La selección de Argentina, con un gol del sevillista ‘Papu’ Gómez, superó esta madrugada a Paraguay (1-0) para lograr el pase a los cuartos de final de la Copa América, donde también está ya Chile, que cosechó un empate ante Uruguay (1-1) que le bastó para avanzar en el torneo continental.En el Estadio Mané Garrincha de Brasilia, la albiceleste avisó nada más arrancar con un zurdazo desde fuera del área del ‘Papu’ Gómez que se fue alto y otro remate sin fortuna del barcelonista Sergio ‘Kun’ Agüero, pero el futbolista del conjunto nerviosense no falló en su siguiente oportunidad.En el minuto 10, Leo Messi inició una gran jugada de ataque y cedió el balón a Ángel Di María, que habilitó al ‘Papu’, para abrir el marcador ante la salida de Silva. Poco después, ‘la Pulga’ estuvo a punto de incrementar la ventaja en una falta directa que se marchó rozando el palo.Los de Eduardo Berizzo no conseguían llevar peligro al área argentina, mientras el combinado dirigido por Lionel Scaloni se conformaba con la escasa renta. El panorama cambió en la segunda mitad, con Paraguay dominando, aunque sin excesivo peligro.Por su parte, Chile y Uruguay se repartieron los puntos en el duelo en Cuiabá de la tercera jornada. Los charrúas, que no dispararon a puerta ni una sola vez en su debut ante Argentina, obligaron a actuar a Claudio Bravo en tres ocasiones antes del minuto 10, cos dos disparos de Giorgian De Arrascaeta y un cabezazo de Edinson Cavani.Sin embargo, fue ‘la Roja’ la que consiguió adelantarse en una combinación entre Ben Brereton y Eduardo Vargas que culminó con un potente disparo el delantero del Atlético Mineiro (min.26).Los de Óscar Tabárez tuvieron que esperar hasta el 66 para neutralizar el tanto de su rival, en un saque de esquina en el que Arturo Vidal, en un salto con Luis Suárez, introdujo el balón en su propia portería.Con estos resultados, Argentina se queda como único líder del Grupo A con 7 puntos, dos más que Chile (5), mientras que Paraguay acumula tres, Uruguay uno y Bolivia todavía no ha estrenado su casillero.
Fuente: La Nación