(Actualiza con desarrollo del encuentro, agrega declaraciones
de líderes y detalles; cambia redacción)Por Crispian Balmer y Francesco GuarascioROMA, 21 mayo (Reuters) – Los líderes de las principales 20
economías del mundo y ejecutivos de grandes farmacéuticas
prometieron el viernes hacer más para ayudar a acabar con la
pandemia del COVID-19, con un incremento de los suministros de
vacunas en las regiones más pobres del planeta, las más
afectadas por la enfermdedad.Si bien las campañas de inoculación avanzan velozmente en
muchas naciones ricas, lo que ha contribuido a provocar un
drástico descenso de los nuevos casos, muy pocas vacunas han
llegado a los países menos desarrollados, donde el virus sigue
haciendo estragos.Hasta la fecha se han administrado unos 1.530 millones de
dosis en todo el mundo, pero sólo alrededor del 1% de ellas en
África, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).”Deberíamos bajar la cabeza de vergüenza”, dijo el
presidente sudafricano Cyril Ramaphosa, uno de los líderes que
intervino en una cumbre especial del Grupo de los 20 sobre la
pandemia, organizada por Italia y la Comisión Europea.”Estamos en una guerra global contra una pandemia. Cuando se
está en una guerra y todos son aliados, hay que utilizar todas
las armas sin esconderse detrás del beneficio a costa de las
vidas”, añadió.En un comunicado final, los líderes pidieron transferencias
voluntarias de licencias y tecnología para permitir un rápido
aumento de la producción de vacunas. Pero no hubo consenso, ante
la presión de Estados Unidos y otros países para que se renuncie
a las valiosas patentes de las vacunas.Sin embargo, Pfizer y BioNTech se
comprometieron a poner a disposición de los países más pobres
1.000 millones de dosis a un precio reducido este año. Otros
1.000 millones de vacunas se suministrarán en 2022, dijo el jefe
de la compañía, Albert Bourla.Johnson & Johnson prometió 200 millones de dosis a
COVAX, un programa de reparto de vacunas codirigido por la OMS,
mientras que la UE prometió 1.000 millones de euros (1.200
millones de dólares) para levantar centros de fabricación de
vacunas en África.”Mientras nos preparamos para la próxima pandemia, nuestra
prioridad debe ser garantizar que todos juntos superemos la
actual. Debemos vacunar al mundo, y hacerlo rápido”, dijo el
primer ministro italiano, Mario Draghi, en su discurso de
apertura.En tanto, el presidente de China, Xi Jinping, prometió el
viernes 3.000 millones de dólares durante los próximos tres años
para ayudar a los países en desarrollo a recuperarse de la
pandemia y propuso la creación de un foro internacional sobre
cooperación en materia de vacunas.El mandatario de Estados Unidos, Joe Biden, no estuvo entre
los oradores, y fue reemplazado por su vicepresidenta, Kamala
Harris.El gobierno de Biden apoyó a principios de mayo los pedidos
de muchos países en desarrollo para que se renuncie a las
patentes de las vacunas para el COVID-19, con la esperanza de
que eso impulse la producción y permita una distribución más
equitativa de las dosis en todo el mundo.
(Reporte de Crispian Balmer. Editado en español por Javier
Leira)
Fuente: La Nación