Las encuestas sobre la pandemia del COVID-19 dejan claro que la sociedad le da hoy a la salud una importancia mucho mayor. Entendemos al fin que ha llegado la hora de cuidarnos, y por eso el #QuedateEnCasa #StayAtHome se hizo eco a nivel mundial.
Por otro lado, pero en el mismo sentido, las primeras estadísticas de consumo reflejan una creciente preocupación por la higiene y seguridad alimentaria, una prioridad anteriormente acotada a determinados grupos que de pronto se universaliza y exige respuestas con celeridad. En un futuro cercano, los que se preocupen por la inocuidad de los alimentos serán muchos más que antes de esta crisis.
Las predicciones de recuperación de actividad económica de las principales consultoras del mundo destacan que los sectores de retail, hotelería, viajes y ocio lo harán recién para la Navidad, que será austera. El rubro alimenticio, en cambio, será uno de los pocos que crecerá respecto de años anteriores, aunque los hábitos de consumo serán diferentes.
El food service se recuperará cuando haya plena actividad en escuelas, oficinas e industrias, mientras que los restaurantes, eventos y otros servicios gastronómicos fuera de casa se verán afectados y suplantados por la comida en el hogar.
Es ahí donde el sector frutihortícola tiene una oportunidad sin precedentes. La posibilidad de brindar productos de calidad y salubridad, con una demanda casi garantizada, dependerá de la capacidad de generar una oferta que esté a la altura de las circunstancias.
El rubro alimenticio será muy buscado para invertir, para hacerle frente a la volatilidad de los mercados que se vieron gravemente afectados, y la creación de instrumentos de inversión en este sentido será fundamental para colaborar con la oferta alimenticia.
En ese marco, la hidroponia asoma como una alternativa superadora al cultivo tradicional ya que, en promedio, los cultivos utilizan 90% menos de agua. Además, por tratarse de un ambiente controlado, las plantas ven reducida su afectación por plagas y enfermedades, y el producto final es limpio, con un sabor más auténtico.
ADBlick Hidroponia ofrece un instrumento de inversión adecuado al contexto, y en el momento oportuno. La producción de frutillas hidropónicas en invernaderos de alta tecnología es un paso hacia adelante, no solo desde una visión de rentabilidad sino también en el aspecto ambiental, ya que la reducción del uso de agroquímicos es un reclamo que venimos escuchando cada vez con más fuerza.
Producción de mayor calidad, más limpia, segura, confiable y predecible, sin olvidar la rentabilidad, parece ser el objetivo a alcanzar. Nos dimos cuenta de que debemos cuidarnos y podemos hacerlo, en nuestros hábitos de consumo y de inversión.

Fuente: InfoCampo

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