El autor plantea que el diferencial que reconocía el valor agregado a la harina y el aceite de soja permitía a las industrias pagar mejores precios a los agricultores por sus granos.
Fuente: Clarín Rural
El autor plantea que el diferencial que reconocía el valor agregado a la harina y el aceite de soja permitía a las industrias pagar mejores precios a los agricultores por sus granos.
Fuente: Clarín Rural