Suele pasar que a veces tenemos”intrusos” en la huerta que nos rompen, comen o dejan desechos y, no sería la primera vez que más de uno abandona su proyecto hortícola por estos motivos. Por eso, en Infocampo te dejamos métodos para espantar a distintos tipos de animales de la huerta.
Cabe aclarar que un método puede funcionar para varios tipos de animales y también, la efectividad depende no sólo de la especie animal sino de cada individuo particular, ya que, como sabemos no todos los perros o gatos tienen los mismos gustos, por ejemplo.
Perros

Citricos: la mayoría de los perros odian los olores cítricos, en especial si se encuentran concentrados. Por lo tanto, olores como el del limón, la naranja o las mandarinas los harán desaparecer en segundos. 
Lo mejor de esta estrategia es que a pesar de ser un buen “repelente de perros”, este rociado cítrico es completamente inofensivo para él.
Algo que podés hacer es extraer un poco de jugo de limón y mezclarlo con un poco de agua. De esta manera, podrás usarlo como un spray que podés rociar en casi cualquier parte y funcionará como un repelente temporal. Vale aclarar que el gusto puede educarse, y si acostumbrás a tu perro a oler o consumir cítricos lo más probable es que deje de molestarle.
Vinagre: lamentablemente el olor del vinagre no es agradable para los humanos tampoco, es la única desventaja que puede tener ya que, es efectivo para alejar a los perros, de todos modos, podés empapar pedazos de algodón o paños en vinagre y situarlos en las zonas que quieras. Mucho cuidado con las plantas, ya que el vinagre podría quemarlas.
Vallado natural: la propuesta que te hacemos tiene que ver con incorporar a tu huerta un obstáculo natural confeccionado por diferentes especies de plantas.
Hay quienes se sienten incómodos con la idea de colocar un alambrado porque prefieren no hacer divisiones muy drásticas en su jardín. En esos casos, serían excelentes alternativas algunos arbustos y plantas que a los perros no les gustan mucho. Esta barrera podría estar formada por especies como la verbena, la equinácea o arbustos de laurel y árboles de arándanos.
Mojarlos: se trata de añadir a tu huerta unos irrigadores que seguramente no le serán de mucho agrado a tu perro porque se verá mojado en algunas ocasiones y no querrá que le pase otra vez.
Existen en el mercado sistemas de riego que se activan con el movimiento y arrojarán agua ante el menor indicio de la cercanía del perro.
Combinaciones explosivas: existen otras combinaciones aromáticas que son desagradables para tu perro y los mantendrá lejos de tus preciadas plantas y flores.
La mezcla de polvo de mostaza y pimienta es una de ellas y solo necesitás espolvorearla en las zonas donde a tu mascota le gusta jugar con la tierra. Repetilo por unas semanas y observá el resultado.
Lo más obvio: limitar el paso al jardín es el truco más lógico y obvio. El modo en que lo hagas ya es elección tuya, pero podés optar por vallados de madera, plástico o metal, por un cerco natural diseñado con pequeños árboles o arbustos que impidan su paso.
Ya dependerá del tamaño o agilidad de tu mascota, la altura o resistencia de este tipo de límites.
Gatos

Esparcir de cáscaras de cítricos por toda la zona afectada o rociar con aceites esenciales de naranja y limón una vez a la semana.
Rociar con vinagre una vez por semana la zona afectada evitando rociar la planta o el suelo cercano ya que, puede acidificarlo.
Poner un aspersor automático por movimiento. Puede ser caro pero te ahorrás molestias a largo plazo.
Tener la manguera a mano y ducharlos con agua cada vez que se acerquen a tu huerta.
Poner plantas amplias que cubran la superficie, así pasarán de largo.
Poner trampas ruidosas para que cuando pasen al rozarlas suenen y se asusten.
Plantar plantas olorosas como yerbabuena, albahaca, falso curry, menta…
Poner botellas de agua pequeñas o de 1,5 l llenas de agua pero sin tapa por los sitios por donde pasan, así cuando los gatos las tiren sin querer se mojaran y asociarán esa zona a mojarse, por lo que no volverán a pasar.
Plantar toda la zona y en los huecos poner palos enterrados en la tierra.
Infusión de canela, lavanda y romero. Dejar la mezcla en reposo durante varias horas y añadir 15 gotas de aceite esencial de naranja o una tacita de vinagre. Rociar por donde pasa el gato, no rociar encima de las hojas de las plantas.
Limón y Eucalipto: 10 gotas de aceite de limón y 20 gotas de aceite de eucalipto, mezclar y rociar en las zonas afectadas.
Poner acolchado a tus plantas.
Infusión de ajo, el olor los repele.

Pájaros

Espantapájaros electrónico: emiten ultrasonidos que ahuyentan a las aves y son imperceptibles para el oído humano.
Espantapájaros móviles: se pueden hacer molinos o veletas que al darles el viento se muevan, deben estar hechas con color rojo ya que este color hace que los pájaros no se acerquen.
Redes anti-aves: se rodea el árbol con una red para evitar que piquen los frutos. Este es un método efectivo y económico. Se recomienda poner la malla solo en la época que salgan los frutos para evitar hacerle daño al árbol.
Cds, tiras reflectantes, espantapájaros tradicionales, aves rapaces de mentira, solo funcionan por un corto período de tiempo ya que los animales se acostumbran y ven que no son peligrosos.
Repelente granulado para árboles: son unas bolsas pequeñas que se cuelgan de las ramas cuyo olor espanta a los pájaros pero son totalmente inofensivas para las aves.
Conejos

Esparcir orina de depredadores parece ser algo muy efectivo, por ejemplo de perro y si esta no la pueden conseguir, la arena de gato nos servirá perfectamente (usada por supuesto). La ponemos alrededor de la huerta para que no se acerquen.
Dispositivos de ultrasonido.
Podemos plantar alrededor de nuestra huerta varias plantas de Digitalis purpurea porque el olor de sus flores no les gusta.
Poner una valla de 80 cm de alto y enterrarla al menos 20 cm para que no pasen escarbando.
Vacas

Ropa o cualquier otro objeto colgado en las puertas y vallas: esto va a detener a los animales, especialmente si la pieza o el objeto es de color amarillo.
Plásticos y papeles que se muevan.
Movimientos lentos en las aspas de los ventiladores: las vacas no tienen problema cuando los ventiladores están en funcionamiento, pero cuando las aspas se mueven lentamente por acción de las corrientes de aire, suelen distraerse obsesivamente en algunos casos y no se mueven. Esto es frecuente en ventiladores colocados en ventanas, que al moverse lentamente provocan brillos y sombras.
Cadenas o cuerdas colgadas que se mueven: dejamos colgadas cadenas o cuerdas que al moverse, puede hacer que los animales se paren o rechacen pasar, especialmente si la cadena es nueva y brilla.
Golpes y ruidos metálicos.
Caracoles y babosas

Invernaderos de plástico: consiste básicamente en sacarle la base a botellas o bidones vacios y transparentes y, usarlos como “invernaderos” para los vegetales o frutos. Si los querés colocar en el suelo basta con enterrarlos un poco para que no los vuele el viento.

También es importante hacerles agujeros pequeños para que las plantas transpiren y liberen su calor.
 

Fuente: InfoCampo

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