WASHINGTON, 31 jul (Reuters) – El Senado de Estados Unidos
continuará trabajando el sábado en un proyecto de ley de un
billón de dólares para carreteras, líneas ferroviarias y otras
infraestructuras, la principal prioridad legislativa del
presidente Joe Biden.El ambicioso plan cuenta con el respaldo de demócratas y
republicanos y ya ha superado dos obstáculos por amplios
márgenes en el estrechamente dividido Senado.En una muestra de la complicada negociación que conlleva, la
votación para iniciar el debate del proyecto se suspendió
durante 45 minutos el viernes, ya que los legisladores se
preguntaban cómo afectaría al servicio de Internet de banda
ancha.Finalmente, el Senado votó por 66 a 28 a favor del proyecto
de ley, con 16 republicanos que se unieron a la aprobación de
los 48 demócratas y dos independientes.El paquete aumentará drásticamente el gasto del país en
carreteras, puentes, tránsito y aeropuertos. Los partidarios de
la ley prevén que se apruebe en el Senado y en la Cámara de
Representantes, y que llegue a la mesa de Biden para que la
firme.La ley incluye unos 550.000 millones de dólares en nuevos
gastos, además de 450.000 millones de dólares ya aprobados.
También incluye dinero para eliminar las tuberías de agua de
plomo y construir estaciones de carga para vehículos eléctricos.Pero hasta el viernes por la noche, la legislación todavía
se estaba redactando. Una vez completada esa tarea, posiblemente
el sábado, se convertirá en un punto de partida desde el que los
miembros individuales ofrecerán sus enmiendas.El proyecto de ley no incluye la financiación de la mayoría
de las iniciativas sociales y sobre el cambio climático que los
demócratas pretenden aprobar en un proyecto separado de 3,5
billones de dólares sin el apoyo de los republicanos.Los demócratas tienen márgenes muy estrechos tanto en el
Senado como en la Cámara de Representantes, lo que significa que
el partido debe mantenerse unido para lograr sus objetivos
legislativos.
(Reporte de Andy Sullivan, David Morgan y Richard Cowan
Editado en español por Javier López de Lérida)
Fuente: La Nación