Manuel Belgrano, uno de los padres de la Patria, supo de luces y de sombras, de éxitos y fracasos, de glorias y pesares, que se distribuyeron a lo largo de esos diez años de gesta libertaria. Lo recordamos izando la enseña patria, encabezando los ejércitos nacionales, y en sus momentos más brillantes en Salta y Tucumán, pero también pesaron sobre él derrotas funestas y es parte de su legado la entereza que mostró en esos momentos tan oscuros.Hombre de ideas innovadoras, Belgrano dejó la comodidad de su trabajo como abogado para devenir en improvisado General. Consciente de sus limitaciones, le escribía a San Martín apenas dos días antes de la formidable derrota de Vilcapugio: “Por casualidad, o mejor diré, porque Dios lo ha querido, me hallo de General sin saber en qué esfera estoy. No ha sido esta mi carrera y ahora tengo que estudiar para desempeñarme y cada día veo más y más las dificultades de cumplir con esta terrible obligación (…)”.Tomado por sorpresa en la Pampa de Vilcapugio, los patriotas perdieron más de mil hombres y toda la artillería durante la contienda. Solo la oscuridad de la noche le permitió retirar lo que quedaba de su ejército. Lo paradójico de esta derrota y la de Ayohuma, acontecida 40 días más tarde, fue que parte de los efectivos realistas que lo hostigaron eran antiguos prisioneros del ejército español que el mismo Belgrano había liberado bajo la condición de no volver a tomar las armas contra los gobiernos patrios. Sin embargo, estos exprisioneros fueron relevados de su juramento por el arzobispo de Charcas y por tal razón volvieron a luchar contra los criollos, asistiendo a las derrotas del General.Bartolomé Mitre, en su historia de Belgrano, dice: “nunca el General fue más grande como militar ni más inhábil como político”. El coronel Dorrego, quien se recuperaba de sus heridas en Jujuy (además de estar sancionado por indisciplina), no tenía en alta estima a Belgrano, y descalificó esta actitud magnánima como infantil y cuya “inocencia” le estaba pasando una onerosa cuenta. Pero Belgrano mantuvo la entereza frente a esta derrota inesperada, “La victoria nos ha engañado para pasar a otras manos”, les dijo a los sobrevivientes del desastre, “pero en nuestras manos aún flamea la bandera de la patria”. El mismo General custodió la retaguardia, fusil al hombro, durante esa retirada entre las sombras.Derrotado una vez más en Ayohuma, Belgrano debió emprender otra retirada en peores condiciones. Lo único que ordenó entonces fue que los pocos soldados que lo acompañaban rezasen el Rosario.Con estas derrotas el gobierno patrio vivía momentos apremiantes. Belgrano había perdido el respeto de sus subordinados y la confianza de sus superiores. Era menester reemplazarlo, y el hombre del momento era San Martín, después de su victoria de San Lorenzo. Sin embargo, éste se resistía a reemplazar a Belgrano, con quien mantenía una amable relación epistolar además de estar gestando su estrategia continental. Fue Nicolás Rodríguez Peña quien le escribió al futuro Libertador, una nota fechada el 27 de diciembre de 1813: “tenemos el mayor disgusto por el empeño de usted en no tomar el mando en jefe del Ejército Auxiliar del Perú y crea que nos compromete mucho la conservación de Belgrano. Él ha perdido hasta la cabeza y en sus últimas comunicaciones ataca de un modo atroz a todos sus subalternos, incluso a Díaz Vélez”. El ejército del Norte se había politizado y las distintas facciones en pugna conspiraban contra su correcto funcionamiento. Compelido por el gobierno nacional, San Martín aceptó el cargo.Durante el histórico encuentro en la Posta de Yatasto, ambos próceres tuvieron la oportunidad de conocerse personalmente y charlar sobre diversos temas políticos en forma confidencial. Antes de volver a Buenos Aires, Belgrano le escribió a San Martín: “acuérdese usted que es un General cristiano… cele usted de que, en nada, ni aún en las conversaciones más triviales, se falte el respeto de cuanto diga a nuestra santa religión”. La misiva concluye aconsejándole a San Martín implorar a nuestra Señora de las Mercedes, nombrándola generala y que de ninguna forma “olvide los escapularios a la tropa”.Pronto el improvisado general recuperó un puesto de prestigio. La Revolución no podía prescindir de hombres de su talento. Viajó a Europa en busca de un Rey para gobernar estas tierras, propuso un descendiente del Inca como monarca y nuevamente se hizo cargo del Ejército del Norte, donde lo esperaban nuevos sinsabores.Enfermo y prisionero, volvió a Buenos Aires, donde se enfrentaría con la muerte. Sus pasadas glorias que no fueron inmediatamente reconocidas por sus coetáneos. Finalmente, la historia alumbró su gesta, que incluía también estas horas tan oscuras.

Fuente: La Nación

 Like

El Gran Premio de Francia de Fórmula 1 está en marcha el circuito Paul Ricard, por la séptima fecha del gran circo de la velocidad. La carrera puede verse en directo por ESPN.Max Verstappen, el piloto de Red Bull, hizo la pole position en la clasificación del sábado, pero en la largada cometió un error, se despistó y permitió que Lewis Hamilton tome la delantera.Vuelta 44Max Verstappen vuela y pasa a Valteri Bottas. El holandés ahora va por Lewis Hamilton que tiene 5 segundos de ventajaVuelta 39Mercedes le comunica a Lewis Hamilton que es muy probable que Max Verstappen lo pueda alcanzar antes de que finalice la prueba en Paul Ricard. El holandés marcó la vuelta más rápida de carrera para disminuir la desventaja a menos de siete segundos.LAP 39/53 Clear air ahead for Hamilton but Verstappen is closing the gap behind him It’s now around 7 seconds!#FrenchGP ?? #F1 pic.twitter.com/uYP927p5vA— Formula 1 (@F1) June 20, 2021Vuelta 35Los Mercedes tienen el control de la carrera, Lewis Hamilton es seguido por Valteri Bottas, tercero ya está Max Verstappen que marca 1:36.743 y logra la vuelta rápida y supera a Checo Pérez.Vuelta 33Se detiene nuevamente Verstappen en los boxes para poner neumáticos medios y ataca Hamilton que se queda con la punta. Le preguntan por radio a Hamilton qué hacer y cómo reaccionar a la estrategia de Red Bull.Vuelta 31Desde boxes le avisan a Lewis Hamilton que Max Verstappen está con problemas en su vehículo. Sin embargo, el holandés se aleja y le saca 3.5 segundos al multicampeón. Vuelta 27Paró Checo Pérez a cambiar neumáticos y Verstappen quedó en la cima. Hamilton le mete presión desde las segunda colocación. Valteri Bottas, tercero, pierde potencia en su Mercedes y se aleja de los dos primeros.Vuelta 25Hamilton comete un pequeño error de conducción en el último sector que le hace salir de la zona de DRS contra Max Verstappen. El británico comienza a protestar por radio por el fallo de estrategia de Mercedes que hizo perder la punta de la prueba.Vuelta 20Hamilton ingresó a los boxes, Checo Pérez quedó en la punta y Max Verstappen quedó en la segunda posición, complicando a los Mercedes.Vuelta 19Ahora es Max Verstappen es el que entra en los boxes para cambiar los neumáticos.Vuelta 15Charles Leclerc es el primero en pasar boxes para cambiar los neumáticos medios por duros.Vuelta 10Lewis Hamilton le comunica a sus ingenieros de equipo que los neumáticos medios están comenzando a degradarse y están muy calientes. A pesar de estos contratiempos, el multiplecampeón dispone de casi dos segundos de ventaja sobre Max Verstappen.LAP 8/533 seconds cover the top 3Hamilton ? Verstappen ? Bottas #FrenchGP ?? #F1 pic.twitter.com/fCzFnrqXxI— Formula 1 (@F1) June 20, 2021Vuelta 7La distancia entre Lewis Hamilton y Max Verstappen se estabiliza, de la misma manera que sucede con Verstappen y Valtteri Bottas, en un segundo y medio. Vuelta 3Max Verstappen trata de subsanar su error; con 1m39s571/1000 marca el récord de vuelta y trata de acercarse a Hamilton.Vuelta 1Max Verstappen se sale de la pista y pierde el liderazgo en el arranque mismo de la carrera. El Mercedes Benz de Hamilton, en la punta.

Fuente: La Nación

 Like

Esta madrugada, a metros del cruce de las avenidas del Libertador y Pueyrredón, un auto que circulaba a gran velocidad perdió el control, chocó y se subió a una plazoleta ubicada allí, en el barrio porteño de Recoleta, a metros de Plaza Francia.El vehículo, un Citroën C3 blanco, transitaba por Libertador y terminó dado vuelta, con la trompa a contramano y sobre el césped de la plaza. Por el impacto quedó destrozado: con el capot levantado, el parabrisas roto y las puertas tanto delanteras como traseras muy golpeadas.La segunda ola afecta a personas más jóvenes y eso, aunque no parezca, es una buena noticiaSegún fuentes del gobierno porteño, el chofer y el acompañante, ambos hombres mayores de edad, quedaron atrapados en el interior y debieron ser socorridos por bomberos.La intersección de las calles en donde tuvo lugar el accidente estuvo cortada por horas. La zona es una de las más transitadas del barrio y donde se encuentran edificios claves de la Ciudad como la facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires, el Centro Cultural Recoleta y el cementerio.El hecho tuvo lugar pasada la 1 de la mañana, en medio de las restricciones decretadas por la pandemia de coronavirus, que impiden la circulación de personas que no realizan trabajos esenciales entre la medianoche y las 6.

Fuente: La Nación

 Like

Febrero de 2021. Feda Baeza, directora del Palais de Glace, trabaja desde su departamento en la nueva rutina impuesta por la pandemia. Detrás del escritorio, la ventana se abre a una Buenos Aires silenciosa, desértica. Frente a la computadora, está inmersa en la convocatoria a unos premios para artistas visuales, mujeres y personas de la comunidad LGBT+, que lanzarán desde el emblemático museo en una fecha próxima y también emblemática: el 8M. Beba, su gata negra, la merodea con insistencia felina.Le toca poner su firma. Cerrar el documento virtual con “el gancho” que le dará vida institucional. Duda. Cuando asumió su cargo al frente del Palacio Nacional de las Artes, el 1 de abril de 2020, Feda ?historiadora del arte, curadora y profesora universitaria? usaba, en el ámbito académico y laboral, el nombre de varón que aún aparece en su DNI. Su transición como mujer trans comenzó hace poco más de un año, luego de su nombramiento en el museo. Ese día de febrero, algo le dijo que era el momento y puso las cuatro letras: F-E-D-A.“Fue la primera vez que firmé así. En verdad, lo venía haciendo desde hacía seis o siete meses de forma esporádica y en instancias menores, pero a veces tenía vergüenza y en algunos ámbitos sentía que tenía que firmar con el nombre de mi DNI. Hasta que en ese momento dije basta, es esta la firma y este el nombre. A partir de ahí, me animé a cambiarlo definitivamente de todas las firmas de los mails”, cuenta hoy la funcionaria.Sostener un nombre que no la representaba, le incomodaba. “En ese sentido, firmar como realmente me siento fue liberador. La firma es la constitución de algo distintivo, público, la marca en el sentido de una grafía que identifica a una persona. El poder exhibir eso me pareció fundamental”, agrega.Feda Baeza tiene 42 años, es historiadora del arte y curadora. En abril de 2020, asumió su cargo en el museo y poco después empezó su transición. (Hernan Zenteno/)En el Mes del Orgullo LGBT+ y consultada por LA NACION acerca de cuál considera que fue el momento en el que pasó de los temores a la aceptación, de los prejuicios –propios y ajenos– al abrazo de sí misma, la directora del Palais de Glace elige esa tarde de verano. En un papel, con el garabato más o menos legible en que plantamos nuestra iniciales, nombre o apellido; o de forma virtual, con las letras que en el teclado pierden la magia del pulso y la caligrafía propia, pero que aún así nos siguen definiendo, firmar es un acto tan cotidiano como constitutivo de quiénes somos. Y Feda lo sintió así. Ese fue su “momento orgullo”.Feda firma una hoja sobre el escritorio de su despacho en el Palais de Glace, que transitoriamente está funcionando en la Manzana de las Luces. (Hernan Zenteno/)Pero el camino para ser Feda empezó antes y estuvo atado, en buena parte, a su desembarco como funcionaria. Para ella, ser una mujer trans y estar en el ojo de la escena pública implica una gran responsabilidad: la posibilidad de tender un puente entre la diversidad de formas de ser y sentir, y aquellas personas a quien les cuesta entender (y respetar) que eso no solo es posible, sino también un derecho fundamental. Subraya un punto clave: el mundo laboral sigue siendo uno de los principales espacios de exclusión para la población travesti y trans, y la ley de cupo ?que ya cuenta con media sanción en Diputados? es una de las deudas más urgentes.Sentirse acompañadaComo el edificio del Palais está siendo reformado, el museo se mudó temporalmente con toda su colección a la Manzana de las Luces. La oficina de Feda es un espacio con una luz cálida, cubierto en madera. Pero esta entrevista la hace a través de Zoom, desde su departamento. Para hablar, utiliza de forma espontánea el lenguaje inclusivo, con esa “e” que busca romper con el binarismo y los mandatos de género que a ella le pesaron desde chica. “Lo que tiene ser trans es que es algo que no podés dejar en segundo plano frente a la mirada de les otres. Es una existencia pública que no puede ser negada”, dice.Se acuerda de cuando empezó a ver videitos de Tik Tok para explorar transiciones ajenas, una forma de sentirse acompañada por las experiencias de otras mujeres trans en la soledad impuesta por la cuarentena. En la pantalla de su celular, escuchaba los relatos de quienes compartían sus desafíos en ese camino: cómo había sido cambiar sus pronombres (por ejemplo, de “él” a “ella”), asumir un nuevo nombre o incluso embarcarse en cambios físicos a través de tratamientos médicos como terapias hormonales.Feda, en su oficina del Palais. (Hernan Zenteno/)En ese trayecto de empezar “a mostrarse públicamente” como una mujer trans, uno de los principales desafíos fue cuando, al poco tiempo de asumir como directora, tuvo que grabar un video donde por primera vez se vio su “imagen en movimiento”. No lo hizo sola, sino acompañada por parte de su equipo (que fue un apoyo fundamental) como Marlene Wayar, psicóloga social y activista trans. “Fue sentirme parte de un colectivo, poder ver mi historia, que tiene sus particularidades dentro de la pluralidad que hay en el colectivo trans, y poner la cara presentándome públicamente sabiendo que iba a estar expuesta a muchísimas miradas, porque ya no era un ámbito cercano: no eran mis amigues o mi familia, era gente que tal vez por primera vez se enteraba que había una persona trans dirigiendo el museo”, recuerda.***Feda tiene 42 años y se crio en el barrio porteño de Agronomía. De chica, sentía que no podía cumplir con todos esos ritos de masculinidad que van desde jugar al fútbol como un imperativo hasta usar ropa “de nene”. Había algo (o mucho) de todo eso que sentía forzado, ajeno, incómodo. Sobre todo en la secundaria, donde esas exigencias se volvieron extremadamente pesadas. Su adolescencia transcurrió en los 90 y los edictos policiales (que perseguían a las mujeres trans entre otras identidades dentro de la población LGBT+) seguían activos. “Era una realidad muy distinta a la de ahora”, recuerda Feda.Con dos hermanos menores del primer matrimonio de sus padres (tiene otro con bastante diferencia de edad por parte de su papá), creció entre varones. La suya era una familia “en algún modo progresista, setentista”, pero también con una educación “bastante católica”. “De niña y adolescente preguntaba, por ejemplo, lo que implicaba ser homosexual y si bien mi familia no era tan conservadora, sí estaba el tópico tan recurrente de: ‘Bueno, no es que esté mal, pero son vidas difíciles’. Ese horizonte siempre estaba presente discursivamente”, cuenta.¿Cómo vivió tu familia tu transición?La recepción fue muy buena y la verdad es que yo ya estaba parada desde otro lugar: era una persona con una vida bastante constituida, con un trabajo, con cosas resueltas. Obviamente, es otro modo de pararse y también es otro momento de mis xadres, por ejemplo. Si bien uno piensa: “personas tan grandes, de otra generación, cómo lo pueden tomar…”. La verdad es que en este caso fue muy bien, no me sentí para nada expulsada o rechazada. Y lo mismo con mis hermanos. Puede haber más o menos perplejidad, más o menos preguntas, pero en general me sentí muy acompañada por mi entorno familiar. Es una historia diferente a la de muchas personas trans. En ese sentido, soy una privilegiada.***No hay una sola forma de ser trans. Como no hay una única forma de ser en general. Si bien muchas personas recuerdan el descubrimiento de su identidad, con plena conciencia, en su primera infancia, otras, como Feda, no. “Yo tenía una relación acomplejada con mi cuerpo, los cambios de la adolescencia fueron difíciles para mí, pero no sentía que estaba en otro cuerpo. Sí tenía un interés y atractivo por el mundo de la feminidad. Vivía con una tía que era como mi hermana mayor cuando yo tenía unos 13 años. Dentro de ese horizonte familiar en que todos éramos supuestamente varones, ella era como un punto de fuga a otra cosa”, reconstruye Feda.De chica, Feda sentía que no podía cumplir con todos esos ritos de masculinidad que imponen los estereotipos de género. (Hernan Zenteno/)¿Cómo eras de chica?La verdad es que era una persona superacomplejada, tanto en la primaria como en la secundaria. Me costaba socializar. Si bien tenía amigues, el primer beso, todas esas cosas, me pasaron muy tarde. Yo soy una persona en la que la identidad de género o la sexualidad de la otra persona que me pueda atraer me es indiferente. Pero poder ser consciente de eso me llevó un tiempo, no fue tan sencillo. Durante 20 años estuve en pareja con una chica que conocí en la universidad. Conecté afectivamente, me enamoré y dije: “Mi camino es por acá”. Mi compromiso afectivo con esa pareja en algún punto me dificultaba indagar más profundamente en mí. Me separé como a los 40 años y mi transición fue posterior porque es algo que yo pude ir entendiendo después de esa relación, de a poco.**Identidad en construcciónEl camino de Feda empezó de a poco. Fue una exploración en la que buscó “ir haciendo pie”, indagando en qué y cómo se sentía cómoda. Cuenta que arrancó de un “modo amateur”, introduciéndose en la práctica drag. “Empecé a ir a fiestas y a boliches y a sentir en un momento que ese personaje, que esa identidad, se iba construyendo. Porque también es algo interesante de pensar: la identidad no es solo algo que está ahí y debe ser develado, sino que hay también un proceso constructivo con dudas, incertezas, tanteos, replanteos, donde te vas guiando por el placer, en qué punto te estás sintiendo cómoda y qué pasos querés ir dando”, subraya.¿Cuál fue el impacto de ese proceso de construcción de tu identidad en el ámbito académico y laboral en el que te movés?En mi vida laboral, yo creo que la transición me ayudó mucho como conocimiento personal, empezando por el poder establecer otros vínculos con las personas. Suena como un lugar común, pero me abrió otras posibilidades de empatía no sólo con respecto al género sino también frente a otros grupos vulnerados en el acceso a derechos. Me resultó más claro cómo es la mirada pública, qué es lo que puede sentir alguien que está siendo mirado de un modo incisivo o siendo sancionado por esa mirada, y esa es una experiencia que se puede tener con el género pero que también abarca a otras poblaciones a las que hacen sentir que están en lugares que no les corresponden. A mí, abrazar la condición trans me permitió mejorar mi capacidad de escucha, de interrelación y de empatizar más con esa vulneración de derechos.¿Sentiste la mirada prejuiciosa de los demás en algún momento?El ámbito académico se me alejó un poco en el pasillo. El ámbito del arte obviamente es más amable que otros y no me resultó difícil, pero igual no deja de observarse que la gente aún en espacios así a veces se muestra un poco más deconstruida de lo que realmente tiene la posibilidad de ser. En el museo se generó un nivel de intimidad y cercanía muy lindo con la gente con la que trabajo habitualmente. Creo que tampoco me quedaba otra: yo fui y me mostré tal cual soy y eso la gente lo valora. Por otro lado, si a alguien le cuesta usar mi pronombre o me dice por el nombre anterior, no me ofendo, porque sé con qué voluntad las cosas están dichas. Creo que la misión de las personas que tenemos acceso a voz pública no es tanto pelearnos sino tender puentes. Aunque a veces hay modos de preguntar, de decir, en los que se muestra una dificultad para entender… Pero bueno, eso se va trabajando.”La identidad no es solo algo que está ahí y debe ser develado, sino que hay también un proceso constructivo con dudas, incertezas y tanteos”, reflexiona Feda. (Hernan Zenteno/)Habías tenido la oportunidad de acceder a una educación universitaria y tenías una larga trayectoria, pero aún así sentiste que no podías dar el paso hasta no estar segura en lo laboral. ¿El temor a la exclusión, estaba?Y sí. Hace diez años no sé cómo hubiese sido mi vida si hubiese querido realmente avanzar o hubiese entendido antes algunas cosas de mí misma. No sé realmente cómo hubiesen reaccionado en los espacios donde trabajé. Esas condiciones materiales afectan mucho. En los últimos años, los cambios fueron muy acelerados afortunadamente. Hoy siento la responsabilidad de empezar a normalizar que las personas trans ocupamos distintos lugares y que podemos asumir espacios de decisión. Estamos en plena lucha para que el cupo laboral trans se haga efectivo y las dificultades para el acceso a la educación y al empleo formal dentro de la comunidad, claramente no son visibles por la opinión pública en general. Sobre este proyectoEste artículo forma parte de una serie sobre diversidad sexual y de género que LA NACION publica desde 2020. Este año, el especial se propone poner el foco en el #MomentoOrgullo de las y los entrevistados, esas situaciones en las que pudieron romper barreras vinculadas a la aceptación de su orientación sexual o identidad de género. El objetivo es a través de historias continuar concientizando sobre algunos de los principales prejuicios entorno a la población LGBTIQA+ que siguen arraigados y se basan en el desconocimiento, desnaturalizar las violencias y vulneraciones en el acceso a derechos de todo tipo y, por sobre todo, contribuir a visibilizar la diversidad que nos enriquece como sociedad.

Fuente: La Nación

 Like

<!– adopciones fundacion
Especial de adopciones para Fundación La Nación –>

Conocé otras historias y ayudá a cambiar sus futuros

Quiero una familia
Con qué sueñan los chicos que hace más tiempo esperan ser adoptados

Cumpleaños, primeros días de clases, Navidades. Los años pasan y ellos siguen esperando alcanzar
ese deseo tan profundo que les permita acceder a un derecho fundamental: crecer dentro de una
familia. Son preadolescentes, adolescentes, grupos de hermanos, niños y niñas que tienen algún problema de salud o una discapacidad, que viven en hogares de distintos puntos del país.
Más de 200 chicas y chicos en situación de adoptabilidad que forman parte de las convocatorias
públicas, la última oportunidad que tienen de ser escuchados.

Conocé sus deseos y ayudá a cambiar sus futuros

Otras chicas y chicos que esperan
SUBIR

FILTRA POR HERMANOS

Mostrar todos

PROVINCIA

Mostrar todos

VER MÁS
VER MENOS

¿Por qué son las chicas y los chicos que más esperan?
Para muchas niñas, niños y adolescentes, la espera para que se les restituya el derecho
fundamental a tener una familia se vuelve larguísima. Y a medida que pasa el tiempo, cada vez se
les hace más difícil. En la Argentina, según los últimos datos oficiales, viven en hogares más de
8000 chicas y chicos que, por haber atravesado diferentes violencias, se encuentran privados de
cuidados parentales. De ese total, se estima que cerca de un 10% está en situación de
adoptabilidad.
Aunque la ley establece un plazo máximo de 180 días, la realidad es que, en promedio, la mayoría
de ellos permanece en las instituciones unos tres o cuatro años (y algunos, muchos más) hasta que la
justicia determina que pueden volver con sus familias de origen o, agotada esa posibilidad, que es
necesario que sean dados en adopción.
Llegada esa instancia, empieza la búsqueda de una familia. Para aquellos que integran grupos
numerosos de hermanos, o son preadolescentes y adolescentes, niñas y niños de más de 10 años,
con alguna discapacidad o problemática de salud, se torna un gran desafío, porque no hay
postulantes dentro de los registros de adopción.
Según los últimos datos de la Dirección Nacional del Registro Único de Aspirantes a Guarda con
Fines Adoptivos (Dnrua), en la actualidad existen en el país cerca de 3500 legajos de personas y
parejas inscriptas para adoptar. De ellas, el 89% están dispuestas a ahijar a bebés de hasta dos
años, pero menos del 10%, a chicas y chicos de 9 o más. Por otro lado, solamente el 0,15% de los
postulantes adoptaría a cuatro hermanitos o más.
Con este escenario, algunos chicos pasan gran parte de su niñez institucionalizados, y al cumplir
la mayoría de edad, deben egresar de los hogares sin una red de contención que los sostenga.
“Queremos una familia” es el anhelo profundo que no abandonan. Por eso, las convocatorias
públicas cumplen un rol fundamental al ampliar esas posibilidades y hacer que, finalmente, la
espera pueda terminar.

Qué son las convocatorias públicas
Cuando una jueza o un juez dicta la situación de adoptabilidad de una niña, niño o grupo de
hermanos, la búsqueda comienza primero en el registro de postulantes a guarda adoptiva de la
jurisdicción a la que pertenecen los chicos. Si no se encuentra ningún perfil adecuado entre los
inscriptos, se amplía a las regiones cercanas y, por último, a todo el país. Agotadas esas
instancias de búsqueda dentro de la red de registros, los jueces pueden –no es un paso
obligatorio– recurrir a las convocatorias públicas. Se trata de un llamado abierto a toda la
comunidad, que se propone encontrar una familia para las niñas y niños a los que más cuesta
hallarles una. Cualquier persona o pareja interesada puede postularse, sin necesidad de que haya
estado inscripta previamente en un registro de adopción. Sin embargo, sí deben atravesar un
riguroso proceso de selección.
Las convocatorias visibilizan una realidad dura que nos interpela como sociedad: que hay chicos
para los que cuesta encontrar adultos dispuestos a formar una familia con ellos. También
suponen la oportunidad de visibilizar esas historias y por eso son una gran herramienta para dar
con postulantes.

LO QUE DEBERÍAS SABER ANTES DE ADOPTAR

Metodología. Cómo lo hicimos
Este artículo forma parte de un especial sobre ADOPCIÓN que LA NACION publicará a lo largo del año. Busca escuchar a las niñas, niños y adolescentes que esperan en hogares y visibilizar las convocatorias públicas para lograr que se cumpla su deseo y derecho fundamental de tener una familia. Los nombres fueron cambiados para preservar su identidad. Fue realizado con la colaboración del Consejo de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes de la ciudad Autónoma de Buenos Aires, el Registro Central de Aspirantes a Guarda con Fines de Adopción de la provincia de Buenos Aires, los registros de aspirantes a guarda de todo el país e información pública de la Dirección Nacional del Registro Único de Aspirantes a Guarda con Fines Adoptivos (Dnrua).

<!– APP CONTENT! –>
<!–

CRÉDITOS

Editor de visualizaciones multiplataforma
Pablo Loscri (@ploscri)

Diseño interactivo
Pablo Loscri (@ploscri)

Programación
Cristian Bertelegni (@cbertelegni) Gastón de la Llana (@gasgas83) Nicolás Rivera (@dudenico) Nicolás Bases (@nicobases)

Coordinación periodística
Florencia Fernández Blanco (@florfb)

–>

CRÉDITOS

Producción periodística

María Ayuso

Evangelina Bucari (@evabucari)

Edición periodística

Evangelina Bucari (@evabucari)

Diseño

Giselle Ferro (@giselleferrodg)

Programación

Nicolás Rivera (@dudenico)

<!– Créditos –>
<!– Copyright 2021 – SA LA NACION | Todos los derechos reservados –>

body main{
overflow: initial !important;
max-width: inherit;
padding: 0px !important;
}

header {
padding: 0px;
border-bottom: 0px solid #dadada;
position: fixed;
top: 0;
}

body main:not(.storytelling) {
margin-top: 69px;
}

/* —- estilo negro —- */

/*
.header__nav__menu{
border:0;
}

.–herramientas{
display: none !important;
}

.header.nota.nav-down li.header__nav__menu__item.–titulo-fijo a:before, .header.nota.nav-up li.header__nav__menu__item.–titulo-fijo a:before,
.header.nota.nav-down li.header__nav__menu__item.–titulo-fijo, .header.nota.nav-up li.header__nav__menu__item.–titulo-fijo{
color: #ffffff;
}
*/

<!–

document.body.classList.add(“bomba”);

–>

Fuente: La Nación

 Like

No hubo descanso para el seleccionado brasileño después de la goleada ante Perú, 4 a 0, en el estadio Nilton Santos, de Río de Janeiro, el último jueves. Con el pase a los cuartos de final en el bolso tras los dos triunfos obtenidos (en el debut, venció 3 a 0 a Venezuela), la delegación verdeamarela regresó a su tradicional base, el centro de entrenamientos Granja Comary, en Teresópolis, y allí permanecerá hasta el martes, cuando retornará a la Ciudad Maravillosa para enfrentarse, un día después, con Colombia, otra vez en la casa de Botafogo.En vivo.El calendario de la Copa América: la agenda de los próximos partidosEn el campamento ubicado en la fría Microrregión Serrana Fluminense, donde el equipo de Tite aguarda su próximo compromiso de Copa América, todo parece tranquilo y no deja de ser lógico, ya que, ante Perú, Brasil conquistó su novena victoria consecutiva entre las diferentes competencias. Sin embargo, en ese mismo lugar, poco menos de 15 días atrás, estuvo a punto de desatarse una “rebelión” que podría haber desencadenado en la renuncia de las principales figuras de los pentacampeones del mundo.Luego de dos años muy complicados por problemas extrafutbolísticos (lesiones constantes y una denuncia judicial por violación) el brasileño Neymar volvió a sonreír.Las desavenencias con el entonces presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), Rogerio Caboclo -ahora apartado de su cargo-, por la organización de la Copa América en el país que ya bordea los 500.000 muertos por Covid-19 pusieron en duda no solo la participación de Brasil en la Copa América sino también la continuidad del técnico Tite en su cargo, quien parecía ser pieza de recambio para el dirigente que ahora enfrenta un juicio por acoso moral y sexual tras la denuncia de una empleada de la confederación.Horarios y TV de la Copa América Brasil 2021: fixture, estadios y todo lo que hay que saberCon la salida de Caboclo, 10 días antes del comienzo de la Copa América, la tensión en la concentración brasileña se esfumó y las determinaciones radicales quedaron atrás, casi como un antiguo recuerdo. “Ya nos manifestamos, dijimos que no estamos felices con que la Copa América se juegue aquí. Un certamen centenario no puede ser organizado en 10 días. Pero estamos acá y queremos ganarla”, dijo el volante Casemiro, horas antes del debut ante Venezuela, cuando la turbulencia ya había pasado.Marquinhos, pieza clave en la defensa brasileña, a la que hace seis partidos que no le convierten goles.
(Twitter @CBF_Futebol/)La declaración del jugador de Real Madrid pareció ser la última llama de lo que fue una hoguera vigorosa. Al día siguiente, antes de partir hacia el estadio Mané Garrincha, la delegación recibió en su hotel al presidente interino de la CBF, Antonio Carlos Nunes, mejor conocido como Coronel Nunes, de 82 años, quien mantiene una relación de diálogo con los futbolistas e intenta pasar desapercibido en sus visitas oficiales.Desde lo futbolístico, el seleccionado brasileño asume la posición de principal candidato al título en esta Copa América. Sin embargo, su técnico, Tite, también aprovecha para probar variantes y darle chances a buena parte de los jugadores disponibles. Con dos partidos del Grupo B aún por disputar, el exDT de Corinthians ya utilizó a 21 de los 24 convocados para el torneo. Solo el arquero Weverton, el zaguero Felipe y el volante Douglas Luiz aún no tuvieron minutos, pero es muy probable que las oportunidades lleguen para ellos en los próximos duelos, ante Colombia, el miércoles, y ante Ecuador, el domingo 27, cerrando la fase de grupos.Vinícius Júnior, Lucas Paquetá, Éder Militão, Neymar y Douglas Luiz durante el entrenamiento de este sábado del seleccionado brasileño. (Prensa CBF/)Los únicos que disputaron los 180 minutos en el equipo brasileño durante el certamen subcontinental son Neymar y Éder Militao. “Lo planeamos con Juninho (Paulista, Coordinador de la Selección) y tenemos el consenso de todo el cuerpo técnico para hacer varios cambios, pero intentando mantener la estructura del equipo. La idea es pelear el título pero, en paralelo, queremos darle oportunidad a todos los jugadores, porque la pelota y la cancha hablan más alto”, explicó Tite tras el triunfo del jueves.Además de darle oportunidades a quienes no juegan a menudo con la verdeamarela, la rotación le permite al comandante otorgarle un descanso a varios futbolistas que arrastran un notable desgaste físico; sobre todo, a los que actúan en Europa (21 de los 24), que están sobre el final de una extenuante temporada.Las risas de Thiago Silva durante la práctica del equipo brasileño en el predio de Granja Comary. (Prensa CBF/)Pero más allá de las variaciones tácticas y de las chances, la fisonomía del seleccionado brasileño continúa siempre con un visible 4-4-2 cuando le toca defenderse y un 2-3-5 o 4-2-4, dependiendo de las circunstancias, cuando se lanza al ataque. “Trabajamos de dos formas, con dos ideas, con cambios ofensivos. Por eso digo que nos sirve mucho, para desarrollar esas ideas y darle minutos a buena parte del plantel”, agregó el técnico.Además de las nueve victorias consecutivas, que iguala la mejor racha de Tite desde que dirige a Brasil (obtenida entre 2016 y 2017), desde septiembre de 2016, el seleccionado lleva seis partidos sin recibir goles. En total, bajo el mando del entrenador gaúcho, la selección anfitriona de la Copa América disputó 56 partidos, con 42 triunfos, 10 empates y cuatro derrotas; el promedio de gol del equipo es de 2,19 y apenas tiene 19 tantos en contra.El rol de NeymarOtro de los puntos clave en el esquema de Tite es la adaptación del equipo para darle más “visión de juego” a Neymar. Actualmente, el jugador del París Saint-Germain desempeña el papel de un 10 clásico en la selección, lo que le otorga un mejor panorama y más libertad (hasta 2019 actuó como atacante en el esquema brasileño). Lejos de ser un “invento” de Tite, la posición más retrasada en el campo de Neymar fue, primero, una prueba de Thomas Tuchel y luego una constatación con Mauricio Pochettino, ambos entrenadores del ex-Santos en PSG.Si bien el público brasileño aún se divide entre la admiración hacia Neymar y la desconfianza por sus actitudes fuera de la cancha, el futbolista, que se acerca a los 30 años, parece tomarse las críticas con más naturalidad. “Es obvio que para mí es un orgullo enorme estar en la historia del seleccionado brasileño. Mi sueño siempre fue vestir esta camiseta. Es emocionante porque pasé por momentos muy difíciles en los últimos años. Representar a mi país y a mi familia me da mucha felicidad”, dijo entre lágrimas Neymar tras el partido ante Perú. Según las estadísticas de la FIFA, el 10 de Brasil está a nueve goles de alcanzar a Pelé como máximo goleador histórico de la canarinha (77 contra 68).Comandante Tite: el entrenador, que estuvo a punto de dejar el cargo hace dos semanas, se ganó el respeto de los jugadores brasileños. Al comando técnico del seleccionado le preocupa que 18 de los últimos 29 partidos hayan sido frente a rivales sudamericanos: quieren más roce con los europeos. (Prensa CBF/)A pesar de las seis victorias en seis partidos por Eliminatorias y de este comienzo arrollador en la Copa América, Tite y la CBF están preocupados, aunque no lo admitan públicamente, con la falta de roce ante las principales selecciones europeas de cara al Mundial de Qatar, en 2022. Desde la eliminación ante Bélgica, en los cuartos de final de Rusia 2018, Brasil disputó 29 partidos, y 18 de ellos fueron ante combinados sudamericanos.Para mejorar esa competitividad, un grupo de dirigentes de la CBF busca adversarios europeos de peso para enfrentar en las seis fechas FIFA agendadas para 2022. Están previstos cuatro amistosos entre el 30 de mayo y el 14 de junio del año próximo, y otros dos entre el 19 y el 27 de septiembre, última ventana antes del inicio de la Copa del Mundo, en noviembre. La misión de los dirigentes brasileños no es simple, ya que la UEFA pretende usar esas fechas para disputar partidos de la próxima edición de la Liga de las Naciones.

Fuente: La Nación

 Like

La actriz Gladys Florimonte contó en La Noche de Mirtha Legrand que decidió mudarse a Córdoba cansada de las restricciones debido a la pandemia de coronavirus dispuestas por el gobierno nacional, antes de haber pensado, incluso, radicarse en otro país.La conductora Juana Viale aprovechó su comentario y le recordó a la conductora el momento en el que admitió -cuando conducía el programa su abuela- que, como deseaba un cambio, votaría al actual presidente Alberto Fernández.Preocupa al Gobierno la baja en los sondeos entre los jóvenes y la clase media“En este programa, cuando estaba la abuela, dijiste que querías un cambio. Lo ibas a votar a Alberto y lo votaste a Alberto. Tuviste un cambio, ¿no? Digo, vendiste tus auto, estas viviendo de ahorros…”, chicaneó Viale a Florimonte.Entonces, la actriz explicó que viene “de una familia peronista”, pero aseguró que “no comulga” con la política. “Yo quería un cambio. Con el radicalismo no fue. Vamos con este, a ver qué pasa. Tampoco fue, no lo sé. Tampoco hubo tiempo para decidir a ver qué iba a hacer este hombre [por Fernández], estoy en desacuerdo en un montón de cosas”, respondió Florimonte.Sin embargo, la conductora no se quedó atrás e insistió con cómo vive “ese cambio” por el que apostó. “Yo tuve que achicarme, tenía dos autos y me tuve que achicar porque nuestra profesión fue tan castigada, todos los artistas, se apagó totalmente. Yo pude laburar en el verano en Córdoba, que me fue bárbaro, ahorrar unos pesitos, sobrevivir con eso y me tuve que achicar”, contó la actriz, quien dijo que la pandemia la “jorobó” y agregó: “Tenía un dinero para irme a ver a la Virgen de Guadalupe y no pude ir, porque me lo tuve que comer porque no teníamos trabajo”.La búsqueda de una tregua Macri-Larreta y la revolución ManesEn otro tramo de la emisión -en la que también participaron de la mesa el diputado nacional Mario Negri y los periodistas Claudio Rígoli y Carolina Losada, quien también será precandidata a senadora por Santa Fe de Juntos por el Cambio- Viale retomó el tema y asumió estar disconforme con los meses del aislamiento que fueron decretados en el país durante la primera ola de Covid-19. “¿Ya se te fue la calentura? Yo tengo una calentura”, le preguntó a Florimonte.“Cuando empezó la pandemia digo ‘vino esta enfermedad’, y después llegó un momento que me quería ir, digo ‘¿qué hago acá?’. Tengo familiares en Uruguay, amigos en Miami, en Italia, podía ir a cualquier lado”, relató la actriz sobre el momento en que dudó emigrar del país, pero sostuvo: “Yo amo a la Argentina y digo ‘culpa de todos estos, por qué me tengo que ir si yo amo a este país, me tengo que quedar acá’”.Intentó subir a un avión con medio millón de dólares en un bolsoAseveró, además, no ser “ni albertista, ni kirchnerista”, pero admitió: “Me encantó cómo hablaba este hombre [por Fernández] y creí. Después me fui para Córdoba, el gobernador [Juan] Schiaretti abrió las cosas, más o menos se podía estar. Acá fueron nueve meses que me estaba volviendo loca en un departamento, teniendo la casa digo ‘¿qué hago acá?’. Y allá empezamos a laburar, gracias a Dios, pude hacer la temporada”.Desencantada, Florimonte cerró: “Si me decís hoy, la verdad que no voy a votar nada, porque nada me convence. Todos los políticos son piripipí”.

Fuente: La Nación

 Like

A la espera de la nueva normalidad y del retorno de eventos literarios presenciales, hoy comienza el Primer Encuentro Internacional de Poesía “Ciudades invisibles”, que se realizará de manera virtual a lo largo de la primera semana del invierno 2021 en el hemisferio sur. El evento, organizado por instituciones de Ecuador, Uruguay, Colombia y la Argentina y que tendrá como eje la ciudad, se celebrará hasta el próximo domingo y participarán muchas de las más importantes voces de la poesía hispanoamericana. En esta edición, “concurrirán” más de sesenta escritores, intelectuales y catedráticos de diecinueve países de Hispanoamérica, como los mexicanos Coral Bracho, Marco Antonio Campos y Carmen Boullosa, las argentinas María Teresa Andruetto, María Negroni y Diana Bellessi, los colombianos Piedad Bonnett, Yirama Castaño y Pablo Montoya, la venezolana Adalber Salas, el brasileño Paulo Ferraz, las ecuatorianas Ana Cecilia Blum y Catalina Sojos, el uruguayo Alfredo Fresia y el español Juan Carlos Mestre.María Negroni leerá poemas el próximo sábado junto con el colombiano Pablo Montoya, el español Juan Carlos Mestre y la paraguaya Lía ColombinoEn el marco de Ciudades Invisibles, que toma prestado su nombre del libro de relatos que Italo Calvino publicó en 1972, se llevarán a cabo lecturas de poesía y debates. El encuentro está organizado la Fundación Cultural Esteros, de Uruguay; el sello El Ángel Editor, de Ecuador; El Suri Porfiado Ediciones, de la Argentina, y la revista digital La Raíz Invertida, de Colombia. El programa detallado del encuentro y las transmisiones estarán disponibles en la página de Facebook “Ciudades Invisibles”. Posteriormente, se publicará una antología digital con poemas de los participantes, que podrá ser descargada de las plataformas de las entidades organizadoras.“El escritor suele vivir al filo de la incertidumbre en la creación -dice la escritora Carolina Zamudio, organizadora del encuentro junto Xavier Oquendo Troncoso, Carlos Aldazábal, Hellman Pardo y Henry Alexander Gómez-. De esas profundidades personales surge el mundo propio que transmuta a veces en obra, así que este tiempo no le es extraño. Son momentos para cobijarse en la poesía ante las carencias de un mundo que brega por reconstruirse. Ciudades Invisibles es un acontecimiento maravilloso en el que emprendimientos culturales de cuatro países aúnan recursos para dar voz a sesenta poetas. La alusión a la maravilla del libro de Ítalo Calvino, que tiene antecedentes en las memorias de viaje de Marco Polo, lo demuestra”. Durante una semana, el hilo invisible de la poesía unirá diversas ciudades hispanoamericanas.“Salir a leer bajo las alas de Italo Calvino y aquellas preciosas ciudades invisibles que llenaron nuestro corazón ya es un anhelo cumplido, pero mucho más, ahora que nos hemos hecho todos invisibles, hacerlo con amigas yamigos de toda una vida, hablo de María Teresa Andruetto, de Juan Carlos Mestre, de Coral Bracho, de Alfredo Fresia, de Yirama Castaño, de Marco Antonio Campos y de Piedad Bonnett, lo es mucho más -dice la escritora Diana Bellessi a LA NACION-. Llegará el día de los abrazos, amigas y amigos míos ahora solo vistos por Zoom; pronto llegará y otra vez corretearemos por ciudades latinoamericanas visibles, tomando nuestro vino o nuestro ron. Por ahora en las pantallas, ¡salud!”. En julio, el sello Bajo la Luna reeditará El jardín, libro de poemas de Bellessi publicado en 1991, hace treinta años.Flyer del Primer Encuentro Internacional de Poesía “Ciudades Invisibles” (captu/)Para el escritor colombiano Pablo Montoya, que leerá poemas el sábado 26 a las 17 junto con Juan Carlos Mestre, la paraguaya Lía Colombino y María Negroni, la poesía es una atalaya y una trinchera. “Porque son tiempos estos de resistencia y lucha -señala el premiado autor de Tríptico de la infamia-. El poema como cuenco de agua y como estandarte. Porque en las ciudades del mundo, en las habitadas e imaginadas, hay deseos fragorosos de envolverse en las palabras. Y en las noches apaciguadas, la poesía nos abre los ojos para que veamos en las estrellas el trazado de la eternidad abrazado a nuestras respiraciones breves. El poema, ese trozo indeleble de sonidos, como una de las formas de la dignidad, la valentía y el amor. Aquí estamos, estas nuevas voces remotas, para cantarle a lo que nos une en los sueños y a lo que nos aleja en la pesada cotidianidad de los días. Para decir que la poesía es y seguirá siendo la esperanza y la consolación ante la catástrofe y la muerte”.Además de las catorce mesas de lecturas de poesía -en la que participarán 60 poetas de 19 países, todos ellos reconocidos y premiados-, habrá tres charlas de debate moderadas por los organizadores sobre un canon posible de la poesía latinoamericana (este lunes a las 17), la poesía en la era digital (el martes a las 17) y la poesía para “el final de los tiempos”, que tendrá lugar el miércoles a las 20.Un poema de la antología de Ciudades InvisiblesBogotáAquí voy yo, sin metas y sin rumbos,odiándome en tu esquina sin sorpresas,en el mezquino barrio donde habito,en el precario verde que embellecetu triste fealdad de puta vieja.Aquí voy contra ti en la roja tarde,sola voy, sola voy, entre ti, sola.Ciudad hecha de trucos y de azares,inconsistente juego de escondrijos.Necesito inventarte, recorrerte,encontrarme en tus calles innombradas;mirarme en la nostalgia de un postigoque a la rudeza de tu luz se cierra;enredarme en tus noches pederastas,en el temblor de todas tus mañanas.Pero te siento ajena y enemiga,Y yo sin asideros, yo perdiday para siempre sola en tus entrañas. (1989)De Piedad Bonnett

Fuente: La Nación

 Like