una perra en ChubutGarrido estaba vestido de civil cuando fue sorprendido por dos ladrones que circulaban en una moto Honda XR 150. Los motochorros se le acercaron y uno, exhibiendo un arma de fuego, le dijo: “Quedate quieto”.#Wilde Así fue la balacera del subcomisario de la Federal. Por la trayectoria de los disparos, quedó detenido. Al parecer, todos en la huída de los delincuentes. Uno murió y el otro, menor de edad, está muy grave. pic.twitter.com/FSW3syS3Ng— Hechos y Derecho (@Hechosanderecho) May 24, 2021En ese momento, Garrido se identificó como policía. Habría dado la voz de alto y sacó de una riñonera un pistola marca Glock calibre nueve milímetros y comenzó a disparar.“El jefe policial disparó al menos 12 veces. Uno de los ladrones recibió seis balazos, el otro cuatro. Los primeros informes de los peritos indican que los disparos ingresaron de atrás hacia adelante. Es decir, por la espalda”, dijo a LA NACION una fuente de la causa.Uno de los supuestos motochorros murió a poco de ingresar en el hospital Presidente Perón de Avellaneda, donde fue trasladado en ambulancia. El otro falleció hoy en horas de la madrugada.“Uno de los supuestos delincuentes tenía un disparó en la frente. Se trata del joven de 17 años. Ahora se investiga si el balazo lo recibió cuando ya estaba herido en el piso o si Garrido le disparó de frente, cuando le mostró el arma”, agregaron las fuentes consultadas. El arma que tenían los motochorros y que secuestró el personal de la policía bonaerense que llegó al lugar de los hechos era de utilería, según explicaron los voceros consultados.“La pistola utilizada por el subcomisario Garrido no era el arma reglamentaria, provista por la PFA. Ahora investigaremos si tenía permiso de uso y tenencia”, sostuvo una fuente con acceso al expediente.Si bien falta la confirmación oficial, los jóvenes motochorros tendrían antecedentes en el fuero penal juvenil. Uno por encubrimiento y otro por robo en poblado y en banda.
Fuente: La Nación