Hasta ahora, la excepcionalidad argentina consistía en las equivocadas decisiones económicas. Alberto Fernández acaba de agregarle al país un presidente excepcionalmente extraviado, injusto en sus descripciones y confuso en sus aseveraciones. La suma de tales desvaríos construye un país con pocas expectativas de futuro, que es el dato más relevante en cualquier medición sobre el estado de la sociedad. El Presidente provocó un malestar continental con dos apariciones públicas en apenas 48 horas. Brasil, México y Perú le reclamaron por cosas que había dicho mal; solo de algunas se retractó. El debate no consiste en descifrar de dónde vienen los argentinos, como quiso explicar erróneamente el Presidente, sino hacia dónde van. Y en cuántos se van del país o se quieren ir. Nadie habla de este éxodo argentino en dosis que se produce cada diez años.Si bien Octavio Paz habló de que los argentinos descienden de los barcos, fue Carlos Fuentes el que le dio una fórmula escrita elegante e irónica: “Los mexicanos descienden de los aztecas, los peruanos de los incas y los argentinos de los barcos”. Era una ironía cariñosa de dos de los más célebres escritores que dio la lengua española. No fue nunca la conclusión de un estudio demográfico; fue solo humorismo literario. Alberto Fernández le atribuyó a Paz, premio Nobel de Literatura, una frase ofensiva: “Los mexicanos descienden de los indios, los brasileños de la selva y los argentinos de los barcos”. Ni Paz ni Fuentes (ni Martín Caparrós, citado por Fuentes) hablaron ni escribieron nunca de “indios” ni de “selva”, que fueron los giros más despectivos; tampoco de Brasil ni de brasileños. Al día siguiente, reconoció que la frase era de Litto Nebbia. Confundir a un premio Nobel con un rockero argentino (por más méritos que tenga la obra de Nebbia) señala las limitaciones intelectuales del Presidente o las de sus colaboradores, si es que fueron estos los que le acercaron la falsa frase que le adjudicó a Octavio Paz.El Presidente se convirtió de pronto en una caricatura de la arrogancia argentina. Los dos países más grandes de América Latina vienen de los indios o de la selva, pero los argentinos vienen de Europa. El papa Francisco suele repetir una vieja broma sobre los argentinos: “¿Sabe cómo se suicidan los argentinos? Se suben a su ego y se lanzan al vacío”. ¿No es eso lo que hizo Alberto Fernández, aunque haya sido (valga el oxímoron) un suicidio involuntario? Ya el año pasado, el Presidente había exhibido el egocentrismo argentino cuando estaba hablando de la pandemia: “El mundo, de alguna manera, nos envidia”, dijo sobre los resultados locales de la peste. Seis meses después, la Argentina figura entre los países con más muertos y contagiados por millón de habitantes.Todas las fuentes indican que esos despistes presidenciales provocaron un ataque de furia de su mentora y vicepresidenta, Cristina Kirchner. No solo la enfureció el error, sino también que su ahijado político haya deshecho el camino recorrido por ella. Para la expresidenta, la colonización española fue una obra de genocidas; por eso, la estatua de Cristóbal Colón (un genovés al servicio del reino de Castilla) terminó tirada en el patio trasero de la Casa de Gobierno en los últimos años de su presidencia. Debe reconocerse que Cristina se equivoca en qué dice (y en qué piensa), pero no en cómo lo dice. Dice bien lo que piensa mal.Nadie reparó, a todo esto, en el incómodo momento que el mandatario argentino le hizo pasar al presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, que estaba al lado de Alberto Fernández cuando este cometió el desvarío verbal. Justo las cámaras de televisión no captaron el rostro de Sánchez en el instante en que Alberto divagaba sobre indios y selvas. A pesar de que Sánchez construyó una coalición extravagante en España, él pertenece al establishment del Partido Socialista, la organización política que más tiempo gobernó la democracia de España. Para la diplomacia española hay tres países especialmente importantes en América Latina: México, Brasil y la Argentina. Ya sea por las numerosas colectividades españolas o por la inversión de empresarios de España en esos países, lo cierto es que México y Brasil no son indiferentes para ningún gobierno español. Sánchez no hizo ni dijo nada, pero una mala racha lo colocó en el momento inoportuno y en el lugar inadecuado. Gracias, Alberto.Álvaro Pava Camelo, embajador de Colombia, cuestionó a Alberto Fernández: “La intromisión no es bienvenida”La otra particularidad argentina es el exitismo. Alberto Fernández lo cultivó, al día siguiente del escándalo con México y Brasil, cuando felicitó por el triunfo al “presidente electo” de Perú, Pedro Castillo. Quería llegar primero, antes que cualquier otro, corriendo en auxilio del supuesto vencedor. No había entonces presidente electo en Perú, porque ninguna autoridad electoral peruana había anunciado un vencedor en la infartante segunda vuelta de las elecciones presidenciales. No lo hay todavía, cuando la diferencia entre Castillo y Keiko Fujimori es de apenas 50.000 votos. Pero Castillo va primero por esa mínima diferencia y alguien (¿quién?) le aseguró al Presidente que el resultado es inmodificable. La consecuencia fue una formal nota de protesta de la cancillería peruana al gobierno argentino por los dichos del Presidente. La familia Bolsonaro había manifestado su queja en las redes sociales. Pero no solo los Bolsonaro se ofendieron; el nacionalismo brasileño, que es casi unánime en su sociedad y en su dirigencia política, estaba erizado contra Alberto Fernández. Hasta el Partido de los Trabajadores, la organización del expresidente Lula da Silva, deslizó su malestar. La prensa mexicana criticó duramente al presidente argentino y describió su frase como racista y discriminatoria. El expresidente de México Felipe Calderón dijo que la frase de Alberto “era más propia de Cantinflas que de Octavio Paz”. El gobierno de López Obrador prefirió enfadarse en silencio.Nada le fue suficiente. Un día después dijo un discurso confuso en el que habló de tierras improductivas y criticó a sus dueños porque las guardan para que las hereden sus hijos. No se sabe si promovió la reforma agraria (que había descartado 48 horas antes) o si anunciaba una ola de expropiaciones. O si solo volvía a divagar sobre lo divino y lo humano como hacen los argentinos (o hacían hasta antes de la pandemia) sentados en un café. Lo cierto es que el derecho a la propiedad privada es también una garantía constitucional de los que heredan. Dos días antes había asegurado que él estaba dispuesto a distribuir “tierras fiscales improductivas” para que nadie lo acuse de “hacer una reforma agraria”. Después, ya no habló de tierras fiscales, sino de propiedades privadas que serán heredadas y que podrían ser utilizadas ahora por los que necesitan viviendas. ¿Cuál Alberto Fernández es el verdadero? ¿Qué quiso decir? ¿Cuándo o dónde estaba el pensamiento real del Presidente? En una coalición en la que no faltan los que sueñan con una revolución, un discurso de esa naturaleza puede abrir las puertas de la justicia social por mano propia.Alberto Fernández se transformó en una persona decidida a agradar a quien tiene delante de él. La alusión a los mexicanos y brasileños fue un intento de decirle a Pedro Sánchez que él es como los españoles. También la Argentina y los argentinos. No había necesidad. Ningún dirigente español desconoce la enorme influencia de la colectividad española en la Argentina. La felicitación a Castillo fue un gesto desesperado para quedar bien con quien cree que será el próximo presidente de Perú. Erró y se apresuró. Rectificó y se disculpó en algunos casos. De un país de escritores como Borges y Cortázar; de científicos como Houssay, Leloir y Milstein (todos premios Nobel), y de deportistas como Jorge Valdano, con sólida formación intelectual e inquebrantable sentido común, se espera un presidente que diga bien lo que quiere decir. Sin confusiones, sin ofensas y sin disparates.

Fuente: La Nación

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La palabra negligencia, incluida en el artículo 4 de la ley de vacunas por iniciativa de legisladores del Frente de Todos, no se coló de forma inadvertida. En otros términos, esta negligencia no fue por negligencia, sino intencional. Y, si la calificación fuese penal, se la llamaría dolosa. Posiblemente, en la historia legislativa argentina no haya existido ningún otro término solitario y singular que haya provocado tanto costo social como ese.En la emergencia mundial causada por la pandemia, la industria farmacéutica aceleró los plazos de investigación y desarrollo de nuevas vacunas para el Covid-19, reduciendo a meses un proceso complejo que suele tardar de diez a 15 años. Además de su eficacia, los ensayos clínicos procuran disminuir al mínimo los riesgos de efectos adversos. En plazos más cortos, los riesgos son mayores.Con mucho sentido común, los gobiernos de Estados Unidos y de la Unión Europea flexibilizaron sus normas para hacer posible el lanzamiento de nuevas vacunas “antes de tiempo”. La Food and Drug Administration (FDA) estadounidense recurrió a la Autorización de Uso de Emergencia (EUA, por sus siglas en inglés), que permite el uso de medicamentos aún sin aprobación, en graves emergencias sanitarias cuando no existen alternativas adecuadas, aprobadas y disponibles. Para emitir una EUA, la FDA debe determinar que los beneficios conocidos y potenciales superan los riesgos conocidos y potenciales de la vacuna.Estas autorizaciones permiten dar por cumplidas las exigencias regulatorias y, mediante la rápida vacunación, normalizar las actividades diarias de los países e impedir los contagios, salvando vidas. Pero no liberan a los laboratorios de las posibles demandas por daños y perjuicios que pudiesen iniciar quienes consideren que han sufrido efectos adversos por el uso de aquellas.En la Argentina conocemos bien la industria del juicio, tanto en materia de accidentes de tránsito como laboral. En Estados Unidos existe una industria semejante, pero mucho peor, basada en la responsabilidad por productos elaborados (product liabitily). Son conocidas las sentencias en casos como el uso de asbesto en la construcción o los implantes mamarios. Los montos de las condenas son gigantescos, porque incluyen daños punitivos o ejemplificadores por los cuales las empresas no solo deben compensar el daño sufrido por el demandante, sino también los que pudiesen haber sufrido otros damnificados que no hicieron juicios.Es obvio que ningún laboratorio querrá correr el riesgo de vender vacunas en un contexto legal semejante, donde una sentencia puede mandarlo a la quiebra. Por eso, requieren que los Estados que las compran para inocularlas en su población asuman la responsabilidad de “cubrirlos” ante eventuales demandas –indemnidad– de los inmunizados, aunque algún juez considere que hubo negligencia durante la fabricación o distribución.Como la negligencia consiste en la falta de la diligencia que se espera de un laboratorio de primera línea, es muy probable que un tribunal neoyorquino considere, al momento de fallar, que esa empresa, aunque hubiese obtenido la EUA, no queda liberada por ello de su obligación de diligencia ante el público consumidor. Es decir, que debió haber cumplido con los protocolos habituales para el desarrollo y aprobación de vacunas. Sobre todo, en tribunales propensos a considerar que el público carece de información suficiente, que los laboratorios tienen seguros y que han ganado mucho dinero con sus vacunas.Todo lo que hemos descripto hasta aquí es obvio y bien conocido por los legisladores, muchos de los cuales tienen experiencia como abogados o como funcionarios avezados en problemas de salud pública.Al introducirse la palabra negligencia se resolvió, de forma intencional, excluir de la provisión de vacunas Pfizer a la Argentina, ya que es absolutamente imposible que ese laboratorio se exponga a juicios de daños y perjuicios, por el único interés de vender vacunas al gobierno argentino. Y, mucho menos, creando un antecedente negativo para los contratos con otros países. Cabe destacar que 116 países recibieron ya 640 millones de vacunas Pfizer y ninguno hizo el planteo de la Argentina.Como quedó aclarado en la exposición del gerente general de Pfizer Argentina en la Cámara de Diputados el martes pasado, la sanción de la ley con esa redacción impidió la provisión de un millón de vacunas en diciembre de 2020, sobre un total de 13.2 millones por entregarse este año. Como bien señaló Joaquín Morales Solá en su reciente columna en LANACION, a fines de este mes, la Argentina podría haber vacunado al 20% de su población si se hubiesen recibido los 8 millones de vacunas de Pfizer, comprometidas hasta esa fecha.No podemos juzgar intenciones, aunque resulta llamativo que la decisión política de introducir la palabra negligencia haya coincidido con los anuncios públicos acerca del acuerdo con AstraZeneca y su socio local, Hugo Sigman, como proveedores preferidos. Y luego, con el entusiasmo oficial por Rusia y China para intentar cubrir las vacunas faltantes.Todo lo que se haga en materia de vacunación, de aquí en adelante, debe ser bienvenido. Pero hay algo que no puede olvidarse, ni perdonarse: las miles de personas que murieron por falta de vacunas, por la inclusión dolosa de la palabra negligencia en la ley para impedir, con una pantomima jurídica, la llegada a la Argentina de la vacuna más respetada y utilizada en el mundo occidental.Tampoco pueden olvidarse ni perdonarse el desastre económico y educativo que han implicado los cierres de actividades para sustituir la ausencia de vacunas, con medidas restrictivas que han hundido a la economía argentina, diezmado la educación y multiplicado la pobreza.

Fuente: La Nación

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Seguí con particular interés las derivaciones del blooper múltiple presidencial que aludía de manera poco gentil, y hasta con involuntarios toques racistas, a los orígenes étnicos de los pueblos de Brasil y México.Muchos se preguntarán por qué “con particular interés”, y la respuesta es muy simple: el 31 de mayo último debí comparecer, convocado por el Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (Inadi), a una audiencia virtual con la licenciada Gabriela Liguori, directora ejecutiva de la Comisión Argentina para Refugiados y Migrantes (Caref), que había presentado una denuncia ante el organismo por mi expresión “conurbano africanizado” utilizada en este mismo espacio el 17 de enero último.A partir de que ese domingo, muy temprano, por Twitter, la diputada Gabriela Cerruti distorsionó aviesamente el sentido de mis palabras, que no tenían otro afán que subrayar que sectores del Gran Buenos Aires sufren índices socioeconómicos similares, o peores, a los de algunos de los países más pobres de ese continente, se desató lo que se podría catalogar como una campaña orquestada en la que, con el correr de las horas, se sumaron afirmaciones condenatorias (muchas de ellas, difamatorias) ya no solo de anónimos trolls, sino de importantes dirigentes del oficialismo, como el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, y, por supuesto, el staff completo de su periodismo adicto.Victoria Donda (Enrique Villegas/)De poco valió que durante las siguientes 48 horas me explayara con sucesivos mensajes en las redes para ampliar lo que era bastante obvio en el contexto de mi artículo: que de ninguna manera el adjetivo se refería a personas sino que solo apuntaba al comparativo de estadísticas entre una y otra región del mundo. El derecho a la defensa me fue denegado por completo: el escrache organizado no tomaba en cuenta ninguna de mis argumentaciones porque no resultaban convenientes para sus fines. Pero me parecía importante que personas de buena fe, ante tan insólita inquisición virtual, contaran al menos con mi versión de los hechos. Atravesamos la Era de la Cancelación, esa otra pandemia mundial que lideran autoerigidos correctismos dogmáticos y supuestamente moralistas que suelen esconder otros intereses.Debo decir, no obstante, que la larga conversación por Zoom con la titular del Caref fue en todo momento muy civilizada y hasta cordial, con la impecable asistencia de dos funcionarias del Inadi que colaboraron para mantener esa armonía y que el diálogo entre las partes fuera mutuamente enriquecedor. Liguori me contó que refugiados de ese continente se habían sentido afectados por aquel término de mi nota, que tanta controversia había levantado. Particularmente me refirió el caso de un senegalés que hasta le leyó una resolución de las Naciones Unidas sobre la triste problemática de los refugiados, cuando se quejó ante ella por la palabra en cuestión.Según un informe que la Defensoría del Pueblo dio a conocer en noviembre de 2020, hay en CABA un constante “hostigamiento institucionalizado” a los vendedores callejeros senegaleses. La indefensión de estas personas se agrava por la ausencia de una representación consular de Senegal en la Argentina, porque varios de ellos permanecen indocumentados y -cito una vez más al organismo- por las “dificultades en la comunicación, atento a la barrera idiomática existente”.Por eso me llamó mucho la atención que un miembro de esa comunidad hubiese reparado en una palabra de una columna de opinión de un diario escrito en castellano. Pero si así fue, y cumpliendo con lo que se me solicita, le ofrezco mis disculpas sin peros de ningún tipo en el mismo espacio donde se sintió tan afectado en su identidad. Y, de paso, le pido perdón también por todos aquellos que le agregaron perversas intencionalidades que jamás estuvieron en mi ánimo, solo para denostar a alguien que no piensa políticamente como ellos. Es más: me gustaría conocerlo. Será una buena ocasión también para felicitarlo sinceramente por sus auspiciosos avances en el conocimiento de nuestro idioma, al punto de poder detectar en las columnas políticas dominicales de este diario palabras que lo someten a un injusto sufrimiento.“El Inadi no había iniciado acción”, dijo la titular del organismo, Victoria Donda, sobre los recientes exabruptos presidenciales. No tuve la misma suerte: pocas horas después de aparecido mi artículo, el Inadi emitió un documento al respecto. Alberto Fernández envió una carta que Donda calificó de gesto “histórico, destacable y una excelente práctica”. Tampoco valieron mis reiteradas explicaciones públicas en las redes sociales, programas de radio y TV, y en nuevos artículos. Si le pasaba a Cristina Kirchner, hubiese hablado de lawfare.

Fuente: La Nación

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“¿Perdieron el sentido común o el corazón?”, se preguntó hace poco Florencio Randazzo en Twitter a raíz del aumento de un 40 por ciento en los sueldos de algunos políticos. El comentario generó revuelo entre quienes tienen oficio electoral y saben que, como dijo el psicólogo Drew Westen en su libro Cerebro Político, “las elecciones se ganan o se pierden en el terreno de las emociones”.Estar en sintonía con lo que sienten los votantes es clave para obtener un triunfo en las urnas. Pero no todo es tan sencillo: el problema fundamental es que nadie puede predecir hoy cuáles serán las emociones que guiarán la decisión de los ciudadanos en el momento de entrar al cuarto oscuro para las PASO, el próximo 12 de septiembre.Alinear el humor social con la fecha de las elecciones es una de las razones por las que las dos principales coaliciones políticas acordaron postergar la fecha de las PASO en la Argentina.Para el oficialismo, era esencial retrasarlas para intentar que más votantes llegasen al cuarto oscuro con una vacuna en el brazo y algo de optimismo en el corazón. Pero, ¿por qué accedió la oposición a posponer la elección, en vez de presionar para que se realizase en el momento de mayor enojo social con el oficialismo por la crisis económica y sanitaria?El peligro de los extremosSegún estudios realizados por la psicóloga social Jennifer Lerner, el enojo es un mal consejero para tomar decisiones debido a que quienes están enojados sienten un exceso de confianza en sus decisiones y minimizan los riesgos que podrían conllevar. En un experimento realizado en 2003, la autora expuso a un grupo de ciudadanos norteamericanos a noticias sobre paquetes enviados por correo con Ántrax, con el objetivo de que sintieran miedo. Y a otro grupo les hizo ver noticias de personas en Medio Oriente festejando los atentados del 11 de septiembre de 2001, con el objetivo de que experimentaran enojo.El resultado fue que quienes se mostraban enojados apoyaban medidas más duras contra los terroristas y veían menos amenazas en el mundo.Un análisis realizado recientemente por Dynamis Consulting sobre el humor social, clasificó al electorado argentino en cinco grupos, en función de la intensidad de su descontento según un índice compuesto en base a 13 variables.De acuerdo a este índice, una sólida mayoría del electorado está disconforme y un nueve por ciento manifiesta un pesimismo más intenso.Tal como describe Lerner, son justamente los votantes más enojados los que muestran mayor propensión a apoyar opciones electorales más extremas, como los libertarios, o a mantenerse indecisos y seguir a la pesca de alguna opción alternativa que los convenza más.Por lo tanto, un electorado intensamente enojado y dispuesto a arriesgarse por nuevas opciones sin medir las consecuencias tampoco es negocio para Juntos por el Cambio.En el otro extremo de la escala se encuentran los votantes optimistas.En la Argentina de hoy, azotada por la pandemia, la crisis económica y la confrontación política, este grupo es minoritario, pero no inexistente.Un 26 por ciento de los votantes se encuentran en el segmento más positivo de la escala y son, casi por unanimidad, propensos a apoyar al oficialista Frente de Todos.De todas maneras, Lerner opina que tampoco el optimismo es un buen consejero a la hora de tomar decisiones: algunos estudios demostraron que en esos casos se presta más atención a cuestiones como el agrado que les genera el emisor de los mensajes que a los resultados.Quizás sea la vinculación emotiva de estos votantes con Cristina Kirchner la que hace que la sigan apoyando sin importar los resultados de las políticas públicas implementadas en estos años de gestión.El equilibrioEn el medio de ambos extremos está el segmento desapasionado, un 21 por ciento del electorado que –según nuestra escala– no se siente ni pesimista ni optimista.Un bloque que podría potencialmente crecer considerando que, en promedio, en las últimas dos elecciones legislativas (2017 y 2013) hubo un tercio del electorado que eligió opciones diferentes a la izquierda o las dos principales fuerzas políticas que dominaron cada elección.Aunque, claro está, este bloque heterogéneo de votantes se dispersó en varias opciones diferenciadas.Y es entre ellos, los desapasionados, que una opción peronista no kirchnerista tiene mayor potencial de crecimiento.Quizás en eso pensó Randazzo al publicar en las redes una opinión contraria a sus colegas. Sin embargo, la gran pregunta es si este segmento se va a mantener hasta el día en que haya que ir a las urnas o será absorbido por la polarización.Para ello va a ser clave entender con qué humor llegan estos votantes al día de la elección. Si llegan enojados, habrá más posibilidad de que se inclinen por una propuesta electoral novedosa sin medir los riesgos que pueda conllevar.Es clave entender con qué humor llegan los votantes al día de la elección; las PASO serán el 12 de septiembre Si llegan con optimismo, entonces será fundamental la empatía y atracción que genere el o la líder que represente este espacio.Por ahora, el sentimiento que predomina en la sociedad argentina es la incertidumbre. Ésa es una mala noticia para los que aspiran a conquistar y expandir el centro del espectro político ya que, de acuerdo a investigaciones recientes realizadas por científicos de la Universidad Brown, la intolerancia a la incertidumbre genera opiniones políticas más polarizadas.De todos modos, a casi tres meses de las PASO, es difícil predecir cuál será el humor imperante en la sociedad ese día.Lo que sí podemos anticipar es que, en términos electorales, las emociones le ganan a la razón.Por eso, no hay construcción política posible que no empiece por el corazón.

Fuente: La Nación

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El estreno en Netflix de Selva trágica, película de la reconocida directora mexicana Yulene Olaizola, es una buena excusa para indagar en un cine latinoamericano rico y diverso, pero que suele estar fuera del radar de los algoritmos cuando uno ingresa a las distintas plataformas o se deja guiar por sus recomendaciones básicas. Selva trágica (México-Colombia/2020)Tras Intimidades de Shakespeare y Víctor Hugo (2008), Paraísos artificiales (2011), Fogo (2012) y Epitafio (2015), Yulene Olaizola filmó esta historia ambientada en la década de 1920, en la frondosa jungla y a lo largo del Río Hondo, en la frontera entre México y Belice. El film describe las diferencias de clase, los abusos del poder, la explotación del lugar (de una manera muy parecida al caucho se extrae chicle de los árboles), el racismo y las violentas disputas entre distintos grupos integrados por ingleses, blancos lugareños, indios y negros. Sin autoridades ni leyes, el lugar queda a merced de aquellos que disparan más y mejor. Con elementos que remiten a Tropical Malady, de Apichatpong Weerasethakul; Aguirre, la ira de Dios, de Werner Herzog; y El abrazo de la serpiente, de Ciro Guerra, Selva trágica recupera también algunos mitos y leyendas de la cultura maya, una veta ecologista y otra feminista, ciertos aires de western y del cine de aventuras, pero con una construcción dramática que luego deriva más hacia lo metafórico y la abstraccción. Tengo miedo, torero (Chile-Argentina-México/2020)En 2001, Pedro Lemebel publicó la que sería su única novela, en la que narró una historia de amor imposible en tiempos del fallido atentado contra Augusto Pinochet ocurrido el 7 de septiembre de 1986. Más allá de la rigurosa puesta en escena de Rodrigo Sepúlveda o de los aportes de los talentosos Sergio Armstrong en la fotografía y Pedro Aznar en la música (los diversos temas del soundtrack también son notables), buena parte del triunfo artístico se debe al extraordinario trabajo de Alfredo Castro, quien construye con el personaje de La Loca del Frente, una veterana travesti de clase baja que ocupa un decadente conventillo y sobrevive prostituyéndose, una de las mejores actuaciones de su ya distinguida carrera para un personaje querible y vulnerable, avasallante y dependiente, luchador e incomprendido a la vez. Belmonte (Uruguay/2018) Federico Veiroj, director de Acné (2008), La vida útil (2010), El apóstata (2015) y Así habló el cambista (2019), narra las desventuras de Javier Belmonte (Gonzalo Delgado), un artista plástico de moderado éxito. Nuestro antihéroe parece casi siempre un poco torpe, incómodo, desganado, confundido, resignado, descontento, a contramano de lo que quieren su exesposa Jeanne (Jeannette Sauksteliskis), sus padres o su hermano. Algo mejor le va con su hija Celeste (Olivia Molinaro Eijo), con la que se abre y se arriesga un poco más. Solitario y de pocas palabras, Belmonte se suma a la galería de protagonistas tragicómicos y disfuncionales del cine de Veiroj, quien hace gala de ese humor parco, asordinado, tan uruguayo y a la vez tan ligado al deadpan de Jim Jarmusch, Aki Kaurismäki y Martín Rejtman. Lemebel (Chile-Colombia/2019)Pedro Lemebel (1952-2015) fue un escritor, performer y activista chileno que se convirtió en una celebridad literaria mundial, en símbolo de la resistencia al pinochetismo y en referente de la lucha por los derechos de la comunidad LGBTIQ+. Joanna Reposi Garibaldi conoció al artista en 1999 y en 2007 ambos decidieron iniciar este proyecto cinematográfico que cuenta con un material de archivo extraordinario por la intimidad y visceralidad de sus imágenes con el que se van exponiendo el pensamiento, el accionar, las sensaciones, las contradicciones, los traumas y el genio creativo del autor. Sus interminables noches por bares como Jaque Mate o Insomnio, sus extravagantes looks que imitaban por momentos a Frida Kahlo o provocaban como el traje con agujas que llevó a Stonewall, su aporte al combativo colectivo homosexual Las Yeguas del Apocalipsis, las cuestiones musicales (desde una discusión por Pimpinela hasta el uso por parte de la directora del tema “Corazón de poeta”, de Jeanette) hasta su etapa final con una degradación producto del alcohol y la depresión, y más tarde por la quimioterapia en su lucha desigual contra el cáncer (desgarrador el momento en que pide perdón en público por su voz casi irreconocible luego de una operación) forman parte de esta suerte carta de amor y despedida en pantalla.Neruda (Chile-Argentina/2016)Pablo Larraín, uno de los directores chilenos de mayor proyección internacional (en Netflix se pueden ver Tony Manero, No y El club), rodó esta biopic que reconstruye una etapa (más política que cultural y con aires de thriller) en la vida de Pablo Neruda, perseguido en 1948 por el gobierno de Gabriel González Videla. El elenco multinacional incluye a Luis Gnecco, Mercedes Morán y Gael García Bernal. Tarde para morir joven (Chile-Brasil-Argentina/2018)En la plataforma Amazon Prime Video -donde también se puede ver la valiosa De jueves a domingo (2012), ópera prima de Dominga Sotomayor-, se lanzó este film ambientado en el verano de 1989 a 1990, durante los días finales de la dictadura de Augusto Pinochet. En un paraje rural, un grupo de varias familias amigas experimenta con una forma de vida comunitaria, mientras los más jóvenes atraviesan diversos rituales iniciáticos. La sensibilidad y lirismo de Sotomayor se vuelve a apreciar en este trabajo que le valió el premio a Mejor Dirección en el Festival de Locarno.Canción sin nombre (Perú/2019)La ópera prima de Melina León -estrenada en el Festival de Cannes- está ambientada durante la crisis sociopolítica y económica de 1988 (primer mandato de Alan García). En ese contexto e inspirándose en hechos reales, la directora narra en blanco y negro las desventuras de un matrimonio de indígenas veinteañeros que llega desde Ayacucho para instalarse en las afueras de Lima y al que le es arrebatado su recién nacido en el mismo momento del precario parto. Será un torturado periodista (que a su vez enfrenta su propia crisis de identidad sexual) quien investigue una red de tráfico de bebés de alcance internacional amparada (por desinterés o complicidad) por el corrupto poder político y judicial. Huachicolero (México/2019)Los huachicoleros se dedican a robar y revender combustible. Se trata de una actividad delictiva que en los últimos años ha explotado en México generando un caos (otro más) social y económico. La ópera prima de Edgar Nito aborda ese submundo en la región de Guanajuato como contexto de la historia de iniciación de Lalo (Eduardo Banda), un adolescente de 14 años que vive con su madre soltera (Myriam Bravo) en condiciones bastante precarias. Si bien asiste al colegio secundario (donde las diferencias sociales con el resto son notorias) y consigue algunos ingresos trabajando para Don Gilberto (Fernando Becerril), un hombre veterano que parece tenerle cierto aprecio, el protagonista se convence de que para dar el gran salto (esto es llegar a comprar un smartphone y ganar en autoestima para seducir a Ana, compañera de su curso) inevitablemente tendrá que sumergirse de lleno en el universo de los huachicoleros. Lo mejor de la película tiene que ver con el retrato de las contradicciones, tentaciones y esfuerzos de Lalo por trascender un sino trágico que parece envolver a casi todos. El agente topo (Chile/2020)En 2014, la chilena Maite Alberdi se había acercado con ternura y una inmensa capacidad de observación a la vida de su abuela y su grupo de amiga en La Once. En su más reciente largometraje, la directora de El salvavidas y The Grown-Ups vuelve sobre personajes ya entrados en años con mucha más audacia en la propuesta. En el inicio de El agente topo, Rómulo Aitken, el dueño de una agencia de detectives, pone un aviso en un diario ofreciendo un trabajo por tres meses a un hombre que tenga entre 80 y 90 años. Entre los múltiples candidatos, termina eligiendo a Sergio Chamy, un encantador viudo de 83 con más entusiasmo que talento para convertirse en espía, pero que cumplirá su misión dentro de un geriátrico. Entre el documental observacional, el noir, el cine de detectives, la comedia de enredos y hasta ciertos rasgos románticos y emotivos, El agente topo resulta una propuesta tragicómica y agridulce con unos cuantos pasajes inspirados de indudable autenticidad. El resultado fue una nominación al Oscar y otros múltiples reconocimientos.Nuevo orden (México/2020)Ganadora del Gran Premio del Jurado en la Mostra de Venecia, la nueva película del siempre provocador y muchas veces revulsivo Michel Franco propone un verdadero teatro de los horrores con el que denunciar el desmembramiento de la sociedad mexicana. Una mirada que en principio parece distópica, pero con muchas conexiones con la realidad actual en la que se abordan las diferencias de clase y la opresión. No apta para espíritus impresionables por su violencia extrema y (pre)destinada a la controversia encarnizada por su apuesta moral.

Fuente: La Nación

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CHICAGO (AP) — Dos personas murieron y al menos 30 más resultaron heridas en tiroteos masivos registrados durante la noche en tres estados de Estados Unidos, indicaron las autoridades el sábado, lo que avivó preocupaciones de que una agudización de actos violentos con armas de fuego en el país se extienda al verano al tiempo que se relajan las restricciones por la pandemia del coronavirus y más personas tienen permiso para socializar.Los ataque sucedieron la noche del viernes y la madrugada del sábado en Austin, la capital de Texas, Chicago y Savannah, Georgia.En Austin, las autoridades anunciaron el arresto de uno de los dos hombres sospechosos y la búsqueda del otro tras una balacera que se desató a primeras horas del sábado en una concurrida calle peatonal llena de bares y restaurantes ubicada en el centro de la ciudad. Catorce personas resultaron heridas, dos de ellas graves. en el tiroteo, que el jefe interino de la policía cree que inició como una disputa entre dos grupos de personas.Para la noche del sábado, aún no había reportes de arrestos en los otros dos tiroteos.En Chicago, una mujer murió y otras nueve personas fueron heridas cuando dos hombres abrieron fuego contra un grupo parado en una acera en el barrio de Chatham en la zona sur de la ciudad. Los agresores también huyeron y para la noche del sábado aún no habían sido identificados.En Savannah, ciudad del sur de Georgia, la policía indicó que un hombre fue asesinado y otras siete terminaron heridas en un tiroteo masivo la noche del viernes, según la policía. Dos de los heridos son niños —de 18 meses de nacido y de 13 años.El jefe de la policía de Savannah, Roy Minter, Jr., dijo que el incidente podría estar relacionado con una disputa en curso entre dos grupos, citando reportes de disparos en el mismo complejo de apartamentos a inicios de esta semana.“Resulta muy perturbador lo que hemos estado viendo en todo el país y el nivel de violencia con armas de fuego que estamos viendo en todo el país”, dijo a los reporteros el sábado. “Es perturbador y no tiene sentido”.Los incidentes suceden en medio de un relajamiento de las restricciones impuestas a raíz de la pandemia de COVID-19 en gran parte del país, incluyendo Chicago, que levantó muchas de las salvaguardas restantes el viernes. Muchos esperaban que el aumento de tiroteos y homicidios en Estados Unidos del año pasado fuera una anormalidad causada quizá por el estrés relacionado con la pandemia, el alza de la posesión de armas de fuego y el debate sobre la conducta policial. Pero tales índices siguen más altos que los registrados en épocas previas a la pandemia, incluso en ciudades cuyas autoridades se negaron a recortar los fondos para la policía después de la muerte del afroestadounidense George Floyd a manos de un policía blanco y en las ciudades que realizaron recortes modestos.“Había la esperanza de que esto simplemente fuera una irregularidad estadística que empezaría a disminuir”, subrayó Chuck Wexler, director ejecutivo del Foro de Investigación Ejecutiva de la Policía. “Eso no ha sucedido. Y eso es lo que realmente causa preocupación en los jefes de policía, que estemos dirigiéndonos a un periodo nuevo en que veamos un revés luego de 20 años de declive de estos crímenes”.De acuerdo con una base de datos compilada por The Associated Press, USA Today y la Universidad Northeastern, solo tres tiroteos masivos ocurrieron en espacios públicos —al cantidad más baja para esa categoría en una década— de un total de 19 tiroteos masivos en 2020.La base de datos rastrea todos los asesinatos masivos que incluyen tiroteos, que se definen como aquellos que causan la muerte al menos a cuatro personas, sin incluir al perpetrador.De acuerdo con esa definición, este año de antemano ha habido 17 asesinatos masivos, 16 de ellos tiroteos, dijo James Alan Fox, un criminólogo y profesor de la Universidad Northeastern.

Fuente: La Nación

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El presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha apuntado que Estados Unidos “definitivamente” ha vuelto al marco de cooperación internacional tras el fin de la Administración del expresidente estadounidense Donald Trump.”Tenemos que enfrentar muchos desafíos, muchas crisis (…) y para todas estas cuestiones, lo que necesitamos es cooperación. Y creo que es genial tener al presidente de Estados Unidos –Joe Biden– como parte del club y muy dispuestos a cooperar”, ha declarado Macron en declaraciones tras un encuentro con Biden en el marco de la reunión del G7, recogidas por la Casa Blanca.Por su parte, Biden ha remarcado que en estos días ha tenido “la oportunidad de pasar tiempo con el presidente Macron y conocerlo”, y que “aunque aún hay cosas de las que hablar más tarde, las cosas van bien”.”Creo que podemos hacer mucho. Estados Unidos estamos de regreso. Estados Unidos ha vuelto. Nos sentimos muy fuertemente conectados con la OTAN”, ha declarado el presidente estadounidense.Además, ha catalogado a la Unión Europea como una entidad “increíblemente fuerte” y que tiene “mucho que ver” con la capacidad de Europa Occidental para lidiar con asuntos económicos y ser, también, la “columna vertebral y el apoyo de la OTAN”.El encuentro entre ambos mandatarios se ha producido en el contexto de la reunión del G7 en la ciudad inglesa de Cornualles. Ambos líderes han remarcado su compromiso de “profundizar en las relaciones bilaterales y con la alianza transatlántica”, según un comunicado de la Casa Blanca.Así, destacaron su dedicación para poner fin a la pandemia, incluso a través de la donación de vacunas contra la COVID-19 a los países necesitados, así como buscar fórmulas para reformar el sistema tributario internacional para hacer frente a las desigualdades.En la misma línea, Biden ha puesto en valor el papel de Francia en materia climática a través del Acuerdo de París, y ambos presidentes han subrayado su objetivo de lograr resultados ambiciosos en la próxima cumbre del clima, que se celebrará en noviembre Glasgow.

Fuente: La Nación

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La pandemia de coronavirus COVID-19 se ha expandido por casi todos los distritos de la Argentina.

Al 12 de junio, en la provincia de La Rioja se contabilizan 19.421 casos de infectados y 578 muertos. Estas cifras son difundidas y actualizadas diariamente por el ministerio de Salud nacional.Con respecto al día anterior, se registraron 128 casos nuevos de enfermos de coronavirus en La Rioja, según lo informado por las autoridades sanitarias.
Y si se toma en cuenta los últimos siete días, se incorporaron 1269 casos al segmento de afectados por el virus.A la fecha, se registran en el país un total 4.111.147 de infectados por coronavirus, 3.695.288 pacientes recuperados y 85.075 muertos. Y dentro de la estadística nacional, la provincia de La Rioja se encuentra en el puesto 24 de los distritos más damnificados de la Argentina.

La lista está encabezada por Buenos Aires con 1.724.180 casos reportados.Toda la información sobre el coronavirus en la ArgentinaCuarentena en Argentina: qué se sabe al día de hoy

Fuente: La Nación

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La pandemia de coronavirus COVID-19 se ha expandido por casi todos los distritos de la Argentina.

Al 12 de junio, en la provincia de Misiones se contabilizan 22.566 casos de infectados y 348 muertos. Estas cifras son difundidas y actualizadas diariamente por el ministerio de Salud nacional.Con respecto al día anterior, se registraron 163 casos nuevos de enfermos de coronavirus en Misiones, según lo informado por las autoridades sanitarias.
Y si se toma en cuenta los últimos siete días, se incorporaron 1416 casos al segmento de afectados por el virus.A la fecha, se registran en el país un total 4.111.147 de infectados por coronavirus, 3.695.288 pacientes recuperados y 85.075 muertos. Y dentro de la estadística nacional, la provincia de Misiones se encuentra en el puesto 23 de los distritos más damnificados de la Argentina.

La lista está encabezada por Buenos Aires con 1.724.180 casos reportados.Toda la información sobre el coronavirus en la ArgentinaCuarentena en Argentina: qué se sabe al día de hoy

Fuente: La Nación

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La pandemia de coronavirus COVID-19 se ha expandido por casi todos los distritos de la Argentina.

Al 12 de junio, en la provincia de Catamarca se contabilizan 28.777 casos de infectados y 227 muertos. Estas cifras son difundidas y actualizadas diariamente por el ministerio de Salud nacional.Con respecto al día anterior, se registraron 329 casos nuevos de enfermos de coronavirus en Catamarca, según lo informado por las autoridades sanitarias.
Y si se toma en cuenta los últimos siete días, se incorporaron 3330 casos al segmento de afectados por el virus.A la fecha, se registran en el país un total 4.111.147 de infectados por coronavirus, 3.695.288 pacientes recuperados y 85.075 muertos. Y dentro de la estadística nacional, la provincia de Catamarca se encuentra en el puesto 22 de los distritos más damnificados de la Argentina.

La lista está encabezada por Buenos Aires con 1.724.180 casos reportados.Toda la información sobre el coronavirus en la ArgentinaCuarentena en Argentina: qué se sabe al día de hoy

Fuente: La Nación

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