Fue una semana llena de emociones, con la alegría de saber que su hija empieza a volar en solitario pero, seguramente con la nostalgia que debe implicar verla independizarse. También fue una semana maratónica de trabajo, ya que Juana Viale (39) tuvo que hacer malabares en su agenda para grabar varios programas de La noche de Mirtha y Almorzando con Mirtha Legrand (El Trece) y así viajar dos semanas a París para acompañar a su primogénita, Ámbar de Benedictis (19), que se instalará en Francia para estudiar una carrera nueva relacionada con el arte.Juana, que salió desde su casa en Beccar con su novio y su hija, también priorizó la comodidad para viajar y optó por jeans gastados y zapatillas. Venía de una semana movidísima ya que hizo malabares en su agenda para dejar adelantados varios programas de La noche de Mirtha y Almorzando con Mirtha Legrand.
(Tadeo Jones/)La camioneta de la nieta de Mirtha Legrand, con todo el “cargamento” que llevaron a París. (Tadeo Jones/)El sábado 14, con looks casuales y cargadas de valijas, llegaron a Ezeiza acompañadas por Agustín Goldenhorn, el novio de Juana, y Nacho Viale. A tono con la pandemia, después de ayudarlas a acomodar “el cargamento”, el adiós tuvo que ser breve –aunque hubo tiempo para abrazos y algunas lágrimas– porque no se permite ingresar al aeropuerto.Súper caballero, Agustín Goldenhorn, el novio de Juana, cargó los bolsos en la camioneta.
(Tadeo Jones/)Protegida por un barbijo y tapada con un cap, la actriz y conductora empujó el carro con las valijas que cargaron su novio y su hermano. (Pedro Orquera/)Por un tema de protocolo sanitario la despedida fue breve y tuvo que ser en la vereda. (Pedro Orquera/)Una vez cruzado el Atlántico, las recibió con los brazos abiertos la mamá de Juana, Marcela Tinayre, que está desde hace algunas semanas en la Ciudad Luz (desde allí sigue conduciendo su programa, Las rubias) y esperaba ansiosa la llegada de sus chicas. Es sabido que Marcela tiene una relación muy cercana con su nieta, con quien comparte viajes, salidas y secretos como una amiga más. Son grandes compañeras. Cuando se separen, por más que hoy la tecnología nos acerca, también será muy dura para ella la distancia.Juana y Agustin salen desde 2019. Si bien la despedida fue breve no faltaron los abrazos y alguna lágrima. (Pedro Orquera/)Egresada del Liceo Francés Jean Mermoz, Ámbar habla francés a la perfección. Una vez que su mamá y su abuela se vuelvan, cuenta con algunos amigos de la familia que oficiarán de “tíos. En la foto se la ve abrazada a su tío, Nacho. (Pedro Orquera/)Siempre sincera a la hora de expresarse, días atrás Marcela le contó a Ángel de Brito en el programa Los ángeles de la mañana: “Todos los días escribo algo: no vayas a tal lado, no hagas lo otro. Me asusta porque está lejos de su país. Es una chiquita superinteligente pero una ciudad cosmopolita es una ciudad cosmopolita. Decí que acá están ‘sus tíos’ (se refiere a Guillermo Rosales y Carlos Feeney, íntimos de ella de toda la vida) que la vieron crecer. Va a ir a una universidad muy competitiva y, si bien queremos que estudie, tampoco queremos que tenga esa presión del hacha sobre la cabeza. Le dije: ‘Si esto no va probamos en otro lado. Quiero que estés bien y feliz’. Ella ha viajado muchísimo conmigo, habla francés y conoce muy bien la ciudad”, señaló.Marcela Tinayre, que está en París desde hace unas semanas, recibió a su nieta y a su hija. En la foto de su Instagram se la ve comiendo en París con su amigo Carlos Feeney, que vive allá.Ámbar se maneja con el idioma a la perfección, ya que es egresada del Liceo Francés Jean Mermoz y es “un alma creativa”, como suele definirla su mamá. En un principio se había hablado de que iba a estudiar cine, algo que también lleva en la sangre por su bisabuelo, Daniel Tinayre. Pero la propia Marcela aclaró que se trata de “una carrera nueva, relacionada con el arte”.La tapa de revista ¡Hola! de esta semana.
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Fuente: La Nación