La ONG Amnistía Internacional (AI) ha alertado este miércoles de que la Ley de Seguridad Nacional impuesta por en China en Hong Kong, que entró en vigor hace un año, “ha diezmado las libertades” del territorio y ha creado una “emergencia de Derechos Humanos”.En su informe, ‘En el nombre de la Seguridad Nacional’, Amnistía ha denunciado que con esta legislación, las autoridades cuentan con vía libre para criminalizar de manera ilegal la disidencia, al mismo tiempo que ha suprimido los derechos de las personas contra las que se aplica.”En un año, la Ley de Seguridad Nacional ha puesto a Hong Kong en una vía rápida para convertirse en un Estado policial y ha creado una emergencia de Derechos Humanos para quienes viven allí”, ha lamentado la directora regional de AI para Asia y Oceanía, Yamini Mishra.”Desde la política hasta la cultura, pasando por la educación y los medios de comunicación, la ley ha afectado a todas y cada una de las partes de la sociedad hongkonesa y ha fomentado un clima de miedo que obliga a los residentes a pensar dos veces lo que dicen, lo que tuitean y cómo viven su vida”, denuncia.Amnistía ha basado su informe en el análisis de sentencias judiciales y en entrevistas a activistas afectados por la legislación, la cual utiliza el pretexto de la seguridad nacional “para justificar la censura y el hostigamiento”.”Esta ley, general y represiva, amenaza con convertir la ciudad en un erial de Derechos Humanos que recuerda cada vez más a China continental”, valora Mishra.Más de 30 detenidos el primer día de leyAmnistía Internacional ha recordado que el 1 de julio de 2020, el día en el que entró en vigor la ley, la Policía de Hong Kong detuvo a más de 30 manifestantes, diez de los cuales fueron acusados de infringirla. Desde entonces, el Gobierno ha seguido arrestando y enjuiciando a decenas de personas “sólo por ejercer sus derechos a la libertad de expresión, de reunión pacífica y de asociación”.”Las personas acusadas en aplicación de la Ley son objeto de presunción de culpabilidad y no de inocencia”, ha señalado la ONG, que ha cifrado en un 70 por ciento los enjuiciados a los que se les ha negado la libertad provisional.El informe revela cómo las autoridades utilizan la ley para, entre otras cosas, reprimir el alcance internacional de la crisis bajo el pretexto de “conspiración para actuar en connivencia” con “fuerzas extranjeras”; o dar amplias competencias a la Policía para llevar a cabo registros y la incautación de material periodístico, como ha ocurrido con el diario ‘Apple Daily’, clausurado recientemente.Mishra ha pedido al Gobierno de Hong Kong que deje de poner como pretexto la “seguridad nacional” para “restringir libertades”, que retire todos los cargos penales formulados contra las personas actualmente enjuiciadas “por ejercer sus Derechos Humanos”, y ha interpelado a Naciones Unidas para que inicie un “debate urgente” sobre lo que está ocurriendo en el territorio.Aprobada el primero de julio de 2020 por unanimidad en la Asamblea Nacional de China e impuesta sobre Hong Kong sin una consulta pública previa, desde entonces han sido detenidas al menos 114 personas en base a esta ley, de las cuales 64 han sido acusadas formalmente de delitos que van desde “la subversión contra el Estado”, “terrorismo”, o “connivencia con fuerzas extranjeras”. Otras 45 personas permanecen bajo custodia a la espera de juicio.
Fuente: La Nación