Boca y, sobre todo, Miguel Ángel Russo necesitaban coronarse en la Copa de la Liga Profesional pero sus diagnósticos parecían contradictorios en la actualidad: porque hasta aquí, el Xeneize venía jugando apáticamente, pero avanzaba de etapas. Así, igual, se ilusionaba con acumular un nuevo título local. Pero no era una ecuación con la que podía llegar muy lejos. Lo primero se mantuvo (ante Racing volvió a jugar mal), y en lo segundo no le alcanzó ni para acceder a la final, por la derrota por penales 4-2 tras empatar sin goles ante la Academia, en San Juan. ¿Qué significado tiene esta eliminación de cara al futuro?Boca abajo: Agustín Rossi volvió a estar inseguro en el arco y Edwin Cardona finalizó el semestre sin ser determinanteUna vez más en este ciclo, la forma de perder resalta más el objetivo no cumplido. La eliminación es la ratificación de que, con lo que tiene en su plantel, no le alcanza para el anhelo mayor, la Copa Libertadores. Más allá de que Boca ya está clasificado para los octavos de final del certamen internacional, su mayor problema no son las estadísticas, sino los rendimientos. El rendimiento del equipo ante Racing volvió a ser soporífero y esto ya es una costumbre. Eliminar a River en la instancia previa, en un contexto especial por la cantidad de contagios que había sufrido el Millonario, nunca resultó una inyección anímica lo suficientemente potente como para mejorar el juego ni desde lo individual ni desde lo colectivo. La única satisfacción, en ese caso, será haber cortado la racha en los mano a mano contra el River de Marcelo Gallardo.Miguel Angel Russo, DT de Boca (JUAN MABROMATA/)“Es difícil hablar sobre el partido. El rival pensó en defender, utilizó su juego y nada más. Pero no me quejo de nada”, dijo Miguel Ángel Russo luego del partido en San Juan, hablando mucho de Racing y nada de sus hombres. A la hora de la verdad, tampoco es que Boca haya mostrado un juego muy ambicioso. Sí inquietó más en la segunda etapa, pero lejos estuvo de ser un equipo protagonista o que haya merecido ganar en los 90 minutos.Seguramente, el mea culpa quedará pendiente para hacerlo puertas adentro. El técnico, sumado a un Consejo de Fútbol que hace rato tiene entre sus evaluaciones la pobre cara que el equipo ofrece partido a partido, saben muy bien que necesitan un cambio radical. Por lo pronto, lo que más estaba en duda era justamente el puesto de Russo: desde el grupo que lidera Juan Román Riquelme ratifican que no será despedido.Juan Román Riquelme, vice presidente de Boca y líder del consejo de fútbol, buscarán reforzar el equipo para el segundo semestre de 2021Reconocen responsabilidades compartidas y, quizás, sea eso lo que lo deja en el cargo al entrenador: en el Consejo admiten que los mercados de pases (seis refuerzos en tres recesos) no fueron exitosos para el armado de un plantel más competitivo. Entonces, el que viene será clave.En ese sentido, las negociaciones que ya están activas pasan por los delanteros Nicolás Orsini, de Lanús, y Norberto Briasco, de Huracán: casi cerrado lo del primero, empezaron las charlas por el hombre de la selección de Armenia. Además de la llegada del atacante del Globo estaría arreglada la del volante Esteban Rolón, ejecutando la cláusula de rescisión, valuada en U$S 500.000.Quedan a la expectativa los refuerzos de jerarquía. Los nombres fuertes que se rumorean son el colombiano Roger Martínez y el peruano Luis Advíncula, acaso los puestos prioritarios a reforzar: el ‘9’ y el lateral derecho.Nicolás Orsini, delantero de Lanús, festeja uno de sus goles frente a Boca, en la Bombonera; será uno de los primeros refuerzos para Russo (Nahuel Ventura / POOL ARGRA/)En cuanto a salidas, Mauro Zárate y Julio Buffarini no seguirán después del 30 de junio. Se agregarán Emmanuel Mas, Leonardo Jara, Franco Soldano y, posiblemente, Nicolás Capaldo: estaría cerca de ser vendido al Salzburgo, de Austria.¿Y Carlos Tevez? Impactó su penal en el travesaño y su semblante en los partidos evidencia fastidio con el momento del equipo. Habrá que ver si junto a Riquelme deciden acordar los seis meses más que incluye su contrato: la definición de la Libertadores lleva a pensar en su continuidad.La continuidad de Tevez, una de las situaciones que debe resolver el consejo de fútbol Xeneize“Boca fue el que más jugó”Además, Russo señaló al cierre del semestre y el calendario ajustado como los culpables de que saliera una semifinal sin emociones. “La mayoría de los partidos de cuartos y semis se definieron por penales. Creo que tiene que ver con el final de la temporada. Boca ha sido el que más jugó y tiene jugadores con mayores esfuerzos en este tiempo”.Sin decirlo, Russo sabe que la Libertadores le da aire. “El balance es bueno porque llegamos a octavos de final. Después teníamos que tratar de pelear el torneo hasta el final”, terminó conforme y pensó en lo que viene: “Tenemos que descansar y reiniciar todo, porque viene algo muy difícil. Los que han clasificado son todos fuertes”. Segundo de su grupo, este martes -desde las 13-, el sorteo dirá con quién se cruzará post Copa América.Racing venció a Boca por penales y es finalista de la Copa de la LigaY es que ese es el horizonte: para el segundo semestre, lo doméstico ya parece no ser más que una anotación en la evaluación sobre Russo, porque lo esencial pasará por conocer si, finalmente, era el DT indicado para reencontrarse con el trofeo más anhelado.

Fuente: La Nación

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