Hacer jardinería con los chicos es una forma de vincularlos con la naturaleza y de acercarles aprendizajes de formas alternativas y divertidas. En tiempos de mucho sedentarismo y juegos digitales, podés invitarlos a cultivar sin tierra y armar una pequeña huerta en recipientes con agua. Verduras como apio, cebolla, ajo y berro se prestan para esta técnica. Es muy sencilla y fácil, y en pocos días, podrán tener la experiencia de cosechar hojas y brotes para disfrutar en ensaladas o en distintas preparaciones.Jugar en el jardín: tres actividades para que los chicos se diviertan y aprendan en la naturalezaCultivar sin tierra puede ser una actividad jardinera para que los chicos vean de primera mano el desarrollo de algunas hortalizas. (Ilustraciones: Ana Carucci (Archivo Revista Jardín)/)ApioCortá la base de la planta de apio.Colocala en un bol con agua (que sólo cubra la base).A la semana, ya vas a ver cómo crecen las primeras hojas desde el centro.A las dos semanas, ya podés trasplantarla a una maceta.Acodo, la técnica sencilla de invierno para multiplicar tus arbustosLas hojas de apio se pueden ir cosechando de afuera hacia adentro, para usar en sopas o guisos. Las de cebollas, como verdeo, para todo tipo de preparaciones. (Ilustraciones: Ana Carucci (Archivo Revista Jardín)/)CebollaMuchas veces aparecen brotes en las cebollas y, en ese momento, cambia el sabor del bulbo. Tiene un fuerte olor a azufre y deja de ser rico. Pero, ¡no lo tires! Esa cebolla brotada va a dar hojas muy tiernas y ricas que se pueden usar como cebolla de verdeo.Tomá la cebolla brotada y clavale 2 escarbadientes.Colocala en un vaso con agua que cubra la base donde crecen las raíces.A la semana, vas a ver las nuevas hojas saliendo del centro del bulbo.A las dos semanas, ya podés trasplantarla a una maceta y dejarla dentro de la cocina, para ir cortando las hojas a medida que se necesitan para cocinar.Tres cultivos rápidos de invierno para tener una cosecha exprésBerrosCuando compres un atado de berros, vas a ver que algunos tienen raíces.Elegí los más robustos y saludables.Colocalos en un frasco con agua.Cuando se hayan desarrollado más raíces, trasplantalos a un sector sombreado de la huerta o en el jardín.Berro y ajos, dos hortalizas que se desarrollan muy bien en contenedores con agua. Podés usar frascos, vasos o cualquier contenedor. Si es transparente, mejor: van a poder ver de cerca el crecimiento radicular de las plantas. (Ilustraciones: Ana Carucci (Archivo Revista Jardín)/)AjoCuando veas que aparece un brote verde en el ajo, ¡no lo descartes! De ese brote van a crecer hojas muy sabrosas; de hecho, en otros países, esas hojas se venden como “ajos tiernos”. Las hojas son especialmente ricas en tortillas o cortaditas para aromatizar las ensaladas.Poné el ajo en una tacita con 2 cm de agua o directamente en una maceta con sustrato suelto.El brote verde debe quedar por fuera de la tierra y sólo hay que esperar a que crezcan las hojas.
Fuente: La Nación