(Actualiza con incremento de categoría, ubicación de ciclón)Por Tamara CorroTECOLUTLA, México, 20 ago (Reuters) – Grace seguía
fortaleciéndose y el viernes se convirtió en un huracán
categoría 3 poco antes de impactar en la costa oriental de
México, informó el Centro Nacional de Huracanes de Estados
Unidos (NHC, por sus siglas en inglés).Tras cruzar el Caribe, el ciclón se convirtió por primera
vez en un huracán de categoría 1 en la escala de Saffir-Simpson
la madrugada del jueves antes de tocar tierra en la turística
costa caribeña mexicana. Después, se degradó temporalmente a
tormenta tropical y se adentró en el Golfo de México.La noche del viernes, Grace -convertido en un huracán mayor-
se hallaba a unos 165 kilómetros al norte de Veracruz y soplaba
vientos máximos sostenidos de 195 kilómetros por hora (km/h),
con ráfagas más fuertes, mientras seguía avanzando hacia el
oeste a 17 km/h, de acuerdo a datos del NHC.”Un fortalecimiento adicional es posible hasta que Grace
toque tierra, con un rápido debilitamiento esperado a medida que
Grace se mueve tierra adentro sobre las montañas del centro de
México”, sostuvo el NHC en su más reciente reporte.Las autoridades de Veracruz, una ciudad portuaria enclavada
en la costa del Golfo de México, elevaron la alerta en los
municipios donde Grace golpearía con más fuerza e instaron a la
población a estar pendientes de la evolución del ciclón.El viernes, Grace ya generaba fuertes lluvias en los estados
que forman la Bahía de Campeche, como Tabasco, Campeche y
Veracruz, donde se encuentra uno de los principales puertos del
país y terminales marítimas de la estatal petrolera Pemex.Una vez que avance sobre el centro de México el sábado,
Grace descargará fuertes lluvias en la zona metropolitana del
Valle de México, formado por la capital y decenas de municipios
adyacentes que alojan a más de 22 millones de habitantes.Por el momento, Grace no ha dejado víctimas mortales en el
país, aunque dejó temporalmente sin luz a cerca de 700,000
personas en la turística Península de Yucatán, donde también
causó inundaciones, caída de árboles y desprendimiento de
techos.(Escrito por Diego Oré y Raúl Cortés en Ciudad de México;
Editado por Miguel Angel Gutierrez)

Fuente: La Nación

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