El ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, se metió hoy en la interna que atraviesa la Corte Suprema, luego que Ricardo Lorezentti calificara de “irregular” la elección de Horacio Rosatti como presidente del máximo tribunal. “Hay demasiadas cosas en juegos como para no darse cuenta que con estos gestos lo que hace la Corte es autoesmerilarse de una manera innecesaria”, sentenció el funcionario.“La Corte Suprema debe encontrar su cauce y eso lo tienen que resolver sus 5 integrantes ¿Quién se va a meter? ¿El poder Ejecutivo, el Legislativo? No”, señaló Fernández en diálogo con AM 750 en relación a las tensiones que atraviesa el máximo tribunal.Y continuó: “En este momento, con sus contratiempos, la Corte no goza de respeto del resto de los poderes”. Por otro lado, Fernández ahondó en la necesidad de incrementar el número de miembros del máximo tribunal.Nicolás Trotta habló de desencuentros con el Presidente y dijo que “no imaginaba” su salida del Gabinete“En mí opinión personal, que no es la del ministro ni la del Gobierno, habría que pensar en una ampliación de la Corte”, consideró el ministro de Seguridad como una posible solución a las internas dentro del tribunal.Y en ese sentido, argumentó: “Habiendo tantos países con varios miembros de la Corte.. El impacto de uno solo de los ministros hace que esté en un juego el 20% de la composición del tribunal y eso es algo que no tendría que ser tan contundente”.Las declaraciones de Fernández sobre el tema se suma a algunas voces del Gobierno que deslizaron críticas ante la “forma” que fue designado Rosatti como presidente de la Corte.María Eugenia Vidal le respondió a Aníbal Fernández, que dijo que el oficialismo no perdió la elección“Es una Corte de cinco y el único voto que no es de ellos (en referencia también al de Rosenkrantz, que quedó elegido como vicepresidente) es el de Juan Carlos Maqueda”, indicó a LA NACION una fuente del Ejecutivo en referencia a que los tres votos que tuvieron fueron los de sí mismos y el del cordobés.El descargo de LorenzettiTras varias horas de tensión y discusiones entre los integrantes de la Corte, Horacio Rosatti fue elegido este jueves presidente del máximo tribunal y Carlos Rosenkrantz, vicepresidente.La designación de Rosatti fue respaldada por su antecesor, Rosenkrantz y por Juan Carlos Maqueda, pero resistida por Ricardo Lorenzetti y por Elena Highton, quienes de acuerdo al acta de la reunión difundida por el tribunal, no participaron del acuerdo.Sin embargo, las tensiones se elevaron cuando Lorezentti envió al resto de los ministros una durísima carta en la que criticó la forma en que se eligió a Rosatti al calificar el proceso “irregular”, porque el magistrado se votó a sí mismo, algo que el reglamento lo permite.Asimismo, Lorenzetti apuntó en su misiva que este accionar “contradice los precedentes y la tradición de la Corte Suprema, y ha afectado el prestigio de la institución y de la elección misma”.
Fuente: La Nación