Tras cuatro meses de capa caída -dos por las restricciones oficiales para contener al covid-, la economía volvió a reaccionar a la “normalización” de actividades y creció 2,5% mensual en junio. En el semestre acumuló un alza de 9,7%, siempre en una comparación que incluye las grandes distorsiones que implicó una actividad prácticamente cerrada el año pasado por la rígida y extendida cuarentena argentina dispuesta por el Gobierno de Alberto Fernández.Lo mismo puede decirse de la medida interanual del Estimador Mensual de la Actividad Económica (EMAE), que mostró un avance de 10,8% en la medida interanual (ese indicador también compara contra una base muy baja).Según los propios datos del organismo estadístico, el nivel de actividad no superó aún el nivel prepandemia (febrero 2020) en la serie desestacionalizada; mientras que junio de 2021 -el dato publicado por el instituto que conduce Marco Lavagna- no traspasó le umbral de ese mes en 2019, un año marcado a fuego por la volatilidad cambiaria y la recesión económica. El EMAE venía de cuatro caídas desestacionalizadas, las dos últimas en meses golpeados por las más leves restricciones de la segunda ola de coronavirus. En abril, había mostrado un retroceso de 0,3%; y en mayo, de 2%, según el Indec.El REM del Banco Central (BCRA) indicó a comienzos de este mes que esperaba un crecimiento del Producto Bruto Interno (PBI) real para 2021 de 6,8% tras registrarse en 2020 una caída de 9,9% interanual. El Gobierno, en tanto, es más optimista. La semana pasada, el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, pronosticó un alza de 8% “o más” para este año.Con relación a la variación trimestral desestacionalizada del PBI, la estimación de los economistas relevados por el BCRA para el segundo trimestre se corrigió aminorando la contracción estimada en 1 punto con relación a la encuesta previa hasta -1,5%. Los participantes del REM sugirieron un crecimiento de 0,5% para el tercer y el cuarto trimestre del año.“Como era esperado gracias a indicadores adelantados, la actividad tuvo una suba mensual en junio de 2,5% luego de cuatro meses consecutivos de caídas evidenciando el rebote de la caída en abril y mayo por las restricciones impuestas por la segunda ola del COVID”, afirmó la consultora Empiria. “De este modo se recupera el nivel de actividad de marzo y se espera que durante los meses de julio y agosto la actividad se mantenga al alza, aunque con crecimientos menores. Esperamos un crecimiento de 7% para 2021, aunque vale destacar que 6% de ese crecimiento es efecto arrastre, por lo que prácticamente la economía apenas crece”, indicaron.
Fuente: La Nación