La oleada de renuncias que siguió a la última presentación pública del presidente Alberto Fernández, rodeado solo de sus funcionarios más leales, agudizó las señales de cautela que ya venía mostrando el mercado tras festejar en la primera mitad del lunes la derrota del oficialismo en las elecciones del último domingo.La reacción se hizo visible tanto en la aceleración del sesgo bajista que mostró el índice S&P Merval de la bolsa porteña apenas quedó explicitaba la crisis (llegó a perder un 2,31% a media sesión aunque cerraría luego con un descenso del 0,7% promedio) como en la disparada que a ensayaron los precios del dólar en el mercado local de futuros cambiarios, sólo detenida al paralizarse la operatoria por falta de oferentes.El peor momento de mercado se verificó apenas se conocieron los ofrecimientos de dimisión. Quedó en claro que se trataba de un condicionamiento del accionista mayoritario de la coalición gobernante, que dirige Cristina Kirchner, hacia el mandatario para intentar forzarlo a rediseñar su Gabinete. Luego, por los rumores que hablaban de un reordenamiento y proyectaban al líder del Frente Renovador, Sergio Massa, como virtual primer ministro de la administración Fernández, las ventas se pausaron lo que permitió que las cotizaciones de algunos activos se recompongan parcialmente.“Los inversores notaron que se precipitó la crisis y optan por resguardarse al no tener claro el desenlace e intentando desentrañar si ganaría el ala de CFK o de Massa”, explicó Leonardo Chialva, de Delphos Investment, que venía de advertir por la mañana que si bien el oficialismo estaba buscando reeditar paquetes de estímulo como los aplicados luego de traspiés similares en el 2009 y 2013, no debería tentarse con ese camino. Eso, porque el grado de deterioro macroeconómico sufrido en los últimos años fue mayúsculo y dejó cerrados todos los atajos usados en el pasado. “Deberían recordar que esos atajos nos llevaron a la situación actual. Seguir probando con las mismas recetas solo acentuará la delicada situación”, había puntualizado.Sin espacio para repetir recetas pasadas“La oleada de renuncias es vista como una apretada al Presidente, lo cual es una mala señal para un mercado que se había ilusionado con un giro hacia alguna racionalidad”, explicó el economista Norberto Sosa, director de Invertir en Bolsa -IEB- al ser consultado por LA NACION sobre la reacción del mercado.“El giro hacia la racionalidad en estas circunstancias sería mantener a Guzmán y acelerar conversaciones con el FMI, porque la otra opción sería reeemplazarlo por alguien que genere más demanda de pesos, y no por otro que la haga disminuir y genere más presión sobre el tipo de cambio”, acota.Alberto Fernández y Martín Guzmán en los anuncios, antes de la oleadas de renuncias (Captura de TV/)Para Santiago López Alfaro la mayor cautela de mercado es natural. “Ya estaba todo para abajo y agudizó esa tendencia apenas conocidas las renuncias, pero nada disruptivo aún”, explicó el presidente de Patente Valores, quien cree que está crisis política “encontrará algún cause. No veo los funcionarios que responden a CFK le dejen todo a Alberto”.Por lo pronto, el clima de nerviosismo que inundó el mercado se hacía notar en la renovada carrera alcista que ensaya el dólar blue y lo llevó a volver al máximo de $185 (+1,4%) ya alcanzado días atrás, la suba que ensayaron los contratos de futuros del dólar mientras encontraron oferentes (sobre el final de la rueda desaparecieron), y la aceleración bajista del índice de precios de la Bolsa local y las cotizaciones de los ADR’s argentinos en Wall Street (llegaron al 9% en el peor momento), antes del rebote en los últimos 45 minutos de la sesión de negocios. También en el aumento a 1508 puntos que mostró la tasa de riesgo país, que había tocado un mínimo de 1439 unidades a primera hora del lunes.?Futuros de USD en @matba_rofex negociaron casi 613M. En una jornada en la que le hemos hecho honor a nuestra clasificación de “standalone”, la curva de tasas sube en promedio 179bps de TEA. El mercado buscó cubrirse en medio de este desmadre político. pic.twitter.com/lc4Ftnnzvu— Andrés Reschini (@adreschini) September 15, 2021El mercado descuenta e intenta calibrar el impacto que tendrá la batería de medidas económicas con que el Gobierno buscará dar vuelta o aminorar su derrota en solo 2 meses. ”Que buscará inyectar pesos a corto plazo en sectores más vulnerables tras la derrota en las PASO está descontado” explica el economista Santiago Bulat de la Consultora Invecq. También tenía su atención puesta en la presentación ante el Congreso del proyecto de presupuesto 2022, luego que el presidente Fernández adelantara -ante que se desatara la crisis- que las proyecciones incluían un acuerdo con el FMI.l
Fuente: La Nación