Quienes tienen la posibilidad de visitar Los alpes en Italia suelen disfrutar de un entorno turístico repleto de bellísimos paisajes naturales y los infaltables deportes, tanto en invierno (esquí) como en verano (montañismo y senderismo). Además, la gente que vive en esos pueblos suele ser muy amable y los mejores guías. Quienes más que ellos que se encuentran rodeados de naturaleza y viven los 365 días del año en una envidiable zona. Los aportes de los lugareños le imprimen un encanto especial a estos pueblos. Las costumbres, la hospitalidad y, como no podía faltar tratándose de Italia, la espléndida cocina lo convierten en un gran destino. Más aún cuando las historias locales sorprenden hasta al turista avezado. En los alpes italianos, el campanario de una iglesia del siglo XIV que sorprende a los visitantesUn paraíso terrenalDentro de esta zona se encuentra el Lago Reschen, en el Sur del Tirol, cerca de la frontera que separa Italia de Austria. Se trata de un lugar de ensueño al que los visitantes que llegan a esta parte de Europa se muestran encantados. Y no es para menos. El lugar es un paraíso pocas veces vistas. Montañas que se asoman a lo lejos, pequeños pinos que se dejan ver a pocos metros y árboles con flores que hacen de ese sitio el lugar ideal que ofrece la naturaleza para descansar, si lo prefieren, pasear o simplemente quedarse quietos con los ojos cerrados como deseando que ese momento sea eterno.En los alpes italianos, el campanario de una iglesia del siglo XIV que sorprende a los visitantesProbablemente si a estos turistas les pidieran que retraten en una solo foto la experiencia de haber estado en Los Alpes Italianos, una gran mayoría pondría en un cuadrito un sector particular de este paraíso: el que arrastra una curiosa historia. Qué pasó con la iglesia que antaño era muy concurrida por cientos de feligreses y que, durante la segunda parte del siglo XX, quedó, precisamente, sumergida en este lago.¿Qué pasó con la iglesia de Curon y su pueblo?Hace cientos de años la iglesia de Curon era uno de los pilares de este pueblo, espacio de muchos feligreses que acudían asiduamente para presenciar los diferentes servicios. Era, además, un punto de encuentro para los moradores que encontraban en la religión la perfecta excusa para pasar un rato juntos. Todo parecía normal y para 1940 nada hacía pensar que podía llegar a suceder un fenómeno no natural que cambiaría para siempre la realidad de la mayoría de los vecinos de esa zona.Hermosa vista de un atardecer en uno de los pueblos italianos de Los Alpes.Hasta ese momento existían dos grandes lagos naturales: el Lago de Resia y el Lago de Curon, pero en 1940 se decidió crear un único lago artificial de importantes dimensiones que los uniera. El resultado de este proyecto tuvo sus consecuencias. Esa conjunción generó un nuevo lago al que llamaron definitivamente Lago de Resia, también conocido como el lago del medio. Pero por negligencia, impericia o siendo poco conscientes de lo que estaban organizando las autoridades, este nuevo lago fue creado sobre el antiguo pueblo. ¿Se habrá tratado de un error? ¿Fue premeditado? Preguntas que por ahora no tienen respuestas y casi seguro que nunca las tendrán.“Este cambio en el diseño provocó que varios pueblos fueran tragados por el agua”“La idea principal del proyecto no era la de inundar el pueblo de Curon, sino la de crear un lago artificial de unos 5 metros de profundidad, pero finalmente este se modificó y se apostó por crear uno con 22 metros de profundidad que uniera los dos lagos naturales. Este cambio en el diseño provocó que varios pueblos fueran tragados por el agua, siendo uno de ellos Curon, cuyos habitantes tuvieron que resignarse y abandonar el sitio donde vivían”, describe el sitio arquitecturaideal.“Todas sus casas, que sumaban más de una centena, así como sus cientos de hectáreas de superficie que empleaban los habitantes para cultivar, fueron destruidas y sumergidas bajo el agua. El único edificio que se libró parcialmente del nuevo y gran lago fue el campanario de la iglesia de Santa Caterina, que, al ser la construcción más alta del municipio, se mantuvo visible sobre las aguas. Por ello, este campanario procedente del siglo XIV se alza sobre las gélidas aguas del Resia, originando una imagen insólita y extraordinaria”, escribieron los creadores de viajerosblog tras un viaje que realizaron por la zona en el año 2012.Espectacular atardecer sobre el lago y el campanario. (Gentileza senderos italianos/)El número exacto de casas que se perdieron en las aguas es 163 y a los damnificados se les entregó dinero para que pudieran arrancar de cero en otro lugar. ¿Alguien les habrá preguntado a estas personas antes de provocar la unión de estos dos lagos? ¿Les habrá alcanzado la plata para poder mudarse a algún otro pueblo que pudiera conectarlos con la belleza de la naturaleza? Tampoco estas preguntas tienen respuestas.Más allá de si la acción fue o no premeditada y de que la iglesia dejó de funcionar, el atractivo que tiene el lugar no sería el mismo si no estuviera flotando ese mítico campanario. Sin dudas, ya es un ícono de la zona y los turistas, desde lo lejos, día a día toman fotografías de lo que antaño fuera esa iglesia. En invierno, cuando el lago se congela, muchos se animan a rodearlo y conocer un poco de su magia de cerca.Lo más notable es como esa torre aún se puede ver casi intacta, como flotando sobre el agua. Para la vista de los turistas, un cuadro perfecto en medio de un paisaje naturalmente hermoso que les resultará imposible olvidar.

Fuente: La Nación

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