El director de Sanidad Animal del Senasa afirmó que hay avances para que ese país acepte carne proveniente de todas las provincias.
Fuente: Clarín Rural
El director de Sanidad Animal del Senasa afirmó que hay avances para que ese país acepte carne proveniente de todas las provincias.
Fuente: Clarín Rural
Pasaron exactamente dieciseis años para que se relevaran, nuevamente, datos clave sobre el sector agropecuario argentino a través de un censo. Entre septiembre y noviembre del año pasado el Instituto Nacional de Estadística y Censo (INDEC) llevó a cabo esta tarea sobre sobre 250.881 explotaciones agropecuarias.
Los datos preliminares, de este valioso trabajo, se presentaron este jueves en la sala de conferencias del Palacio de Hacienda, con la presencia del director del INDEC, Jorge Todesca, acompañado por el ministro de Hacienda, Hernán Lacunza, y su colega de Agricultura, Ganadería y Pesca, Luis Miguel Etchevehere.
Aunque el año 2008 era la fecha intermedia entre 2002 y 2018 para realizar el otro relevamiento censal en todo el país, el conflicto entre el sector agropecuario y el Gobierno dejó incompleta la misión, sobre todo, en la provincia de Buenos Aires.
“Esta es una brecha muy profunda e incomprensible”, señalóTodesca. Durante este tiempo hubo cambios rotundos en el sector, y se activaron y desactivaron muchos paradigmas productivos y del agronegocio.
Lacunza aseguró, “es una herramienta de trabajo para los privados, para sus decisiones de inversión, para los gobiernos para desplegar sus políticas sectoriales en base a datos ciertos”.
A esto, Etchevehere completó, “hace 16 que se produjo el último censo, en buena hora que podamos tener una herramienta para poder analizar dónde estamos parados y como proyectarnos”, agregó Ministro de Agroindustria.
Del total de más de 250.000 explotaciones relevadas en el presente censo, 222.201 corresponden a establecimientos con límites definidos, mientras que 22.506 no tienen límites definidos y 6.174 son mixtas.
#DatoINDEC
El Censo Nacional Agropecuario (#CNA2018) identificó 250.881 explotaciones agropecuarias (EAP) que cubrían 157.423.932,1 hectáreas, con un promedio de 627,5 ha por EAP https://t.co/uTMgsdx5Yd pic.twitter.com/XgKuRTQOBW
— INDEC Argentina (@INDECArgentina) November 7, 2019
En cuanto al régimen de tenencia de la tierra y uso de la misma, 69% de los establecimientos son trabajados por sus propietarios, mientras que 19% corresponden a arrendamientos. En este sentido, la conducción de las empresas está inequitativamente distribuida.
Asimismo, el Censo Agropecuario arrojó que de las 157 millones de hectáreas ocupadas por explotaciones, 33.182.639 hectáreas fueron implantadas, mientras que el restante 124.241.291 hectáreas se destinaron a otros usos.
Por último, los establecimientos ganaderos fueron 130.803 donde fueron relevados 40.411.905 vacunos; 8.625.383 ovinos; 2.573.681 caprinos; 3.601.236 porcinos; y 908.288 equinos.
#DatoINDEC#CNA2018: 78% de las 211.928 explotaciones agropecuarias conducidas con tipo jurídico personas humanas era administrada por productores varones y 20% por mujeres https://t.co/uTMgsdx5Yd pic.twitter.com/T3QIW7abNj
— INDEC Argentina (@INDECArgentina) November 7, 2019
Fuente: InfoCampo
Los especialistas del INTA aseguran que, en el área de influencia del consorcio canalero Marcos Juárez y General Roca (Córdoba), hay 200 milímetros más de agua de lluvia que no se consumen y, de allí, las problemáticas que generan los anegamientos en los campos.
Para evitar esto, desde el INTA proponen un protocolo integral de trabajo que impulsa la implementación de estrategias de manejo que aumentan el consumo de agua en el suelo. Todo ello, acompañado por las obras de evacuación autorizadas por la secretaria de recursos hídricos de Córdoba.
Pablo Bollatti, especialista en napas del INTA Marcos Juárez, Córdoba, consideró “clave” que las 155 mil hectáreas, que forman parte del Consorcio canalero Marcos Juárez – General Roca, “adecúen su balance hídrico a fin de consumir los 200 milímetros más de agua”.
Para el técnico, este incremento en el consumo es “fácilmente practicable” por los productores y no genera costos extras.
De acuerdo con el especialista, las obras de construcción de canales son “insuficientes”, si detrás no hay un cambio radical de manejo agronómico en los campos que reduzca el riesgo. Para lograrlo, desde INTA propusieron un protocolo integral de trabajo, denominado “verde”, que se complementa al que se venía haciendo hasta ahora: el “azul”.
“Consiste en implementar estrategias a escala de cuenca, ya muy difundidas por el INTA hace años, como son la rotación de cultivos, los cultivos de cobertura, cultivo de trigo para grano, pasturas como alfalfa, entre otras tantas”, detalló Bollatti.
A su vez, reconoció que la planificación agro-hidrológica conlleva una serie de cuestiones tales como contar con un técnico responsable para el desarrollo del proyecto hidráulico y agronómico.
Con respecto al ante proyecto, mientas que el protocolo azul considera su elaboración por parte de la secretaría de Recursos Hídricos de Córdoba, el verde incorpora la elaboración de un informe agronómico de la cuenca y un ante proyecto agronómico en el que se evaluarán las superficies anegadas, la profundidad freática, el uso del suelo de la cuenca y el requerimiento de sistematización.
Además, el proyecto final consideraba la elaboración y presentación del proyecto en la secretaría de Recursos Hídricos de Córdoba, con los permisos de paso firmados por todos los propietarios implicados.
A esto, el protocolo verde le agrega la elaboración de un proyecto de manejo agronómico para la cuenca, determinando si hay áreas a sistematizar y qué ocupación con cultivos de invierno deberá implementarse junto con la obra en función de la profundidad de napa y la recarga hídrica del suelo.
“Este último debe tener un acatamiento mínimo del 70 % de la superficie de la cuenca en cuestión”, aclaró Bollatti.
Fuente: InfoCampo
Investigadores chinos de la Tercera Universidad Médica Militar utilizaron cerdos vivos como muñecos de prueba en simulaciones de choques de altas velocidades. Activistas animales calificaron el experimento como “cruel” y “ciencia basura”.
Quince cerdos jóvenes fueron atados a los asientos de coche para las pruebas, siete de ellos fallecieron de inmediato. Otros sufrieron múltiples lesiones, incluyendo laceraciones, hemorragias y hematomas internos, según una publicación del International Journal of Crashworthiness.
El portavoz de PETA, Zachary Toliver, describió las pruebas como “bárbaras” y dijo que dejaron a los animales “ensangrentados, magullados y destrozados”.
Los investigadores afirman que usaron cerdos porque su estructura anatómica era similar a la de los niños de seis años, argumento inválido según PETA.
“Los cerdos son anatómicamente diferentes de los humanos. Las compañías automotrices descubrieron hace años que este tipo de experimentos no tienen valor y no nos dicen nada sobre una experiencia humana en un accidente automovilístico”, expresó Toliver.
Los cerdos se usaron previamente en pruebas de choque en los EE. UU. hasta la década de 1990, cuando se le dio fin a la práctica después de la presión sostenida de PETA y otros grupos activistas.
“A pesar de la existencia de modelos sofisticados libres de animales, los experimentadores continúan sujetando a los animales maltratados y asustados en los asientos de los automóviles y los estrellan contra las paredes hasta que sus cuerpos están ensangrentados, magullados y destrozados. Los cerdos vivos se pulverizan en estas pruebas, los dejan con huesos rotos y lesiones internas graves antes de ser sacrificados y disecados”, aseguró el portavoz de PETA.
Los animales fueron atados a asientos que se montaron en un trineo y se estrellaron contra una pared.
El estudio del International Journal of Crashworthiness detalló cómo no se alimentó a los cerdos durante 24 horas antes del experimento, se les negó agua durante seis horas antes y se les administró anestesia para reducir la “excitación y el estrés”.
“De los animales probados, siete murieron inmediatamente después del impacto y el resto sobrevivió seis horas después de la prueba”, dijeron los científicos.
Los cerdos no fueron los únicos animales utilizados en los experimentos, y PETA afirmó que el Instituto de Investigación de Medicina del Tráfico y el Hospital Daping de China también usaron perros, arrojando pesas sobre sus cabezas para simular latigazo cervical, antes de matarlos y diseccionarlos.
Fuente: InfoCampo
Desde e INTA presentan un protocolo para mejorar los manejos agronómicos en 155 mil hectáreas en Marcos Juárez y General Roca, Córdoba, para aumentar en 200 milímetros el consumo de agua de lluvia.
Fuente: Clarín Rural
El titular de la Cámara de la Industria Aceitera afirmó también que Argentina puede aumentar sus ventas de trigo a Vietnam de 800.000 a dos millones de toneladas.
Fuente: Clarín Rural
En campo arrendado, la cifra asciende a 2.065 kilogramos por hectárea, afirmó la Bolsa de Cereales de esa provincia.
Fuente: Clarín Rural
Respecto del último relevamiento realizado en 2002 hay un 25% menos de explotaciones agropecuarias. Discrepancias con datos oficiales sobre cultivos y cabezas de ganado.
Fuente: Clarín Rural
Fuente: La Nación
“El ciclo 2019/20 parecía dejar claro que la agricultura se alejaba definitivamente de los años donde la soja dominaba inexorablemente. El área triguera en seis años pasó de estar anclada en un nivel de siembra de 600 mil ha a una siembra récord de 1,7 M ha en este 2019/20. Lo mismo se esperaba para el maíz: hasta agosto, se esperaba un 10% de suba en área maicera, respecto al año pasado. Pero tras la falta de lluvias de septiembre y octubre y la incertidumbre de no saber qué nuevos cambios pueden afectar los márgenes de los cultivos, se sembrará un 7% menos de maíz en la región núcleo, o sea 1,3 M de ha. Los técnicos de la región alertan del riesgo ambiental y económico que implica dejar de sembrar gramíneas: “rotar con maíz y trigo es la forma más eficiente de producir cuidando el ambiente. Baja la presión de malezas y enfermedades y el riesgo de inundaciones. Los rindes siempre son más estables y altos en campos bien rotados”, afirmó la Bolsa de Comercio de Rosario.
La Guía Estratégica para el Agro señaló que “Se sembraron casi 1,1 M ha de soja en los últimos 7 días Se trata de un 30% de soja de primera, que en el tirón de los últimos 7 días fueron implantadas, a pesar de las interrupciones de las lluvias. De esta manera se alcanzó a cubrir el 45% del área, poniéndose cabeza a cabeza con el promedio de progreso de los últimos cinco años a esta misma fecha. Al comienzo de la semana, la siembra se vio detenida por los temporales que dejaron entre 30 y más de 50 mm en la franja este de la región. Ramallo, la privilegiada de la semana, registró 78,6 mm. Clason le sigue con un total semanal de 64 mm. En el centro y oeste los acumulados fueron inferiores a los 10 mm. Los primeros cuadros sembrados están emergiendo en muy buen estado. Las malezas acechan, sobre todo en dónde no se llegó a tiempo con los barbechos. Rama negra, yuyo colorado y malezas resistentes son las que más dolores de cabeza causan a los productores”.
Por último, el GEA que elabora la BCR, aclaró que “el rinde triguero se juega su última carta contra el calor. Con días frescos, ideales para el llenado, así había comenzado la etapa que define el peso de los granos de trigo. Pero el aumento de las temperaturas de estos días comienza a atemorizar ya que puede arrebatar el grano y adelantar la cosecha, afectando el rinde. Otro temor son las enfermedades. Los focos de Fusariosis siguen latentes, los ataques del complejo de roya van en aumento. Pero, dado el avanzado estado fenológico, el impacto en los rindes sería bajo”.
Para acceder al informe completo hacer click AQUÍ.
Fuente: InfoCampo