De tanto concurso de postres, de asado, de baile, de máscaras y de canto, el espectador atento ya puede ir adivinando ciertos comportamientos de los jurados. Que te aplaudo pero no te elijo, que te critico pero me encantás, que te falta mejorar pero sos el mejor en lo tuyo, y así. Sin embargo este lunes, La Voz Argentina perdió por un rato la simpatía y arremetió demasiado duro contra una participante que llegó con su mejor ilusión pero se fue con las manos vacías.“¿Cantar para tí es un sueño o es una realidad?”, le preguntó Ricardo Montaner a Jimena Jans, una chica de 25 años que nació en Capitán Sarmiento y actualmente vive en Rosario. Ante la duda de ella, el jurado insistió: “¿Vives del canto?”. Nerviosa porque nadie se había dado vuelta cuando ella interpretó “Chacarera de un triste”, Jans explicó que acababa de terminar la licenciatura en fonoaudiología, que solo le faltaba la tesis.Pero Montaner siguió su línea de pensamiento ante el silencio de sus colegas: “Yo tengo una idea. Cuando uno viene a un escenario como La Voz, que es una plataforma mundial, yo siento que es porque tomó una decisión. Y yo siento que tú no la has tomado, eso trascendió y nos dimos cuenta cuando te escuchábamos”.El estudio, cuyo ambiente suele ser una suma de emociones, se quedó en silencio mientras el cantante cerró su lapidaria devolución: “Debes pensarlo, y volver cuando estés decidida a ser una verdadera cantante, y a que esto no sea un Plan B sino que sea el A”.Ni Lali Espósito, ni mucho menos Mau y Ricky abrieron la boca, pero sorprendentemente fue La Sole quien tomó la palabra, pero para apoyar a su compañero: “Coincido con Ricardo. Prestá atención a lo que dice la letra, la canción comienza con un sufrimiento y tenemos que transmitirlo”.La concursante retornó llorando a los brazos de su mejor amiga, según ella por la emoción del momento. Sin embargo, del otro lado de la pantalla la sensación fue otra: que al jurado se le fue la mano con una crítica que estuvo muy lejos de ser constructiva.
Fuente: La Nación