Tras las inéditas protestas en distintas ciudades de Cuba contra el régimen de Miguel Díaz-Canel, la tensión, aunque en mucha menor escala, se trasladó a la embajada de ese país en la Argentina. Cubanos exiliados protestaron y se toparon con militantes que defienden al régimen castrista. Insultos cruzados se dieron en la sede de la embajada cubana.El origen del conflicto tuvo lugar el domingo en La Habana y en ciudades de Cuba, cuando miles de ciudadanos de ese país salieron a las calles a protestar contra el gobierno de Díaz-Canel, por la grave crisis económica y social y por la situación sanitaria en el marco de la pandemia de coronavirus.Protestas en Cuba: por qué Díaz-Canel se enfrenta al peor escenario posibleEn el barrio porteño de Belgrano, las secuelas de esa multitudinaria protesta se trasladaron afuera de la embajada cuando se acercaron cubanos exiliados para sumarse a las protestas contra el presidente de ese país, Miguel Díaz-Canel. Con doble cordón policial de por medio, el primer grupo se enfrentó con organizaciones sociales, como Barrios de Pie y movimientos políticos a favor del régimen cubano.Qué pasa en CubaEl pasado domingo, se desencadenó una ola de protestas que comenzó en el interior de Cuba y luego llegó a La Habana. Cientos de ciudadanos coparon el emblemático Malecón, en una de las protestas más importantes contra el régimen comunista. Como ocurrió en el “Maleconazo” de 1994, los manifestantes fueron echados por las fuerzas gubernamentales.El gobierno estaba “dispuesto a todo”, como dejó muy claro el presidente Miguel Díaz-Canel en su aparición televisiva tras visitar San Antonio de los Baños, uno de los municipios rebeldes.Una multitudinaria e inédita protesta en las calles sorprende al régimen cubano“Tienen que pasar por encima de nuestros cadáveres y estamos dispuestos a todo. No vamos a admitir que ningún mercenario y contrarrevolucionario provoque un estallido. Convocamos a todos los revolucionarios y comunistas a enfrentar en las calles estas manifestaciones. No vamos a permitir que nadie manipule para imponer un plan anexionista”, dijo el mandatario cubano.Periodistas independientes alertaron sobre el comienzo de la represión y el despliegue de las fuerzas especiales en distintas zonas de La Habana. Además, organizaciones de derechos humanos reportaron las primeras detenciones y los primeros golpeados.

Fuente: La Nación

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