En la región del Alto Valle argentino, más precisamente en Vista Alegre (Neuquén) crece poco a poco un emprendimiento llamado “Buena Vida” que está realizando una transición hacia el modelo agroecológico.
Buscando que la producción sea sustentable desde todos los puntos de vista, abarcando tanto el factor comercial así como también en el resguardo del hábitat familiar y su alimentación, los productores buscaron el asesoramiento del INTA para continuar en el camino de la transición.
Marcelo González, técnico del INTA Centenario, y Saniago Domini y Betina Mauricio del INTA Cipolletti son los asesores del proyecto de producción hortícola.
Según Marcelo González, el proceso de transición agroecológica de “Buena Vida” comenzó durante la primera temporada de los productores en la chacra, cuando la estrategia de producción bajo buenas prácticas agrícolas y comercialización convencional no resultó tan rentable y puso en evidencia algunas contradicciones con el proyecto de vida imaginado.
A su vez, la demanda de los productos obtenidos sin el uso de agroquímicos que comercializaban en canales cortos empezó a crecer y a reflejar cada vez más importancia en los resultados económicos de la chacra.
Aquí convergieron el interés productivo y la demanda, donde ambas eslabones de la cadena de alimentos estaban buscando cosas diferentes a lo convencional.
En ese sentido se adoptó una herramienta de evaluación denominada TAPE (Herramientas para la Evaluación del Desempeño de la Agroecología por sus siglas en inglés) desarrollada en 2019 por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y que se encuentra en estado de evaluación y adaptación.
Según Carolina Starr, oficial de agricultura de la FAO de la región de Europa y el Asia central, “TAPE es un instrumento para comprender qué es lo que hay que mejorar a nivel local y cuáles son las limitaciones de los respectivos entornos institucionales propicios para lograr transiciones más amplias a la agroecología”.
Para conocer más sobre TAPE, hacer click AQUÍ, o para descargar el manual de TAPE (versión inglés) puede hacer click AQUÍ.
Para Santiago Domini, esta metodología permite comparar distintos sistemas productivos e identificar los puntos críticos sobre los cuales priorizar las acciones tendientes a la mejora de la sustentabilidad, el desarrollo y/o adaptación de distintas tecnologías y prácticas de manejo y su validación de manera participativa junto a productores, consumidores y otros actores.
Sugerencias
Los técnicos del INTA, luego de realizar el análisis pertinente recomendaron trabajar sobre los siguientes aspectos:
* Aumento de la biodiversidad mediante la introducción de más animales al sistema
* Incorporación de cultivos forrajeros en el esquema de rotación de cultivos hortícolas
De esta manera se contribuye a la producción de proteína animal, al reciclado y el aporte de nutrientes al suelo mediante pastoreo directo y/o compostaje, la mejora de la salud del suelo, y el manejo de plagas y enfermedades, además de otros servicios como el manejo de vegetación no deseada en cuadros destinados a próximos cultivos, acequias y caminos, indicaron.
Betina Mauricio concluyó: “Desde el equipo técnico nos proponemos acompañar la aplicación de las técnicas agroecológicas, evidenciar su impacto dentro de la escala de referencia de la metodología TAPE y continuar favoreciendo la circulación territorial de los conocimientos y aprendizajes que de desprenden de esta y otras valiosas experiencias”.The post La historia de “Buena vida”, la chacra en transición al modelo agroecológico first appeared on Infocampo.

Fuente: InfoCampo

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