Por Julie SteenhuysenCHICAGO, 8 ago (Reuters) – La continua propagación del virus
del SARS-CoV-2 ha dado lugar a un alfabeto griego de variantes,
un sistema de denominación utilizado por la Organización Mundial
de la Salud para rastrear las nuevas mutaciones del virus que
causa el COVID-19.Algunas han dotado al virus de mejores formas de infectar a
los humanos o de evadir la protección de las vacunas.Los científicos siguen centrados en Delta, que es la
variante dominante que está aumentando rápidamente en todo el
mundo, pero están rastreando otras que podrían ocupar su lugar
algún día.DeltaLa variante Delta, detectada por primera vez en la India,
sigue siendo la más preocupante. Está afectando a poblaciones no
vacunadas en muchos países y ha demostrado ser capaz de infectar
a una mayor proporción de personas vacunadas que sus
predecesoras.La OMS clasifica a Delta como una variante de preocupación,
lo que significa que ha demostrado ser capaz de aumentar la
transmisibilidad, causar una enfermedad más grave o reducir el
beneficio de las vacunas y los tratamientos.Según Shane Crotty, virólogo del Instituto de Inmunología de
La Jolla, en San Diego, el “superpoder” de Delta es su
transmisibilidad. Los investigadores chinos descubrieron que las
personas infectadas con Delta transportan 1.260 veces más virus
en sus narices en comparación con la versión original del
coronavirus.Algunas investigaciones estadounidenses sugieren que la
“carga viral” de las personas vacunadas que se infectan con
Delta está a la par con las que no están vacunadas, pero se
necesita más investigación.Mientras que el coronavirus original tardaba hasta siete
días en causar síntomas, el Delta puede hacerlo dos o tres días
antes, lo que da al sistema inmunitario menos tiempo para
responder y montar una defensa.Delta también parece estar mutando aún más, con la aparición
de informes sobre una variante “Delta Plus”, un sub linaje que
lleva una mutación adicional que ha demostrado evadir la
protección inmunitaria.La India incluyó a Delta Plus como variante de preocupación
en junio, pero ni los Centros para el Control y la Prevención de
Enfermedades de Estados Unidos ni la OMS lo han hecho todavía.Según Outbreak.info, una base de datos de COVID-19 de código
abierto, Delta Plus se ha detectado en al menos 32 países. Los
expertos afirman que aún no está claro si es más peligroso.Lambda: ¿en declive?La variante Lambda ha llamado la atención como una nueva
amenaza potencial. Pero esta versión del coronavirus,
identificada por primera vez en Perú en diciembre, podría estar
retrocediendo, según dijeron a Reuters varios expertos en
enfermedades infecciosas.La OMS clasifica a Lambda como una variante de interés, lo
que significa que lleva mutaciones sospechosas de causar un
cambio en la transmisibilidad o de provocar una enfermedad más
grave, pero todavía se está investigando. Los estudios de
laboratorio muestran que tiene mutaciones que resisten a los
anticuerpos inducidos por las vacunas.El doctor Eric Topol, profesor de medicina molecular y
director del Scripps Research Translational Institute de La
Jolla (California), afirmó que el porcentaje de nuevos casos de
Lambda notificados a GISAID, una base de datos que hace un
seguimiento de las variantes del SARS-CoV-2, ha ido
disminuyendo, lo que indica que la variante está retrocediendo.En una llamada reciente con los CDC, los expertos en la
enfermedad dijeron que Lambda no parecía estar causando un
aumento de la transmisibilidad, y las vacunas parecen estar
resistiendo bien contra ella, dijo el doctor William Schaffner,
un experto en enfermedades infecciosas del Centro Médico de la
Universidad de Vanderbilt que asistió a la discusión.B.1.621 – una de las que hay que vigilarLa variante B.1.621, que surgió por primera vez en Colombia
en enero, donde causó un importante brote, aún no se ha ganado
una letra en el alfabeto griego.El Centro Europeo para la Prevención y el Control de las
Enfermedades la ha catalogado como una variante de interés,
mientras que el Ministerio de Sanidad de Inglaterra describe la
B.1.621 como una variante en fase de investigación. Lleva varias
mutaciones clave, como E484K, N501Y y D614G, que se han
relacionado con una mayor transmisibilidad y una menor
protección inmunitaria.Hasta ahora, se han producido 37 casos probables y
confirmados en el Reino Unido, según un reciente informe del
gobierno, y la variante se ha identificado en varios pacientes
de Florida.¿hay más en camino?El doctor Anthony Fauci, principal asesor médico de la Casa
Blanca, advirtió recientemente que Estados Unidos podría estar
en problemas a menos que más ciudadanos se vacunen, ya que un
gran grupo de personas sin inmunizarse da al virus más
oportunidades de propagarse y mutar en nuevas variantes.Los defensores de una mayor distribución internacional de
dosis de vacunas por parte de los países ricos afirman que
podría ocurrir lo mismo, ya que las variantes surgen sin control
entre las poblaciones de las naciones pobres, donde muy pocas
personas han sido inoculadas.Aun así, una cuestión clave es que las vacunas actuales
bloquean la enfermedad grave pero no evitan la infección, dijo
el doctor Gregory Poland, científico especializado en vacunas de
la Clínica Mayo. Esto se debe a que el virus sigue siendo capaz
de replicarse en la nariz, incluso entre las personas vacunadas,
que pueden transmitir la enfermedad a través de pequeñas gotas
de aerosol.Para derrotar al SARS-CoV-2, dijo, probablemente se
necesitará una nueva generación de vacunas que también bloqueen
la transmisión. Hasta entonces, el mundo seguirá siendo
vulnerable a la aparición de nuevas variantes de coronavirus,
según Poland y otros expertos.
(Información de Julie Steenhuysen; información adicional de
Ahmed Aboulenein en Washington; edición de Michele Gershberg y
Daniel Wallis, editado en español por Gabriela Donoso)
Fuente: La Nación