“Cuando un productor busca la excelencia en un herbicida, no solo espera el mejor control de malezas difíciles, sino también la máxima residualidad, generando el menor costo diario de control. Esto se debe a que se diluye la inversión del herbicida por los días de residualidad que otorga. Esto y muchos otros beneficios, los encontrás en el pre emergente FIERCE RM, de Summit Agro”. Así lo explica la Ing. Agr. Giuliana Nardi, coordinadora de Marketing Regional Santa Fe-Litoral de la empresa líder en tecnología japonesa Summit Agro.
Uno de los principios activos es Flumioxazin, el mismo de Sumisoya Top, un potente y rápido herbicida residual que actúa por contacto. El otro principio activo es Pyroxasulfone, el mismo de Yamato, que también le otorga residualidad al herbicida y actúa por difusión en la maleza.
Con esta combinación y la sinergia que la misma produce, se logra el control de gramíneas y de malezas de hoja ancha. Asimismo, este producto retrasa la aparición de malezas resistentes y se logra el control de las difíciles como Amaranthus spp. y Conyza Bonariensis, Echinochloa spp.
Otro aspecto interesante, señala la experta de Summit Agro, es que al igual que Sumisoya, es obtenido a través de la tecnología de micronizado, el cual se puede definir como la doble molienda del principio activo, que garantiza una mayor cantidad de partículas por unidad de volumen y más uniformes en tamaño. Ello asegura una mayor cantidad de partículas distribuidas en forma más homogénea en el suelo.
De esta manera se logra un mayor efecto de control, el efecto del Flumioxazin que actúa por contacto en la maleza.
Por otro lado, el Pyroxasulfone si bien tiene el mismo modo de acción de otros inhibidores de ácidos grasos de cadena larga, pertenece a la familia de las isoxasolinas que ofrecen mayor fotoestabilidad respecto de los productos del mercado. Asimismo, el Pyroxasulfone se utiliza en dosis muy bajas comparado con los activos del mismo entorno de uso y controla gramíneas anuales y yuyo colorado.
Fierce RM ofrece la residualidad más prolongada del mercado, que en promedio ronda los 60 días dependiendo de las condiciones en el momento de la aplicación y de la presión de malezas.
Como recomendaciones de manejo a campo se pueden destacar:
Antes de la aplicación es importante ingresar al lote y verificar que se encuentre libre de malezas. De tal manera se tendrá la seguridad de que el herbicida llegue al suelo y controle las semillas de las malezas que se busca controlar.
Es bueno recordar que su fotoestabilidad resulta mucho mayor a la de otros herbicidas del mercado, por ejemplo, a las cloroacetamida. Es decir que puede actuar luego de pasar más tiempo entre su aplicación y la primera lluvia siguiente. En otras palabras, Fierce mantendrá su efectividad.
Por otro lado, se debe tener en cuenta que si bien Pyroxasulfone requiere pocos milímetros para su incorporación y ambos activos no presentan retención en rastrojo, en los lotes en siembra directa, la cobertura es una barrera física que el producto debe atravesar para llegar al suelo y debido a ello se precisan al menos 15 a 20 mm de agua para activar el herbicida.
La dosis de herbicida es de 400 a 500 cc por ha. Y ello depende de la zona, el tipo de suelo. Puede decirse que en presencia de mayor contenido de materia orgánica y arcilla, ya que presenta una alta adsorción a los colides del suelo, se usan mayores dosis que en suelos arenosos. Por ejemplo, en Santa Fe Sur se recomienda entre 450 y 500 cc. Otro factor que define dosis es la presión de las malezas.
En años de clima seco, cuando el herbicida demora más su degradación, no se presentan problemas relacionados con el “carry over” que puede ocurrir con otros herbicidas. La alta selectividad de Fierce no genera inconvenientes en cultivos del invierno siguiente.
Asimismo, si se decidiera a último momento cambiar de maíz a soja por falta de agua a la siembra, el cambio puede practicarse sin problemas en el caso de Fierce.
Debido a sus características físico- químicas Fierce presenta un bajo potencial de lixiviación y alta adsorción a los coloides del suelo permaneciendo en los primeros centímetros del perfil. Ello trae aparejada la ausencia de lixiviación con lo cual se evita la contaminación de napas, a diferencia de otros herbicidas que presentan tal inconveniente. Ello también implica que la zona de acción de Fierce es donde se encuentra el banco de semillas de malezas, es decir en los primeros 1 a 3 cm de suelo.
“Estas características hacen que el herbicida Fierce sea una excelente herramienta para el control de las malezas en el cultivo de soja y maíz. A su vez, debemos tener en cuenta que es un complemento a las demás prácticas de manejo, y que el uso adecuado y planificado de la misma va a garantizar el éxito del control de las malezas”, explica para finalizar la experta de Summit Agro.
Fuente: InfoCampo