El presidente de Confederaciones Rurales Argentinas, Jorge Chemes, redactó un escrito de opinión en el cual reclama soluciones y aportes solidarios por parte del Gobierno Nacional y el sector político, y aseguró que “el problema no es el campo, es el gasto descontrolado de la política”.
Compartimos las palabras del dirigente rural:
La decisión poco inteligente del gobierno nacional de aumentar los derechos de exportación, que es un impuesto negativo y que en cualquier porcentaje, retrae y desalienta la producción, nos obliga a poner de nuestro bolsillo para solucionar el gasto público que, en términos simples, no es otra cosa que el resultado de las malas decisiones políticas. Aportamos cada vez más, y sin embargo, el déficit crece y la pobreza nunca baja. Si los gobiernos no discuten las causas, la calidad y el tamaño del gasto, no habrá derechos de exportación, ni impuestos que alcancen porque la cuestión de fondo es el agujero negro de la política que gasta más de lo que puede y mal. El problema no es el campo, es el gasto descontrolado de la política.
Lo poco que va a recolectar el gobierno con más retenciones se contrapone a lo mucho que podría ganar si, en vez de quitarnos, pone el esfuerzo en originar más inversiones y confianza, porque, en rigor, para solucionar la pobreza lo que hay que generar es más riqueza.
El campo es una polea, que al girar, produce dólares frescos, alimentos, empleo genuino y, sin embargo, los gobiernos en sus más variadas ideologías y a lo largo de la historia, lo ha reducido a una caja sin fondo donde busca para pagar lo que gastan sin medida. Ese simplismo es el que explica también porqué el país está como está y porqué, otros países, con menos potencial pero más aspiraciones hacia el desarrollo y el progreso y más cuidado en el gasto, han despegado tanto. Es una utopía pensar que el crecimiento llega sin planificación y sin esfuerzos y que alcanza sólo con los enormes bienes que nos ha dado la naturaleza.
Nos preocupa la constante tentación de la política de explicarnos las dificultades pero eludir la autocrítica a la hora de asumir sus responsabilidades por sus malas decisiones. Sin asumir los errores, no hay posibilidad diseñar un futuro diferente al preocupante presente que hoy tenemos.
Somos pequeños y medianos productores que tratamos, cada día, de sostenernos y cumplir la meta de la competitividad y lo hacemos con el acompañamiento de un par de profesionales y el conocimiento que nos da años y años de trabajo. La paradoja es que con nuestro trabajo sostenemos enormes estructuras burocráticas que hasta ahora no han hecho ningún esfuerzo por ser eficientes, menos aún competitivas y menos aún generadoras de ideas para el crecimiento de la producción en cualquiera de sus segmentos. Hasta acá lo que ha logrado el campo es gracias a la imaginación, la perseverancia y el esfuerzo de las familias que todos los días le ponen ganas y esperanza donde otros no ponen nada.
Somos burros empujando un enorme carro en el que, cómo calabazas, la política pone más y más carga impositiva para aguantar los beneficios que a nosotros, los del campo, nunca nos llegan. El engranaje de este carro debería estar aceitado con proyectos y políticas que le den al campo futuro, tecnología, mercados, desarrollo y un porvenir. Sin embargo, la rueda cruje por la sequía de ideas, lo que nos produce un atraso enorme en términos comparativos con otras regiones.
En verdad, el campo, desde hace mucho tiempo está muy lejos de la visión romántica de magníficos atardeceres en estancias con platería. Somos, en rigor, miles de productores que nos hemos empobrecido junto con en el progresivo empobrecimiento del país y que hoy, trabajamos a destajo sin políticas, sin caminos, sin infraestructura, sin escuelas ni universidades que generen arraigo y enfrentando la avaricia constante de la política que desde hace años gasta más de lo que recauda y disfraza como déficit fiscal el enorme gasto público que crece con el mismo vértigo que la pobreza.
El gobierno ha tomado una decisión. Ellos tienen el poder político. Nosotros, el campo, la fuerza del trabajo. Esta magra y pobre estrategia sin táctica de aumentar los impuestos no es otra cosa que impulsar un conflicto y empobrecernos más. No sólo para el campo. También para el gobierno porque el presidente Alberto Fernández fue uno de los hombres que terció, en la 125, para evitar la confrontación y hoy, unilateralmente, nos empuja a tomar medidas.
El campo puede producir mucho más en un escenario diferente. La política deberá resolver si se va a quedar en los diagnósticos o avanza en la soluciones. Nosotros hacemos nuestra parte, históricamente solidarios, exhortamos al gobierno a hacer la suya porque el problema no es el campo, es la política.

Fuente: InfoCampo

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El evento que realiza la Bolsa de Cereales de Buenos Aires de forma anual, será el marco propicio para la presentación de las primeras estimaciones de la entidad de cara a la nueva campaña de granos finos 2020/21.
Contará con la participación del equipo técnico de la Bolsa de Cereales, expertos del sector privado y representantes del gobierno nacional, quienes analizarán las últimas novedades del sector bajo un contexto de alta incertidumbre por la pandemia del Coronavirus.
Entre sus objetivos pueden mencionarse:
* Analizar el complejo contexto económico y político en que se desenvolverá la Campaña de granos finos 2020/21, afectado por la expansión del Coronavirus;
* Presentar estimaciones de oferta y demanda de granos de Argentina para la nueva campaña y su contribución a la economía argentina;
* Describir las tendencias esperables sobre los niveles de producción, consumo y comercio de productos de las cadenas del trigo y la cebada para el mediano plazo;
* Estudiar la evolución de los mercados de granos y las posibles estrategias;
* Incentivar la discusión acerca de las políticas necesarias para promover el crecimiento del PBI agroindustrial y mejorar la inserción de estos productos en el comercio internacional ante un difícil escenario internacional.
Vea también: LA MÁS IMPORTANTE EN CINCO AÑOS: CRECERÍA EL ÁREA DE TRIGO ESTA CAMPAÑA
La apertura del Congreso, que se realizará a las 9 hs. estará a cargo de José Martins, presidente de la Bolsa de Cereales y de Luis Basterra, Ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación.
En el primer panel “Escenario y aporte de los cultivos de invierno a la Campaña 2020/21”, especialistas de la entidad analizarán las perspectivas climáticas y los incentivos económicos al productor, y presentarán las estimaciones de área, producción, producto bruto y exportaciones para las cadenas del trigo y la cebada.
En el segundo panel, “La visión de los actores del mercado”, representantes de cada uno de los eslabones de la cadena de valor analizarán la situación de los mercados doméstico e internacional de cara a la nueva campaña.
El encuentro se desarrollará entre las 9 y las 13 hs, y será transmitido on-line con ingreso gratuito. Para más información ingresar a la web de Perspectivas Agrícolas haciendo click AQUÍ, o acceder directamente al evento haciendo click AQUÍ.

Fuente: InfoCampo

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La consultora Datagro informó que según sus estimaciones, la cosecha de maíz brasileño finalizará esta campaña 2019/20 con un récord de 102,18 millones de toneladas.
El número queda levemente por encima de la última proyección de la consultora, que era de 101,93 millones de toneladas, y ligeramente por encima del récord de la cosecha pasada de 102,08 millones de toneladas.
El área apta cultivada con el cereal sería de 18,39 millones de hectáreas, es decir un 4% por encima de los 17,66 millones de hectáreas registradas la campaña pasada.
Un dato a destacar es que el aumento de la estimación se debe principalmente al aumento de la producción de maíz de segunda (safrinha), que se ubicaría en 76,58 millones de toneladas, cuando en el reporte anterior se estimaba 76,21 millones de toneladas.
Si bien la proyección podría marcar una récord para el país vecino, el coordinador de granos de Datagro, Flávio Roberto França Júnior, advirtió que los problemas climáticos pueden ser un gran problema para no concretar los números detallados en el informe.
Según el coordinador le explicó a Terra, “hay gran incertidumbre debido a la sequía que afecta a Paraná, la región sudeste y parte de la región del Medio Oeste, que ya muestran pérdidas de potencial productivo”.

Fuente: InfoCampo

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Los McDonald’s canadienses comenzarán a importar carne bovina debido a problemas de la cadena de suministro local, generados por la pandemia del coronavirus.
Según la información de Reuters, la cadena de hamburguesas informó que el abastecimiento de carne vacuna a través de la importación es una medida provisional, tras registrar limitaciones de capacidad de procesamiento por parte de sus proveedores.
El comunicado de la multinacional señala que “hasta que el suministro de carne bovina de Canadá se estabilice, nos abasteceremos de toda la carne canadiense posible, y luego compraremos carne vacuna importada”.
La compañía también señaló que podría eliminar temporalmente las hamburguesas Angus de su menú canadiense.

Fuente: InfoCampo

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